19.10.17

Sobre el "rito nepalí" (un gran fruto del progresismo misional)

I.

No es fácil encontrar al Obispo en esta diócesis ya que es una zona enorme y Su Excelencia vive visitando todas las comunidades edificando grandemente al pueblo de Dios.
Estando de paso por la ciudad de Nhamchy, un sacerdote me dijo que providencialmente el Obispo iba a pasar por acá en un par de días. El sacerdote me recibió en la casa religiosa, donde viven varios prelados de la misma congregación.

Me recibieron con gran caridad, con una hospitalidad propia del Buen Samaritano. Pero, una cosa fue del todo crucificante: la Liturgia. Expliquémoslo.



II.

Todos los días a las 06:30 tenemos la Santa Misa, en la cual participan unos ocho sacerdotes religiosos y algunas feligresas que estudian en el profesorado anexo a la casa presbiteral.
A mí me toca siempre concelebrar. Aunque, hablando con más propiedad, el único que concelebra aquí soy yo ya que ningún sacerdote salvo el “presidente” recita la fórmula consecratoria. .
Desde ya que salvo el celebrante principal, ningún otro prelado usa ornamentos. A mí me prohibieron revestirme. El mismo celebrante principal puede optar entre usar una casulla o un extraño manto llamado “shor” que sólo cubre los hombros y parte de la espalda. El shor es usado por los brahmines (¿no será “brahmanes”, en español?) hindúes al invocar a los ídolos del panteón.

Ningún sacerdote besa el altar, ni al comienzo ni al final, ni siquiera el “presidente” (personalmente, me causa rechazo la expresión “presidente” para referirnos al celebrante principal pero no conocemos más sinónimos).

Ninguno, ni siquiera el celebrante principal, respeta las posturas litúrgicas, ni aun elementalmente. En efecto, en toda la Misa, sólo hay una sola postura: estar sentados. Nadie se para, nadie se arrodilla y, más aún, ni siquiera los sacerdotes elevan los brazos. Yo fui el único que elevó los brazos al rezar el Padre Nuestro.

Los sacerdotes “concelebrantes” pasan a recibir la comunión como cualquier laico respondiendo “amén” luego de que el celebrante principal dice “el Cuerpo y la Sangre de Cristo".
Demás está decir que, hasta donde vi, nadie, al entrar a la capilla, hizo la genuflexión.
El mismo altar es bajísimo de modo tal que es imposible celebrar de pie salvo que uno quiera contraer lumbalgia (sería una lumbalgia litúrgica contraída por salvar el decoro de los ritos sacros).

Nadie se queda a hacer la acción de gracias. El desayuno empieza inmediatamente después de la Misa.

En la capilla no hay ningún santo salvo una obligada imagen mariana y un cuadrito de la Madre Teresa.
La capilla carece de asientos de iglesia y reclinatorios. No recuerdo haber visto la pila de agua bendita. Parece más un salón protestante que una capilla católica.



III.

En el desayuno, le pregunté a los curas lo siguiente:

- “¿Qué rito estamos celebrando? Pregunto esto porque esto no es el rito latino. ¿Es esto rito nepalí?".


No se esperaban esta pregunta. Entonces, uno de los sacerdotes me dijo:

- “Es rito latino, ¿por qué preguntas?".

Y le dije:

- “Pregunto porque es una misa muy distinta, es una misa sentados…".

Se quedó sin respuesta y le dio la palabra a uno más viejo, el padre X.
El padre X dijo:

- “Es rito latino pero inculturado. Los malabares tienen su rito, los griegos tienen su rito, acá hace falta un rito inculturado".

Y luego criticó al Papado y al Episcopado por no haber aprobado una liturgia inculturada al estilo de la India.

Entonces, le dije:

- “Pero, en este distrito hay al menos seis culturas distintas (subbas, tibetanos, rongs, hindúes, …), ergo no podemos imponerles una inculturación india".

Me respondió que hay que hacer una inculturación según la cultura dominante. Le repliqué que en esta zona es motivo de seria disputa tribal la identificación de la cultura dominante. En efecto, cada tribu suele creer que la suya es la predominante.

La réplica mía era irrefutable y entonces el sacerdote “inculturador” dibujó una nueva teoría:

- “Es preciso inventar una inculturación litúrgica que respete el mínimo común denominador de las culturas del país”.

Aclaremos que acá el país tiene más de 1000 lenguas diversas por lo cual es muy difícil, o imposible, hallar siquiera un patrón cultural común. Pero, le contesté que el país en cuestión históricamente invadió la zona en la que estamos y que por ende la pretendida inculturación es en realidad una agresión. Su respuesta fue sincera y breve: “estoy completamente de acuerdo”. Ninguno de los sacerdotes presentes aportó más nada.

 

IV.

 

En el desayuno, no estaba el padre Z., que es mi anfitrión. Ergo a media mañana le repetí brevemente el diálogo del desayuno y le pregunté quién es el inventor de este extraño modo de celebrar la Misa. Lo cierto es que ya muchas veces y en diversos lugares he visto y padecido este mismo “modus orandi”.

El padre Z. me dijo que todo se remonta al post-concilio, cuando apareció una tendencia de ciertos “teólogos” de diversas congregaciones que quisieron inculturar el Evangelio en India. En el medio de la charla, llegó el padre X y juntos me dieron el elenco de nombres: Balasuriya OMI, Anthony De Mello SJ, Panhikar, Amaladoss SJ, Dupuis SJ y un español llamado Bermejo. Casi todos ellos ya fallecieron pero su influjo sigue vivo.

Es interesante remarcar que el padre Z me dijo lo siguiente: “si en Roma se enteraran de cómo celebramos la Misa, tendríamos problemas…”.

- “Yo, como están las cosas hoy, no lo creo” (pensé para mis adentros).

También es relevante anotar que cuando le hice notar que en realidad no hay concelebración ya que los “concelebrantes” no pronuncian la fórmula consecratoria, se reía y reía. Le pregunté la causa de su risa, pero no me respondió.

 

V.

Luego hablamos un poco de los pseudo-teólogos mencionados, Padres de la Apostasía de la Misión en India, Sri Lanka y otras zonas del Sur de Asia. Digo lo que X y Z me dijeron:

Bermejo fue el pionero de la inculturación litúrgica Indiana, De  [Ca]Mello fue un super-liberal que inventó un nuevo método espiritual fundando un movimiento llamado (¡casualmente!) “Satana” (lo escribo como suena en español, aunque la romanización oficial es “Sadhana”) que significa “contemplación”. De Mello SJ trató de amalgamar al Zen (no el heroico Cardenal sino el budismo nipón) y la Fe atrayendo muchos discípulos. Balasuriya escribió sobre la Virgen Sacrosanta llegando al sacrílego extremo de negar su divina maternidad, aunque luego de haber sido excomulgado, se retractó. Después me hablaron de Amaladoss SJ, quien fue asistente general de la curia jesuítica y que, no per caso, es reivindicado por el apóstol de Sodoma y Gomorra, James Martín SJ, que por insólito descuido (?) fue puesto como asesor vaticano. Amaladoss se llegó a preguntar lo siguiente:

 

- «En el actual contexto de pluralismo religioso ¿tiene aún sentido proclamar a Cristo como el único nombre en el que todos hallan la salvación e invitar a todos los hombres a convertirse en sus discípulos?» (Vidyajyoti, 1985).

 

Que Dios nos de la gracia de la perfecta reverencia en la sagrada Liturgia. Para Su mayor gloria. Para la salvación de las almas. Para la evangelización de las culturas. Que Dios nos salve de la metástasis de las liturgias y “teologías” progresistas, que no sólo no convierten a nadie sino que corrompen a los que las profesan.

 

Padre Federico, S.E.

Misionero en el Himalaya

16/X/17

15.10.17

Disputatio con budistas

Hace no tanto, publicamos algunos textos denunciando el carácter rigurosamente satánico del budismo tibetano.

No dejó de ser llamativo la prácticamente total ausencia de réplicas por parte de los budistas. Hubo dos comentarios cuyos autor se escondió bajo el recurso de la pseudonimia (el escriba se hacía llamar “Anat” quizás queriendo analogarse a algo) que omitimos publicarlos ya que eran torpes ataques donde sin intentar bosquejar ningún argumento se defendía el burdo mito reencarnacionista y se blasfemaba contra nuestro divino Redentor. Hubo algún otro intento de réplica, pero no lo publicamos porque también incurría en horrendas blasfemias que laceran los oídos castos y píos.

Ahora bien, hace pocos días, finalmente, hemos recibido, de parte de un español llamado Jesús (su nombre sugiere su muy probable condición de apóstata) un intento decente -por así calificarlo-  y muy respetuoso de refutarnos.

Nuestra última contrarréplica no tuvo acuse de recibo, ya que era ponía a nuestro interlocutor contra la espada y la pared.

Publicamos el diálogo para provecho de los lectores y para contribuir a la restauración de la apologética. Es siempre preferible el debate teorético librado entre apologistas enamorados de la Verdad que la imbecilidad post-moderna que se contenta con repetir el más estúpido de los eslóganes jamás dicho: “no hay una verdad objetiva, cada uno tiene su verdad, ergo hay que respetar todas las posiciones”.

¡Muera el error en todas sus formas y versiones!

¡Muera el respeto al error!

¡Viva la Santa Fe Católica!

 

 

Padre Federico, S.E.

Himalaya, 15/X/17

 

 

Namasté.

Soy budista (creyente dentro de la rama de Su Santidad el Dalai Lama), y considero que el testimonio del Padre Federico es verosimil y perfectamente puede ser cierto, pero hay que hacer algunas puntualizaciones. Antes de hacerlas, quisiera dejar claro que no he venido aquí a convertiros a mi religión, ya que considero, como dice S. S el Dalai Lama, que es erróneo tratar de convertir a quienes viven felices dentro de su tradición espiritual. Solo vengo a puntualizar cosas para evitar malentendidos, nada más.

Existe ciertamente, la adoración a malos espíritus dentro de algunas tradiciones “budistas” tibetanas, pero no todas las tradiciones son de ese tipo, y desde luego S. S el Dalai Lama se ha manifestado numerosas veces en contra de dicha adoración. Existe una rama de “budistas” tibetanos, que venera a Dorje Shugden (también llamado Dolygal). S. S el Dalai Lama ha advertido que es un espíritu maligno y por tanto no se le debe adorar. Por tanto, quien siga las enseñanzas de S. S el Dalai Lama nunca diría lo que digo Tenzig de adorar a los demonios.

No descarto, pese a todo, que los budistas con los que trató el Padre Federico se consideraran seguidores de S.S el Dalai Lama, pero así como también existen quienes se consideran católicos y tienen creencias consideradas heréticas por el Vaticano, ocurre similar en en budismo. Sobretodo hay que tener en cuenta que en los países de tradición budista, la población no tiene la misma formación que los budistas más eruditos, lo que da lugar a algunos sincretismos que si se analizan hacen aguas. Tengan también en cuenta la excelente relación de S. S San Juan Pablo II con S. S el Dalai Lama, pues no creo que hubiera sido posible si S. S el Dalai Lama hubiera estado a favor de la adoración de demonios.

Por todo ello, el título correcto no debería ser “el budismo tibetano es satanista", sino que el satanismo está presente en la cultura tibetana, y por desgracia, a veces se mezcla con el budismo. También sé que el Padre Federico (que no dudo de su buena intención) no ha mencionado a S. S el Dalai Lama en ningún momento, y que, al menos directamente, no le ha acusado a él de satanismo, pero un texto como este puede dar malentendidos y englobar a todos los budistas (al menos dentro de la rama tibetana) de adoradores de espíritus malignos, lo cual es erróneo.

Finalmente, desear al Padre Federico y a todos los que habeis comentado, que alcancéis la liberación del sufrimiento

….

Estimada

Gracias por dialogar. Continuo el interesante coloquio…
Hasta donde me consta, para el budismo tibetano ortodoxo, urge procurar la armonía con todos los seres, incluso con los demonios. Esto solo basta y sobra para calificar al budismo tibetano como satanista. 
Los católicos no buscamos -como un ideal- la liberación del sufrimiento, sino del pecado. 
El mismo Dalai Lama, quien de santo no tiene nada, acepta ser adorado o venerado como una deidad. Muchos tibetanos adoran o generan figuritas del Dalai Lama. Eso no es satanismo, pero es idolatría burda. Conviene tenerlo en cuenta para no fiarse de este señor, para quien las riquezas constituyen un elemento esencial de la felicidad. Por otra parte, me parece que hay suficientes elementos para considerar que el Dalai Lama no es un budista ortodoxo, sino un budista liberal.
Que un Papa, el que sea, haya hablado con alguien, no significa que el interlocutor no sea un alma perdida. Juan Pablo II defenestró al budismo en el libro “Cruzando el umbral de la esperanza” catalogándolo de ateísmo. De todos modos, Juan Pablo II se caracterizó por tener un trato afable con todas las personas. 

Con mi bendición sacerdotal

Padre Federico 

 

…..

 

 

Budista

Muchas gracias por la respuesta, Padre Federico, aunque he de puntualizar que soy hombre (lo digo por lo de “estimada"). Antes de continuar con mi respuesta, quisiera decirle que cuando yo le contradigo en alguna de las cosas que usted ha dicho, considero que usted no falsea la realidad deliberadamente, sino que tiene algunas ideas equivocadas sobre el budismo, las cuales expresa con su mejor intención.

Bien, en primer lugar, la armonía con todos los seres no implica la aceptación del mal, que los budistas no aceptamos. Nosotros consideramos que existen, en los reinos más bajos de existencia, los seres infernales y los fantasmas hambrientos, que son seres que sufren, debido a su ignorancia (causa de todo sufrimiento). Consideramos que estos seres pueden cambiar y optar por la compasión y otros buenos valores, y es lo que deseamos. Nosotros deseamos la felicidad de todos los seres sintientes, y consideramos que la maldad es un impedimento para alcanzarla, por lo que deseamos que todos los seres rechacen el mal y abracen el bien, pero ello no ha de llevarnos jamás a aceptar o dejar de combatir el mal. Una diferencia que quizá exista entre esta actitud y el cristianismo es que (supongo), el cristianismo considera que los demonios son malignos eternamente, pero en caso de existir tal diferencia entre nuestras creeencias, creo que nuestra actitud ante el mal es similar: rechazar y combatir el mal siempre, pero ser compasivo con quienes son malvados, de quienes deseamos que dejen de serlo. Por tanto, siendo que satanismo significa culto a espíritus malignos, creo que dada esta explicación no se ve ningún satanismo en el budismo, pues “armonía con todos los seres” no significa aceptar ni ser complice (ni siquiera indiferente), ni, mucho menos, adorar el mal.

Por cierto, me ha dolido la afirmación, “el Dalai Lama, que de santo no tiene nada". Quizá la frase no tenga motivos para resultar hiriente, ya que quizá no usemos del mismo modo la palabra “santo", pero al negarle santidad al Dalai Lama, me ha dado la sensación de que estaba usted juzgando al Dalai Lama como una mala persona (no solo por esa frase, sino por el modo de hablar de él que sigue en el texto del mensaje). Si es eso lo que dice usted, le recuerdo que el Dios que usted venera enseñó que no debíamos juzgar a los demás (enseñanza que me parece muy justa y positiva).

El Dalai Lama no acepta ser venerado como un dios o una deidad. Como usted sabe, el budismo es una religión no-teísta y ni siquiera al Buda histórico, Siddharta Gautama, es considerado una deidad o algo similar, sino un hombre que descubrió el camino. Por eso, nosotros no veneramos a nadie como a una divinidad. Cuando nosotros, en las prosternaciones de ofrenda, hacemos reverencias a imágenes de otras personas, es una expresión de respeto y gratitud. Hacer reverencias ante estas imágenes es un modo de humillar nuestro falso orgullo, honrar nuestra propia naturaleza de Buda y expresar el deseo de que todos los seres alcancen la felicidad suprema. Esta actitud difiere, pues, de la adoración a imágenes como divinidades, que es lo que se condena explícitamente en Éxodo 32, 8 y Éxodo 32, 23. Aún así, en caso de que alguien venere al Dalai Lama como a una divinidad, me remito a lo que dije antes de que en países de tradición budista, la población no tiene la misma formación que los budistas más eruditos, lo que da lugar a algunos sincretismos que si se analizan hacen aguas.

Tampoco es cierto que el Dalai Lama considere las riquezas como un elemento esencial para la felicidad. Esto ya lo contradice el hecho de que los monjes budistas hacen voto de pobreza. Séneca decía que las riquezas no daban la felicidad, y que se podía ser feliz en la miseria, aunque ello no implicaba rechazar las riquezas en caso de tenerlas, y ese es el mismo pensamiento del Dalai Lama. Para ambos, Séneca y el Dalai Lama, la felicidad es un estado interno que se adquiere mediante la sabiduría (una de las ideas claves del budismo). No podría decir el Dalai Lama que las riquezas son necesarias para la felicidad cuando Matthieu Ricard (asesor del Dalai Lama) obtuvo una nota muy alta de felicidad en un estudio científico, y sus únicas pertenencias son su ropa, sus zapatos y su habitación en el templo donde vive.

Sobre Juan Pablo II, en su libro dijo algunas ideas erróneas sobre el budismo (entiendo que con su mejor intención), como que los budistas tratamos de sustraernos a la realidad y así nos volvemos indiferentes a lo que pasa en el mundo, y no es verdad. El nirvana es lo contrario de la indiferencia ante el mundo, es compasión y amor infinito a todos los seres, y uno de los objetivos del budismo es ayudar a todos los seres a alcanzar la felicidad, lo cual se aleja mucho de volverse indiferente a lo que pasa en el mundo.

Le agradezco su bendición sacerdotal. Mis mejores deseos para usted.



Estimado Anónimo

1) Los demonios serán pérfidos por toda la eternidad. Esto es algo objetivo. Quien niegue este hecho, deberá argumentarlo racionalmente, lo cual es imposible. 
No por malicia satanista, sino con buena intención, el budismo ortodoxo-erudito busca procurar una armonía con los demonios ya que, según el budismo, ellos pueden devenir buenos. Ahora bien, de facto, por ignorancia, los budistas tratan de hacer las paces con seres que son y siempre serán demonios. Ergo, subjetivamente no es satanismo, pero objetiva y fácticamente lo es. Y esto es terrible en extremo. Es un satanismo por ignorancia, no por malicia. Es la peor ignorancia. Es la trampa máxima. 

2) Lo de la riqueza fue dicho por D. Lama en De L’art du bonheur (d’Howard Cutler et du Dalaï-lama), p. 28.

3) Lo de la ausencia de santidad en el D. Lama no es una ofensa, sino una consecuencia de su ateísmo. Lo esencial de la santidad es el amor total a Dios.

4) La prohibición de juzgar versa sobre las intenciones, no sobre los hechos externos.

5) No hay ninguna naturaleza búdica ni ningún Buda adentro nuestro.

6) ¿Ud cree que Ud. existe o que Ud. es una ilusión?

7) Si alguien cree que su religión es la única verdadera, es lógico que creerá óptimo invitar a los demás a la conversión, aún cuando los demás se sientan felices en su creencia.

Estimo grandemente su respeto y su seriedad para dialogar. Estoy dispuesto a seguir dialogando.

Me gustaría saber su nombre y nacionalidad. Detesto hablar con anónimos.

Suyo en Jesucristo y la Virgen Inmaculada,

Padre Federico

 

….

 

 

Budista

Me llamo Jesús y soy español. Dicho esto:

1) Ciertamente, dado que nunca he contemplado los seis reinos, para afirmar algo que yo no he visto he de basarme en la fe. Y yo como budista tengo fe en aquello que budistas más sabios y experimentados que yo han estado estudiando durante siglos. Por ello no podría argumentar racionalmente lo que usted me pide. No obstante, un cristiano no podría argumentar racionalmente que los demonios son eternamente pérfidos al no haber visto nunca uno. Sí podrá argumentarlo basándose en las sagradas escrituras, pero eso sería partiendo de las premisas de la fé, y no de la razón. Por otra parte, la palabra “satanismo", significa evocación, veneración o adoración a demonios, y de todas las cosas que se han dicho aquí sobre el budismo, el único caso de adoración (y por tanto de objetivo satanismo) es el caso de Tenzig que usted ha referido. Considerar que la naturaleza de los demonios es mutable, aún en caso de que sea una creencia errónea, no implica adoración (por lo que tal creencia no lleva irremediablemente al satanismo), ni tampoco desear que los demonios dejen de ser malignos (entiendo que los cristianos también desean que los demonios dejen de ser malignos, pues los cristianos no desean que existe el mal…no obstante, consideran que es un imposible). lo que sí es satánico es tratar de hacer las paces con los demonios ofreciendoles sacrificios, ofrendas, etc…pero tal cosa no es una práctica esencial del budismo.
2) El libro “el arte de la felicidad” afirma que hay cuatro factores de realización de la felicidad: riqueza, satisfacción mundana, espiritualidad e iluminación. De ahí no se sigue que la riqueza sea esencial para lograr la felicidad, cosa que el libro no afirma.
3) Si a eso se refería al afirmar que no es santo, no me molesta y no voy a discutir ese aspecto.
4) Lo sé. Es solo que temí que usted estuviera insinuando que el Dalai Lama tuviera malas intenciones. Me alegro mucho de ver que no fue lo que usted quiso decir.
5) Si eso es lo que usted considera, adelante.
6) Considero que existo como un agregado de fenómenos impermanentes.
7) Entiendo lo que usted dice, pero, en mi opinión, y en la de muchos budistas (entre ellos el Dalai Lama), no es adecuado que, por ejemplo, un cristiano sea feliz en su tradición espiritual y se le contradiga, lo que puede crearle infelicidad. Si siendo cristiano es una buena persona que trata de hacer un mundo mejor, y es feliz con sus creencias, es más seguro dejarle en la situación en la que está. Eso no quita, evidentemente, para que si decide interesarse por las creencias budistas y está dispuesto a cambiar de religión si encuentra más verdadero el budismo, se le informe sobre estos asuntos, pero con frecuencia el argumentar contra la fe de las personas, no hace sino causar ansiedad, malestar y divisiones. Y sé de buena tinta que a muchos cristianos les molestaría si yo negara y argumentara la negación de sus creencias, y no haría sino crear malestar y tensiones entre cristianos y budistas, cuando yo más bien deseo la armonía entre las diversas tradiciones espirituales, y por ello no acostumbro a hacer proselitismo.



Muy estimado Jesús 

El amor a Jesús y a tí -que por gracia de Jesús, llevas Su dulcísimo Nombre- me lleva a responderte con prontitud. 

1) 

1.1. La inmutabilidad de la malicia demoníaca se puede demostrar con la sola razón. La mutabilidad de la malicia diabólica es absurda. Y su absurdidad es demostrable racionalmente. Lo remito a la célebre demostración de Santo Tomás en la Summa Theologica I Pars (si no la encuentra, dígame). Es un tópico muy interesante.

1.2.

Sea cual sea la intención o concepción, cualquier modo de procurar la armonía con los demonios, es satanismo objetivo y fáctico. Ergo el budismo tibetano ortodoxo erudito es satanista.

2) Si la riqueza no es esencial para ser feliz, los factores enumerados deberían ser 3 y no 4.

3) Excelente, Jesús.

4) Ibidem.

5) Ibidem 

6) 

6.a.
Según su concepción, ¿Quedará algo de Ud. en el Nirvana? ¿Qué?

6.b.

¿Cree Ud. que hay algo permanente en Ud?

6.c.

Si no hay nada permanente, ¿qué pasará cuando desaparezca todos sus fenómenos impermanentes?

6.d.

¿Ud cree que Ud es el mismo ente que me hizo unos comentarios en mi blog hace unas horas o Ud cree que los fenómenos que constituyen a su ser ya pasaron y Ud ya devino otro ente esencialmente distinto?

7) Si el prójimo adhiere de buena fe a doctrinas falsas, corregirlo es caridad. 
El proselitismo católico es esencialmente diverso al budista. No son comparables sino per accidens.

Suyo devotísimo en Cristo Rey y María Reina

Padre Federico

10.10.17

Pedido urgente: Religiosas para la Meseta Tibetana

San José

Escribo rápido y yendo al punto. Necesitamos urgentemente Religiosas Misioneras para el Himalaya.
Como todos saben soy misionero en una aldea ignota en pleno Himalaya, en la frontera de cuatro países: China, Bhutan, Nepal e India. Es un lugar único en el mundo. Acá el 98% de las almas profesan el budismo tibetano. Estamos plantando la Iglesia Católica por primera vez en la Historia. 

La aldea misional se encuentra en un raro valle y por tanto tiene un clima benévolo, parecido a Buenos Aires.
Aquesta aldea es una de las fronteras de la Iglesia Católica. Después de aquí, es imposible encontrar ni siquiera un hogar católico.
Este es un puesto de avanzada misional. Podemos decir que se encuentra más allá de las líneas enemigas y más allá de la frontera ya que a los costados de nuestra aldea hay inmensos e incalculables territorios donde no hay un ápice de catolicismo. En breve, son las tierras de Buda, el Gurú Rimpoche y sus dos concubinas.

Aquí, en esta aldea, hay dos escuelas, una pública y atea y otra privada y católica. La católica está bajo el patronazgo de San José. Es una escuela primaria con un albergue para algunos alumnos. La misma está siendo atendida por dos hermanas locales, una de las cuales tiene 80 años y la otra tiene más de 60. Debido a su avanzada edad y a la falta de vocaciones jóvenes, las hermanas dejarán la escuela y me pidieron que yo sea el director de la misma.

escuela
 

La autoridad local me pidió lo mismo: que yo sea el director de la escuela. Ayer me dio todo el papeleo burocrático, que ni lo quise ver.Si no acepto, la Iglesia Católica perderá un puesto de avanzada. Si acepto, tendremos un gran areópago para predicar a Jesucristo. Ergo, acepté. Pero, estoy solo. Por tanto, necesito urgentemente que venga una congregación religiosa de hermanas para enseñar en la escuela (¡principalmente para enseñar la santa Fe Católica!) y atender el albergue de los niños para ayudarlos a salvar el alma.
Necesitamos que las hermanas confirmen su asistencia antes del 1/11/17.
El idioma oficial de la escuela es el inglés.
Puedo celebrar la Santa Misa en cualquiera de las dos formas, ordinaria o extraordinaria, según sea la elección de las hermanas que se animen a venir.

niños en la escuela

No es una misión fácil para las mujeres. Es una misión que pide heroísmo, heroísmo maternal, locura de la cruz y un gran deseo de hacer grandes cosas por Cristo Rey. Es una misión para la mayor gloria de Dios y para la salvación eterna de los más pobres de los más pobres, esto es, niños paganos campesinos de remotas montañas del Himalaya.
Si por misericordia de Dios, algunas hermanas se animan a venir, me haré cargo de sus necesidades espirituales y materiales y les daré todo lo que pidan.
Las hermanas que aspiren a venir tienen que tener en cuenta el perfil que buscamos: Ángeles de la Caridad, Madres heroicas enamoradas de su divino Esposo, nuestro Señor Jesucristo. Necesitamos hermanas que no tengan un pelo de relativismo o secularismo. Hermanas sin velo ni dogma, abstenerse. Hermanas, que me obliguen a darles la comunión en la mano o que se enojen si intento cantar el Agnus Dei en latín, abstenerse.
Hermanas que no quieran enseñar el Catecismo, abstenerse.
Por último, algunas jóvenes que lean estas líneas quizás no son hermanas pero quieren serlo. Ellas también son bienvenidas. Podrán consagrarse y santificarse aquí como flores del jardín de Dios.
Humanamente hablando, dudo que alguna congregación ose aceptar una misión tan especial pero la gracia me obliga a esperar “contra toda esperanza", esto es, a esperar que el Espíritu Santo infunda en los corazones de alguna superiora santas ansias amorosas de ir a la Meseta Tibetana a adorar a Dios y engendrar criaturas para el Cielo.

¡Viva Cristo Rey!

¡Viva María Reina!

Padre Federico, S.E. (10/X/17)

5.10.17

"Un solo rebaño" y una Misión militar

I.-

Está revelado que un día habrá “un solo rebaño y un solo pastor". 
La jornada en la que eso se logre será la más gloriosa de la Historia -desde la Ascensión- y tanto será su esplendor qué solo será superada por la jornada parusíaca y el Día D de la Historia, el Juicio Final, en el que nuestro divino Redentor ejecutará la discriminación final: los buenos a la derecha, los malos a la izquierda. 
“Un solo rebaño y un solo pastor” es el gran objetivo de la Iglesia Militante, objetivo este que se alcanzará en el Paraíso y, cual figura participativa, en la Historia humana.
“Un solo rebaño y un solo pastor” es el gran ideal de las Misiones Católicas. Es el ideal supremo, esto es, que todas las creaturas libremente decidan ingresar a la Iglesia vera y someterse plena y perennemente a nuestro señor Jesucristo, Rey de Reyes y único Salvador del género humano.

II.- 

¿Cómo se alcanzará la realización de este ideal divinísimo?
Sólo Dios lo sabe.
Sólo Él lo sabe, pero Él nos indicó un camino por el cual esa ideal, el “mono-rebañopastorismo” o, en términos propios, la Plenitud de las Gentes  (Plenitudo Gentium) se hará realidad. ¿Cuál es ese camino? La Misión. Esto es, la predicación directa y el sagrado Bautismo en la Iglesia Católica Apostólica y Romana (cfr. Mt XXVIII, 19-20).

Ahora bien, el punto no es fácil. Una experiencia vivida hace unas semanas nos mostró algo a este respecto: muchísimas almas se convertirían si hubiese quien les predicase directamente. En efecto, estos días tuvimos que ir a predicar a un importante jefe militar con seis mil soldados a su cargo. Él nos abrió las puertas de sus cuarteles y unidades que recorrimos orantes bajo custodia armada. Era como si la Cruz y la Espada, al menos por un brevísimo intervalo de tiempo y aunque más no sea en un lejano confín del orbe, se volviesen a unir, reclinándose la noble y corajuda espada ante la omnipotencia de la Cruz invicta. 
De par en par, la Virgen Capitana nos abría los blindados portones de los batallones y, más aún, las delicadas puertas de los corazones de soldados amantes de su terrena Patria pero más aún hambrientos de algo que intuirían quizás pero aún no conocían: la Patria Celestial, donde, los nobles guerreros -del espíritu y de la espada- en gracia muertos hallan el eterno reposo después de las lides de estos lares. 
Y nuestras apostólicas almas se preguntaban: ¡cuántos operarios faltan! ¡Qué grande es la mies! ¡Cuán pocos son los operarios! ¡Qué bueno sería que Dios nos permita multi-locarnos en muchos lugares a la vez para poder predicarle a tan numerosa legión deseosa del Dios verdadero!

III.

Lo vivido nos lleva a reconsiderar el inmemorial instituto del Bautismo Masivo, hoy lamentablemente caído en desuetudo.
Son legión quienes esperan que la Plenitudo Gentium sea alcanzada por las solas y exclusivas fuerzas de Dios sin la más mínima cooperación humana. Y como piensan esto, se dedican a cualquier faena menos al apostolado de infieles. 
Pero, la enseñanza perenne nos dice que todos los bautizados debemos participar del empeño misional, esto es, todos debemos tomar parte del épico desafío que busca, ansía, anhela y hasta reclama “un solo rebaño y un solo pastor".

Padre Federico, S.E.
Misionero en el Extremo Oriente
5/X/17

19.09.17

Del paradigma anti-misionero del progresismo en un país del lejano Oriente.

Entrevista a un sacerdote diocesano misionero nativo de un país del lejano Oriente, mas no de China.

Agosto 2017

del paradigma anti-misionero

P.F.: Padre Federico        P.A.: Padre Andrew [1]

 

P.F.: Estoy aquí con un amigo sacerdote en el lejano Oriente, y él nos compartirá lo que le enseñaron en el seminario acerca de las misiones.                                                 

Padre, ¿qué le enseñaron acerca de las misiones en el seminario? ¿Le animaron a hacer misión?

P.A.: Aquí somos muchas personas las que venimos al seminario a prepararnos. Hay misiones, venimos de congregaciones, hermanos, religiosos… Yo también estuve estudiando ahí. Las enseñanzas en los seminarios no nos animan a proclamar a Cristo, más bien, (…) el Catolicismo es cognitivo, es un tipo de anti-catolicismo. También se nos enseña la ideología marxista.

P.F.: Padre,  ¿dice que el anti-catolicismo también se les enseña en el seminario?   P.A.: No nos lo enseñan como tal, lo hacen, aunque ellos no tienen idea de que lo están haciendo; la ausencia de la enseñanza católica es lo que nos sugiere el anti-catolicismo.

P.F.: Padre, ¿qué les dicen sobre otras religiones?

P.A.: Cuando nos enseñan Cristología, inmediatamente evitan los temas cristocéntricos. Hay una división entre la gente por las religiones, así que nos hablan del teocentrismo porque eso no causa problemas; así que prefieren no hablar mucho del Cristocentrismo, más bien hablamos del teocentrismo, esto es, Dios como centro, porque toda la gente llama Dios a su propio dios. Así también podemos dialogar juntos, nombrando a dios con su propio nombre. Tal vez estamos comprometiendo cosas, pero afirmando eso, (…) están interpretando erradamente Nostrae Aetate[2], diciendo que cada religión tiene cosas buenas; “vamos a cultivar lo bueno, la bondad que tienen todas las religiones”.

P.F.  Entonces, ¿están justificando la posición anti-misional a causa de la malinterpretación de Nostrae Aetate?

P.A. Sí, es una malinterpretación. Cada quien lo explica de diferente manera, pero eso es lo que pude sentir.

P.F.: Me ha comentado que usted le ha dicho a su obispo que les enseñan cosas erróneas, y que ha tenido que corregir a su obispo…

P.A.: No al obispo, un sacerdote me lo ha dicho. Fuera de nuestra Iglesia no hay salvación,y esa es una enseñanza muy antigua. Pero ahora nos enseña que la Iglesia dice que “en otras iglesias también hay salvación”. Esto es completamente erróneo.  Señala también “en unos años la Iglesia enseñará que fuera de Cristo también hay salvación”. Porque ahora nos enseñan que en Cristo está la plenitud de la salvación, pero apunta que “fuera de Cristo también hay salvación y lo tenemos que aceptar”. Después de unos días, (luego de mi refutación) el padre vino y nos explicó “la Iglesia no lo dirá, porque la Iglesia no puede decir que fuera de Cristo no hay salvación”.

P.F.: ¿Fue un profesor del seminario quien lo dijo?

P.A.: Sí. Pero [porque] ahora todo se está estudiando desde una perspectiva cognitiva, el Hinduismo, el Relativismo, la Biblia, el Catolicismo.

P.F.:  Padre, usted tiene una misión sobresaliente, tratando de alcanzar y convertir paganos; y por eso otros sacerdotes se han burlado de usted, llamándolo “pastor” porque está tratando de anunciar el evangelio a los paganos. ¿Cómo es eso?

P.A.: Aquí muchos sacerdotes piensan comúnmente que todas las religiones tienen cosas buenas, y su propio dios también las tiene. Entonces, no es necesario proclamar ni convertirlos al cristianismo. “Que se queden en su propia religión. Nosotros somos católicos y no necesitamos sacerdotes así, como los protestantes”. (…) Lo que está pasando ahora en este lugar es que no están cultivando la Iglesia por medio de conversiones de almas.  Lo entienden erróneamente.

P.F.: Padre, ¿esta es la posición dominante aquí? ¿Podemos ver que los sacerdotes piensan así?

P.A.: Es así porque las enseñanzas han cambiado. Algunos años antes, para los misioneros las enseñanzas eran sobre la salvación, dentro de la Iglesia Católica, pero ahora dicen que “cada uno tiene la salvación a través de su propia visión  ¿para qué proclamar todo esto? “let it be”, déjenlo así.”

P.F.: ¿Esto pasa en [este lugar]?

P.A.: Tal vez no sólo en [este lugar], tal vez en todo el país, es una ideología.(…) Lo que dicen es que “aquí es un país [donde] no necesitamos proclamar. Sólo vamos a vivir nuestra propia vida, no podemos cambiar su estilo de vida, ¿para qué les vamos a predicar, para qué cambiar su vida? Con nuestra vida les predicaremos”. Eso lo dicen los sacerdotes, pero podemos ver que no hay conversiones, por muchos años no las ha habido. Si la gente puede ver bondad, entonces podría haber muchas conversiones; pero ¿por qué no proclamar? ¿Cuál es el problema? Las enseñanzas no han cambiado. Somos cristianos y escuchamos la palabra de Dios; deberíamos vivir bien, es nuestro deber, pero ¡también la proclamación es necesaria!

P.F.: Padre, muchas gracias.

  

Traducción: Karla Noguez.


[1] Nota: no damos el nombre real del entrevistado ni del país para evitarle problemas a nuestro interlocutor. Usaremos el seudónimo “Padre Andrew”

 [2] La declaración Nostra Aetate es uno de los documentos del Concilio Vaticano II, cuyo contenido trata sobre las relaciones de la Iglesia con las religiones no cristianas.