20.07.08

Viva la poesía

El científico dice: “la estrella se ve” o “la estrella no se ve.” El poeta dice: “Tímida, la estrella se asoma.”

El técnico dijo: “Ese coche ya no funciona más; hay que venderlo por chatarra.” El poeta replica: “El camino… ¡cuántos caminos! se han agolpado en las entrañas de mi coche; ebrio de vida y de historia, necesita por igual del sueño y de la lucidez del recuerdo.”

El computador dice: “Se ha llenado este disco duro. Borre archivos o conecte un disco de mayor capacidad.” El poeta comenta: “Cada nuevo recuerdo, es un nuevo huésped de mi alma. Los demás salen a recibirlo y las historias del recién llegado a todos entretienen.”

El médico pragmático anuncia: “El paciente está en coma irreversible, y es cosa que debemos asumir. Punto.” El poeta dice: Aguardad, que aún no se sabe si es un punto o un punto y coma.”

El negociante de la bolsa dice: “¡Es hora de comparar!” Y por la tarde dice: “¡Es hora de vender!” El poeta garrapatea: “Es hora de aprender; es tiempo de callar…”

El sepulturero dice: “Juan Pablo ha muerto.” El poeta escribe parsimonioso y convencido en su cuaderno: “Juan Pablo entregó la vida.”

El escéptico dice: “Mira, tu semilla, la de la esquina del jardín, se murió.” El poeta reclama: “¿Y ya viste cómo en esa esquina hay un brote nuevo donde ella estaba?”

Fr. Nelson Medina, O.P.

18.07.08

Este no es exactamente un post, sino un conversatorio

Amigos,

Como muchos de vosotros, sigo con interés cada paso de la Jornada Mundial de la Juventud. Mi ángulo particular es la evangelización. Creo que pocas ocasiones tiene la Iglesia de enviar un mensaje tan vigoroso a tantas personas al mismo tiempo.

Ahora bien, acabo de leer el Discurso del Papa en el encuentro con representantes de otras religiones. Como todo lo de Benedicto, brillante; original en muchos puntos pero siempre en continuidad con nuestra fe. Mi pregunta es: ¿por qué en un evento esencialmente evangelizador, cuando el Papa tiene delante al rabino, al jeque y a no sé quién más, no brotan las palabras: Os invito a recibir a Jesucristo como vuestro Salvador y Redentor? ¿Es mala diplomacia invitar a un rabino a que crea en Jesucristo como el mesías esperado?

Me interesan vuestro comentarios.

Fr. Nelson Medina, O.P.

15.07.08

Ya empezaron a "enfermar" al Papa

“¡Vuelve y juega!,” decimos en algunos países. Ya lo hicieron con Juan Pablo II; ahora ya empezaron a hacerlo con Benedicto XVI. Prepararse todos para el estribillo in crescendo: “el Papa está cansado; el Papa está débil; el Papa está enfermo; el Papa ya no gobierna; el Papa debería renunciar, porque quien manda es la Curia…” Con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud no faltan los reportes de prensa que quieren introducir el tema… a ver si pega.

O sea, ya van a “enfermar” al Papa. ¿El best-seller de la Modernidad? Podría llamarse: “1001 modos de neutralizar a un Papa.” Estos son algunos de los capítulos en la sección dedicada a los periodistas:

1. Los Borgia, o cómo tener siempre tema.

2. Galileo, o cómo asegurarse que la Iglesia siempre esté en pugna con la ciencia.

3. Los escándalos del clero: será tu culpa si no aprovechas esa mina.

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14.07.08

Taxonomía de los Comentaristas... no es nada personal.

Voy a hablar de los comentaristas. Todos estarán de acuerdo en que es justo: ellos hablan de los bloggers; ha llegado la hora de nosotros hablar de ellos. Por lo menos, de clasificarlos, porque es un hecho que los hay de todos los pelambres. He aquí las principales especies:

1. El SPAMMER. Es el más odiado de todos. Reparte links llenos de virus, software espía (malware), y quiere a toda costa que agrandes tu cuerpo, o por lo menos, algunas partes de él. Gracias a Dios, se logra controlar bastante por medio de “listas negras” y otros aditamentos que hoy pertenecen al arsenal común de todo blogger. La batalla, sin embargo, no está ganada.

2. El MONO, o sea: MONO-temático. Este siempre comenta algo pero ese “algo” es siempre lo mismo. Si, por ejemplo, su tema-obsesión son las crueldades de la Inquisición, y tú escribes sobre cómo se está derritiendo la capa de hielo del Artico, este tío te sale con algo como: “Tarde se preocupa la Iglesia de los temas de Ciencia, la misma Iglesia que torturó a Galileo, quemó a Giordano Bruno, etc. etc. etc. …” Si escribes sobre la Jornada Mundial de la Juventud, el obsesivo sale con: “Ojalá no oculten a esos jóvenes las torturas que otros jóvenes sufrieron cuando, por ejemplo, Galileo fue torturado, etc. etc. etc. …” Si escribes sobre la distinción entre trans-substanciación y trans-significación en el tratado teológico de la Eucaristía, el hombre (o mujer) saldrá invariablemente con la suya: “¡Aja! ¿Ahora crees que puedes enredarnos con tratadillos de teología trasnochada para que olvidemos cómo Galielo fue torturado? Etc. etc. etc. …” Por supuesto, al pobre no le interesa la historia, y quizás ni sabe bien lo de Galileo. Sus principales fuentes son J. J. Benítez, Dan Brown y algún otro.

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12.07.08