"Placuit Deo": la Iglesia, el lugar donde recibimos la salvación traída por Jesús

Algunos religiosos y ciertos teólogos llevan muchos años hablando de la “Iglesia de los pobres”, contraponiéndola a la “Iglesia jerárquica”, que debe de ser la Iglesia de los ricos y poderosos. Esta dialéctica entre las dos iglesias no cabe duda que tiene unas claras raíces marxistas.

Pero dicha dialéctica, en los últimos años, ha mutado: ahora tenemos por un lado la iglesia de los pobres, la iglesia de la misericordia y la compasión; y en frente, a la iglesia de los rigoristas, de los apegados a las leyes y a las normas, de los que tenemos cara de pepinillos en vinagre… Por una parte están los que dan prioridad a la pastoral inclusiva, los que quieren que los homosexuales sean bendecidos en la iglesia, los que quieren que los adúlteros puedan comulgar, los que propugnan que puedan comulgar también los luteranos; los que ponen la conciencia individual por encima de la norma universal; los que consideran que el concepto de transubstanciación es algo del pasado que hoy ya no tiene validez; los que se saltan los mandamientos y la tradición de la Iglesia a la torera; los que, apelando a una falsa misericordia, aparcan la moral y la doctrina de la Iglesia; los que propugnan un nuevo paradigma donde ya no hay pecados ni condenación; los que consideran que cumplir los mandamientos o que el matrimonio cristiano son ideales casi inalcanzables (porque no tienen fe ni creen en la gracia de Dios); los que quieren acabar con el edificio de la moral de la Iglesia en nombre de un situacionismo herético… Y por otro, estamos los que nos seguimos reafirmando en la fe de la Iglesia y defendemos la moral, los sacramentos y la totalidad de la doctrina que hemos recibido a través de la tradición y de la revelación.

Nosotros no creemos que se puedan realizar cambios de paradigmas en la Iglesia (Cristo es el mismo ayer, hoy y siempre: Dios no cambia con los tiempos) ni creemos que sea imposible cumplir los mandamientos ni admitimos el divorcio ni estamos dispuestos a que se juegue con los sacramentos: especialmente con el sacramento de la Eucaristía. La Santa Comunión es sagrada y no se toca. El dogma de la transubstanciación no admite discusiones ni transacciones con los luteranos ni con nadie. Comulgar no es un derecho de nadie. Para poder comulgar hay que profesar previamente la totalidad de la fe de la Iglesia Católica, recogida en el Catecismo. Y además, hay que estar en gracia de Dios; es decir, hay que pasar por el sacramento de la penitencia con cierta frecuencia (siempre que uno esté en pecado mortal). Si un luterano o cualquier protestante, budista o ateo comulga, se está cometiendo un grave acto sacrílego, que no se debe consentir en ningún caso. Sería una blasfemia y un escándalo intolerable.

Si los obispos alemanes, los de Buenos Aires, los de Malta o los de cualquier otro país del mundo se apartan de la verdadera fe de la Iglesia, ellos sabrán lo que hacen pero ya no los podremos considerar católicos. Es así de fácil. Nadie puede decir que no se pueden cumplir los mandamientos sin incurrir en herejía grave. No se puede dar la comunión a quien vive en pecado mortal o a quien defiende públicamente políticas abortistas o a quien vive abiertamente al margen de la moral católica. Tampoco se puede ni se debe dar “bendiciones” a quienes viven objetivamente en pecado mortal. Dicen que si se bendicen animales, casas o coches, ¿por qué no bendecir parejas homosexuales? Pues muy sencillo: porque los coches, los animales o las casa no pueden pecar y las personas, sí. Quienes propugnan tales aberraciones, lo único que consiguen, como muy bien señala el P. Thomas G. Weinandy, es que “la Iglesia se convierta en una parodia de sí misma”. Ahora, al parecer, el llamado C9 parece que pretende que las conferencias episcopales tengan nuevas atribuciones, “incluyendo también alguna auténtica autoridad doctrinal”. Pues nada: que Dios nos coja confesados.

Placuit Deo

Tal vez para hacer frente a todos estos modernistas (aunque no voy yo a hacer ningún juicio de intenciones al respecto), la Congregación para la Doctrina de la Fe acaba de publicar hoy, 1 de marzo de 2018, la carta Placuit Deo, que acabo de leer y no tiene desperdicio. Les recomiendo vivamente que la lean. Les resumo algunas de las ideas más importantes – a mi juicio – de esta carta. En ella, se refutan dos de los errores más extendidos hoy en día en la Iglesia y que forman parte de lo que hemos llamado “modernismo”: el pelagianismo y la gnosticismo.

  • Los neo-pelagianos consideran que el individuo, radicalmente autónomo, puede salvarse a sí mismo. La salvación se confía a las fuerzas del individuo o a las estructuras puramente humanas, incapaces de acoger el don de la gracia de Dios. Son los del “tenemos que”, “hay que”, “otro mundo es posible”, “te necesitamos para cambiar el mundo”, etc., etc., etc. Puro voluntarismo.
  • Los neo-gnósticos, por su parte, presentan una salvación puramente interior, encerrada en el subjetivismo, que consiste en elevarse “con el intelecto hasta los misterios de la divinidad desconocida”. Se pretende, de esta forma, liberar a la persona del cuerpo y del cosmos material, en los cuales ya no se descubren las huellas de la mano providente del Creador, sino que ve sólo una realidad sin sentido, ajena de la identidad última de la persona, y manipulable de acuerdo con los intereses del hombre.

Tanto unos como otros deforman la confesión de fe en Cristo, el Salvador único y universal.

Comienza diciendo esta carta que “el mundo contemporáneo percibe no sin dificultad la confesión de la fe cristiana, que proclama a Jesús como el único Salvador de todo el hombre y de toda la humanidad”. Para nosotros, la salvación consiste en nuestra unión con Cristo, quien, con su Encarnación, vida, muerte y resurrección, ha generado un nuevo orden de relaciones con el Padre y entre los hombres, y nos ha introducido en este orden gracias al don de su Espíritu, para que podamos unirnos al Padre como hijos en el Hijo, y convertirnos en un solo cuerpo en el «primogénito entre muchos hermanos» (Rm 8, 29)” (Placuit Deo 4).

Cada persona busca a su modo la felicidad, que muy a menudo coincide con la esperanza de la salud física, con el deseo de un mayor bienestar económico o con la necesidad de paz interior y de una convivencia serena con el prójimo. A veces la salvación se presenta como la resistencia y superación del dolor. (Placuit Deio, 5).

Pero la fe en Cristo nos enseña, rechazando cualquier pretensión de autorrealización, que el hombre solo se puede realizar plenamente si Dios mismo lo hace posible, atrayéndonos hacia Él mismo. La salvación completa de la persona no consiste en las cosas que el hombre podría obtener por sí mismo, como la posesión o el bienestar material, la ciencia o la técnica, el poder o la influencia sobre los demás, la buena reputación o la autocomplacencia. Nada creado puede satisfacer al hombre por completo, porque Dios nos ha destinado a la comunión con Él y nuestro corazón estará inquieto hasta que descanse en Él. (Placuit Deo, 6). 

Según el Evangelio, la salvación para todos los pueblos comienza con la aceptación de Jesús. La buena noticia de la salvación tiene nombre y rostro: Jesucristo, Hijo de Dios, Salvador.

El lugar donde recibimos la salvación traída por Jesús es la Iglesia. Y esa salvación no se consigue solo con las fuerzas individuales, sino a través de las relaciones que surgen del Hijo de Dios encarnado y que forman la comunión de la Iglesia. (Placuit Deo 12). La salvación sólo se consigue con el auxilio de la gracia y dentro de la comunión de los santos: “la primacía absoluta de la acción gratuita de Dios; la humildad para recibir los dones de Dios, antes de cualquier acción nuestra, es esencial para poder responder a su amor salvífico” (Placuit Deo, 9).

La participación en la Iglesia en el nuevo orden de relaciones inaugurado por Jesús sucede a través de los sacramentos, entre los cuales, el bautismo es la puerta y la Eucaristía, la fuente y cumbre. La fe confiesa que somos salvados por el bautismo, que nos da el carácter indeleble de pertenencia a Cristo y a la Iglesia. Estamos llamados a una vida nueva conforme a Cristo. Con la gracia de los siete sacramentos, los creyentes crecen y se regeneran continuamente, especialmente cuando el camino se vuelve más difícil y no faltan las caídas. Cuando, pecando, abandonan su amor a Cristo, pueden ser reintroducidos, a través del sacramento de la Penitencia, en el orden de las relaciones inaugurado por Jesús, para caminar como ha caminado. De esta manera, miramos con esperanza el juicio final, el que se juzgará a cada persona en la realidad de su amor, especialmente a los más débiles. (Placuit Deo, 13)

Gracias a los sacramentos, los cristianos pueden vivir en fidelidad a la carne de Cristo y, en consecuencia, en fidelidad al orden concreto de relaciones que Él nos ha dado. Este orden de relaciones requiere, de manera especial, el cuidado de la humanidad sufriente de todos los hombres, a través de las obras de misericordia corporales y espirituales (Placuit Deo 14).

¡Qué hermosa es la verdadera doctrina de la Iglesia! ¡Qué alegría da leer un documento como este, que nos reafirma en el verdadero magisterio perenne de la Iglesia!

Espero y deseo que este documento, aprobado por el Papa Francisco y firmado por Monseñor Luis F. Ladaria, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe y por el secretario de dicha Congregación, Monseñor Giacomo Morandi, no caiga en saco roto y sea el priemero de otros muchos que contribuyan a poner luz en medio de tanta confusión.

Así termiana esta carta:

“La salvación integral del alma y del cuerpo es el destino final al que Dios llama a todos los hombres. Fundados en la fe, sostenidos por la esperanza, trabajando en la caridad, siguiendo el ejemplo de María, la Madre del Salvador y la primera de los salvados, estamos seguros de que «somos ciudadanos del cielo, y esperamos ardientemente que venga de allí como Salvador el Señor Jesucristo. Él transformará nuestro pobre cuerpo mortal, haciéndolo semejante a su cuerpo glorioso, con el poder que tiene para poner todas las cosas bajo su dominio» (Flp 3, 20-21)".

¡Gloria a Dios!

 

 

 

 

26 comentarios

  
José Miguel
Muy cierto, a difundir esta Carta y que cada quien diga de qué lado está, si con Cristo en su Iglesia o fuera de ella. Bendiciones.
01/03/18 7:43 PM
  
Rosita
Una bocanada de catolicidad.Por fin!!!
01/03/18 8:08 PM
  
JUAN FRANCISCO
Pedro, su artículo es apegado al doctrina tradicional de la Iglesia sin embargo porque no se atrevió enfáticamente a indicar que quien quiere una iglesia pobre para los pobres es el mismísimo obispo de roma? cobardía?
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Pedro L. Llera
Tengo por norma no mencionar al Papa, salvo si dice, escribe o hace algo que merezca la pena. El Papa es Pedro y yo respeto lo que representa y lo respetaré siempre.
Si mi padre hace o dice algo bueno, se lo reconoceré. Si mi padre hace o dice algo que no me guste, me callaré: es mi padre... Y si no tienes nada bueno que decir de alguien a quien quieres, vale más callar.
No confunda la cobardía con el amor filial. Yo soy católico: no cismático.
01/03/18 9:07 PM
  
JUAN FRANCISCO
PEDRO L. LLERA
1. Su primera norma si se vulnera su doctrina es dar la cara por JESUCRISTO y en segundo lugar por el Santo Padre, eso es cosa elemental que debiera saber. Defender la doctrina tradicional de la iglesia no es cisma, sino es una harta obligación de alguien que se precie ser católico.
2. Como no es un secreto, el papa francisco ha hecho y dicho cosas que contrarían la fe incluso de un simple católico y no las enumeraré acá porque es ampliamente conocido. entonces como no es una cosa ni dos sino al extremo de vulnerar los derechos de DIOS específicamente al callar o al poner un alto para que se permita dar la comunión a divorciados o a protestantes. Si va a callar entonces es un cómplice más de esta trama modernista y liberalista. Es a DIOS quien usted y yo debemos adoración y si el obispo de roma está incurriendo en esta trama no hay por que callar....usted tendrá que dar cuentas personalmente a JESUS de estas omisiones suyas.
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Pedro L. Llera
1.- Yo siempre he dado la cara por mi Señor. Y siempre he defendido la santa doctrina de la Iglesia. Lea mis artículos: no creo que quepa ninguna duda.
2.- Yo no me callo ante los errores. O no sabe leer o no se quiere enterar. ¿Cómplice del modernismo? No creo que haya ningún bloguero ni ningún articulista, al menos en España, que haya escrito más contra el modernismo que yo.
Para denunciar los errores modernistas no hace falta poner de vuelta y media al Papa, que es lo que parece que usted echa de menos. Y por supuesto que todos debemos dar cuentas a Nuestro Señor: de nuestras omisiones y, sobre todo, de nuestra soberbia y nuestra falta de caridad.
01/03/18 10:39 PM
  
Antonio1
Una Iglesia pobre...
“9. No os procuréis oro, ni plata, ni cobre en vuestras fajas;
10. ni alforja para el camino, ni dos túnicas, ni sandalias, ni bastón; porque el obrero merece su sustento.“
Y para los pobres...
“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva.”

Debe de ser que Cristo era un Marxista hereje...
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Pedro L. Llera
Eso es una bobada, con todo respeto. Lo que yo denuncio es la aplicación de la dialéctica marxista a la Iglesia. Iglesia solo hay una: no hay una de los ricos y otra de los pobres; ni una iglesia jerárquica frente a una iglesia profética. Ese era el planteamiento marxista de Leonardo Boff en Iglesia, carisma y poder, por ejemplo.
La Iglesia es una, santa, católica y apostólica. La Iglesia no es de los ricos ni de los pobres: la Iglesia es de Jesucristo, que llama a todos a la conversión.
01/03/18 11:05 PM
  
Luis Fernando
Juan Francisco, conviene no beber demasiado antes de escribir comentarios. Es que queda uno en ridículo....
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Pedro L. Llera
Es que acusarme a mí de modernismo, tiene mucha guasa... Teniendo en cuenta que llevo... ¿Cuánto? ¿Más de un año escribiendo semana tras semana contra el modernismo? Debo de llevar decenas de artículos contra el modernismo.
01/03/18 11:14 PM
  
JUAN FRANCISCO
Pedro ya que se tomo la molestia de analizar el tal documento, Por favor puede indicarme en el mismo dónde se defiende el dogma católico de EXTRA ECLESSIAM NULA SALLUS? dónde indica que para un católico la gracia sacramental es absolutamente necesaria para la salvación y dónde indica que la Iglesia Católica fundada por NSJC es la única y verdadera y por tal motivo las demás religiones son falsas empezando por el protestantismo a quien el papa hace acuerdos y conmemora herejías o permite cultos anglicanos dentro de la Basílica de San Pedro o lleva estatuas del hereje de lutero al lugar sagrado del Vaticano?
02/03/18 12:08 AM
  
Ricardo de Argentina
"Pisto para los pollos. Para que dejen de piar un poco.Nada más."
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Puede ser un intento de poner paños fríos.
Pero yo me inclino a suponer que este copiaypega de textos de buena doctrina aumenta la confusión, porque quien esto afirma no puede defender a Lutero ni proponer las comuniones sacrílegas sin caer en la esquizofrenia.
Además es pisto para los lobos: ya verás cómo citarán y nos refregarán estos raptos de ortodoxia para "demostrar" que no hay heterodoxos en el Vaticano.
02/03/18 12:14 AM
  
Guillermo PF
Conjeturar, aunque sea irónicamente (que maldita la gracia) que un comentarista HA BEBIDO antes de intervenir, a mí definitivamente era ya lo único que me quedaba por leer aquí.
Beber. Precisamente. ¡Beber! Que para eso luego vendrá la gracia.

Ponme otro de cinismo con cola zero, anda.
Y creíamos haberlo leído todo. Dios nos defienda.
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Pedro L. Llera
¡Con lo mal que lo pasa usted en este portal! ¿Qué hace usted dando el coñazo aquí? ¿Por que no se va a dar una vuelta por Religión Digital? Es usted muy "jartible"...
02/03/18 1:24 AM
  
Juan Argento
Juan Francisco, deje de buscarle pelos al huevo. El comienzo del párrafo 12 es muy claro:

"El lugar donde recibimos la salvación traída por Jesús es la Iglesia,"

No dice "uno de los lugares donde recibimos la salvación traída por Jesús es la Iglesia", ni siquiera "el lugar donde recibimos de la mejor manera la salvación traída por Jesús es la Iglesia".
02/03/18 3:03 AM
  
Antonio1
Me parec muy bien, pero que quedé que cuando el papa se refiere a una Igkesia pobre y para los pobres se está refiriendo a un mandato de Cristo que en muchos casos está sin cumplir. Queda mucho por hacer en ese sentido y tenemos todos los cristianos que ayudar al papa para obedecer a Cristo y tener una Igkesia pobre para aununciar la buena nueva a los pobres. El mismo Cristo que pronunció “lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre” es el que dijo “No os procuréis oro, ni plata, ni cobre en vuestras fajas;
ni alforja para el camino, ni dos túnicas, ni sandalias, ni bastón; porque el obrero merece su sustento.“
Al parecer segun algunos hay palabras de Cristo que se aplican sin posibilidad de excepción alguna y otras nos la pasamos por el forro y hasta molestan y parecen hereticas cuando un papa nos la recuerda.
Curiosa manera de seguir a Cristo.
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Pedro L. Llera
¿Y por qué da usted por supuesto que yo me "paso por el forro" la opción por los pobres? ¿por qué da usted por supuesto que a mí "me molesta" que me recuerden la exigencia de caridad con los pobres? Usted no tiene ni idea de lo que está hablando. Pero ni idea... Y cuando uno no sabe de qué está hablando, mejor se calla. ¿Acaso sabe usted algo de mí y de si yo estoy o dejo de estar comprometido con los más pobres? ¿Se cree usted que yo soy rico? Es que no sé ni por qué me molesto en contestarle...
02/03/18 8:27 AM
  
Guillermo PF
D. Pedro, me temo que no acierta usted en ninguna de las cuatro frases con las que me responde. La 2ª y 4ª serían consecuencia, en todo caso, de que usted mismo cae en la 1ª. Y la 3ª compruébela antes de insinuar, ¿no?
De todas formas no ha pillado usted el fondo de mi comentario. Mejor así.
Lo retiro, por cierto, porque en el fondo me apena.
02/03/18 9:33 AM
  
Luis Fernando
Yo tenía entendido que los sodomitas tienen el mismo sentido del humor que el resto. O al menos la capacidad de captar cuando se habla de broma. Alguno no.
02/03/18 9:49 AM
  
Luis Fernando
No se defiende a los pobres apoyando el populismo rancio que está empobreciendo el continente al que se pertenece.
Que es exactamente lo que hace el actual pontífice.
02/03/18 10:36 AM
  
Guillermo PF
Los no-heterosexuales lo tenemos absolutamente todo en común con el resto de mortales y pecadores de esta curiosa vida. El sentido del humor (incluido el reírse de uno mismo, importantísima capacidad), las ganas de encajarse otra de gambas hoy que es vigilia, la suerte o no de que Dios te regale el don de la fe, y aunque parezca mentira hasta la posibilidad de caer enamorados como humanos que somos.
Ni siquiera nos gusta nada que no le guste de hecho a media humanidad, normalita completamente por tanto.
Y ya para los que piden a gritos rizar el rizo, alguno hay que hasta ha llegado a multiplicarse por la vía ordinaria; sobre todo alguna, que lo tiene más que "a huevo".

Lo que pasa es que pudiera ser que haya "bromas" de tintes altamente "autoindiscretos", pero eso allá cada cual. Quod scripsi, scripsi. Yo ya he dicho que me he desmarcado.
02/03/18 1:51 PM
  
Ramvel
Sres. Luis Fernando y Pedro Luis,
supongo que con algunos comentaristas se están ejercitando en la penitencia por la Cuaresma, incluida la práctica de algunas de las obras de misericordia. Sin duda, sus buenas obras darán fruto, pues están al nivel de lo cuasi-heroico.
02/03/18 2:20 PM
  
claudio
No era necesario repetir que la Salvación está en la Iglesia, ese es el sentido de su existencia y lo que la hace diferente a cualquier otra estructura. Si no fuera así para qué la hizo Cristo ?, para qué la dotó del poder de administración sacramental ?.
Aunque se trata solamente de una Carta, por el origen (Doctrina de la Fe) es una clarísima y breve advertencia que hay algunos temas Teológicos y Dogmáticos que son un camino de perdición, la Carta refiera nada más ni nada menos que a la salvación que es el objeto único inescindible de la venida de Cristo.
La Carta dice "La Salvación en la Iglesia, cuerpo de Cristo. El lugar donde recibimos la salvación traída por Jesús es la Iglesia, comunidad de aquellos que, habiendo sido incorporados al nuevo orden de relaciones inaugurado por Cristo, pueden recibir la plenitud del Espíritu de Cristo (Rm 8, 9). Comprender esta mediación salvífica de la Iglesia es una ayuda esencial para superar cualquier tendencia reduccionista".
Los Obispos deben "comprender" y aceptar a Cristo plenamente. Pelagio y "Agnóstico" son errores gravísimos que hay que estudiar y conocer para refutar, poder explicar a los fieles y en defintiva condenar para que nadie caiga en la trampa.
Recordemos que la enorme ventaja que tenemos con relación al Tentador es qué no conoce el resultado de la tentación, eso permite estar siempre atentos a pedir "no nos dejes caer en la tentación", la Gracia (habitual, actual, eventual o la que elijan) está desde siempre y es eterna.
02/03/18 4:34 PM
  
Almudena1
Estamos tan cansados de leer, escuchar y ver hechos y actos, palabras dichas y escritas tan contradictorias todas ellas a la verdad que se desprende de esta carta, que uno ya no puede sino dar gracias a Dios por ella. Y si ésta es la verdad, que lo es, ¿dónde queda todo lo demás?
Es imposible adherirse a esta carta sin rechazar todo lo que últimamente se nos dice y cuenta. Y me da igual quién lo diga, escriba o cuente, sea homilía, exhortación, entrevista... La Verdad es La Verdad y es la única que nos hará libres y plenos en cuerpo y alma.
02/03/18 6:20 PM
  
gringo
Jejejeje que acusen a Pedro Luis de modernista, es la mejor prueba de que escribas lo que escribas y hagas lo que hagas, alguien te pondrá a caer de un guindo con cualquier excusa.
Y el Papa Francisco no es una excepción.
Hace un rato estaba ojeando una web tradicionalista, y criticaban un montón de cosas que hizo Juan Pablo II y que el resto de católicos pasaba por alto, se lo perdonaban (rezos multireligiosos en Asís, besar el Corán, decir que los judíos seguían siendo el pueblo de la Alianza, etc.).
En realidad pocas cosas del papado de Francisco son nuevas, todo se ha ido cocinando a fuego lento desde hace décadas.
Pero ahora a Francisco los que nunca se han definido como tradicionalistas ni sedevacantisras, digamos los " católicos normales de toda la vida", han decidido no pasarle ni una.
Ahora Franciso besa un Corán y le meten fuego al Vaticano.
02/03/18 7:10 PM
  
Mikel
Muchísimas gracias Pedro. Daos cuenta hasta qué punto ha llegado nuestra desolación que la publicación de un documento católico por parte de la CDF está siendo un balón de oxígeno para muchos de nosotros... En este sentido coincido con un comentario de LF a esta noticia el que hablaba de que la carta servía como pisto para que los pollos coman y dejen de piar, yo creo que pone el dedo en la llaga, la decisión de sacar este documento recalcando la enseñanza de que la Iglesia es el lugar donde recibimos la salvación traída por Jesús podría haberse tomado también ante las voces que se han levantado tocando la posibilidad de un cisma, sin ir más lejos las de los dos cardenales firmantes de los dubia que quedan vivos.
02/03/18 9:08 PM
  
Palas Atenea
Profesor Llera: No entraba por aquí por darle un descanso, ya que reconozco ser cansina (tengo que reflexionar antes de confesarme) pero veo que los que no se confiesan necesitan un psicólogo para que les diga lo obvio. Ejercite su paciencia que estamos en Cuaresma.
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Pedro L. Llera
No se preocupe, querida amiga: usted no es "cansina" ni "jartible". Usted hace comentarios sensatos con los que aprendo mucho. Pero con la estupidez tengo un margen de paciencia cada día más limitado.
02/03/18 10:05 PM
  
claudio
La Doctrina de la Fe goza del privilegio de la oportunidad, llega justo con este documento, al reiterar lo que se indicó en el Concilio EV II y en el CATIC: Fuera de la Iglesia no hay salvación" 846 ¿Cómo entender esta afirmación tantas veces repetida por los Padres de la Iglesia? Formulada de modo positivo significa que toda salvación viene de Cristo-Cabeza por la Iglesia que es su Cuerpo: El santo Sínodo [...] «basado en la sagrada Escritura y en la Tradición, enseña que esta Iglesia peregrina es necesaria para la salvación. Cristo, en efecto, es el único Mediador y camino de salvación que se nos hace presente en su Cuerpo, en la Iglesia. Él, al inculcar con palabras, bien explícitas, la necesidad de la fe y del bautismo, confirmó al mismo tiempo la necesidad de la Iglesia, en la que entran los hombres por el Bautismo como por una puerta. Por eso, no podrían salvarse los que sabiendo que Dios fundó, por medio de Jesucristo, la Iglesia católica como necesaria para la salvación, sin embargo, no hubiesen querido entrar o perseverar en ella» (LG 14). 847 Esta afirmación no se refiere a los que, sin culpa suya, no conocen a Cristo y a su Iglesia: «Los que sin culpa suya no conocen el Evangelio de Cristo y su Iglesia, pero buscan a Dios con sincero corazón e intentan en su vida, con la ayuda de la gracia, hacer la voluntad de Dios, conocida a través de lo que les dice su conciencia, pueden conseguir la salvación eterna (LG 16; cf DS 3866-3872). 848 «Aunque Dios, por caminos conocidos sólo por Él, puede llevar a la fe, "sin la que es imposible agradarle" (Hb 11, 6), a los hombres que ignoran el Evangelio sin culpa propia, corresponde, sin embargo, a la Iglesia la necesidad y, al mismo tiempo, el derecho sagrado de evangelizar» (AG 7).
02/03/18 10:40 PM
  
rastri
Bien que por nuestros propios medios, en modo y manera de talentos concedidos mal administrados, todos podemos condenarnos;
Lo cierto es, sin lugar a dudas, que por causa de nuestros propios medios mal administrados, nadie puede salvarnos, otro que no se Dios. (Mt.19,26;Lc 18,27)

Mas me pregunto yo: ¿Alguien sabe, cuál es, en qué consistirá la transformación física del cuerpo humanos para que pueda ser visto y comprendido en ese ideal de salvación carente de dolor y lágrimas?
¿Alguien sabe cómo, -dentro de su cosmogonía de cielo y tierra nuevos- será el planeta Tierra como última residencia de los bienaventuradamente resucitados?

¿Alguien sabe en qué consistirá ese "restablecer todas las cosas" de las que Jesús habla cuando se refiriere al profeta Elías, ya venido al mundo para este cometido? ( Mc.9, 11-13; Mt. 17, 11-13)

¿Soy yo un neo-gnóstico? O no es más cierto que si bien, -en modo y manera de tiempo y lugar- siendo todos distintos; Iguales somos para Dios en la medida que cumplimos con su mandato?





03/03/18 5:44 PM
  
graliro
Acontinuación se muestra la reproducción de la cadena de Twitter Veri Catholici sobre el tema y el comentario completo sobre la Carta Placuit Deo de la CDF:



El primer error grave , que es implícitamente herético, es la frase "Salvación cristiana", que implica que hay una salvación aparte de Cristo y hace que la única salvación, que es Cristo, sea meramente una especie de salvación en general.

En segundo lugar , la traducción al inglés sigue el uso de los ateos ateos al negar la capitalización honorífica a la Naturaleza Divina, el Mediador, etc., a lo que los católicos están acostumbrados.

Tercero, la carta cae en el error de la metafísica de Gnosticismo / Heráclito cuando dice: "La enseñanza sobre la salvación en Cristo debe ser siempre profundizada". Como si hubiera algo insuficiente o ineficaz en la clara predicación del Evangelio contenida en las Escrituras y Tradicion

En cuarto lugar, la Carta cae en la confusión de género cuando dice: "Aferrándose a la mirada del Señor Jesús, la Iglesia se vuelve hacia todas las personas con amor maternal" Porque la Iglesia es femenina y Cristo es masculino y eso colorea su visión.

Quinto, la Carta establece un nuevo depósito de la fe ("la mayor tradición de la fe y con particular referencia a las enseñanzas del Papa Francisco") que es tanto objetiva como ontológicamente diferente de la Escritura y la Sagrada Tradición.

Estos 5 puntos muestran que la Carta es formalmente gnóstica, mientras que afirma denunciar el "gnosticismo". Este es un documento muy engañoso y peligroso. ¡Advertimos a todos los fieles que lo rechacen!

Sexto , la Carta avanza los errores del Personalismo, que infectan los Institutos Pontificios en Roma, y ​​que redefine la salvación como la salvación de la persona humana, más que del alma, y ​​el cuerpo solo en virtud de la Resurrección en el mundo venidero.

Séptimo, la Carta en II, 2, presenta una soteriología ontológica divorciada de todas las causas y efectos morales, como si el pecado y el arrepentimiento de ella no fueran esenciales o temas clave en la verdadera soteriología. Esto es puro gnosticismo del tipo clásico.

Ocho, a pesar de sus intentos de evitar el neo-Pelagianismo, la letra en II, 4, cae en el Pelagianismo clásico cuando escribe, "para que podamos unirnos al Padre como hijos en el

Noveno, la Carta reitera un error clave del Personalismo cuando escribe en III, 5 "El hombre se percibe a sí mismo, directa o indirectamente, como un misterio", esto confunde los Misterios de la revelación y la religión verdadera, con concepciones existencialistas de la individualidad y la existencia.

En décimo lugar, la Carta cae en los errores del americanismo al afirmar que todos los hombres buscan la felicidad y la persiguen. La enseñanza católica es que todos los hombres, heridos por el pecado original, ya no buscan la bendición sino imágenes idólatras de ella, a menos que sean salvos por la gracia de Cristo.

Comentario del lector: Ted escribe: "En realidad, el punto diez es falso. Incluso Santo Tomás de Aquino, siguiendo a Aristóteles, señala que "por necesidad, todo hombre desea la felicidad" (S. Theol., Primera Parte de la Segunda Parte, Q, 5, Ar 8, resp.). El americanismo simplemente sigue lo que es evidente por sí mismo ".

Undécimo , la Carta intenta exponer incomparablemente una antropología cristiana sin confesar que hay un Creador del hombre, que la parte principal del hombre es su alma, ¡y que la salvación consiste tanto en una conversión ontológica como moral!

Duodécimo, la Carta en III, 7 cae en la posición implícitamente herética de decir que el mal viene del corazón del hombre, cuando la Fe Católica sostiene desde el principio que el mal proviene del orgullo de Lucifer que sedujo a los Ángeles y que puede tener poder sobre las cosas materiales .

Decimotercero, en III, n. 8 de la Carta tiene una incongruencia, “Por lo tanto, la salvación divina lleva en el orden de las criaturas compartido por toda la humanidad y acompaña su viaje concreto de la historia.” Mediante el cual se introduce una soteriología cosas irracionales para apoyar el marxismo ecológico.

Decimocuarto, en III n. 8, repite la noción descuidada de B16 de que Ser cristiano es un encuentro, cuando de hecho, Trent enseña que comienza con la justificación y la santificación que es el resultado de la Acción Divina, no simplemente un encuentro.

Decimoquinto, en IV, n.9 encontramos 1 párrafo católico, que contiene una explicación correcta, pero está ideológicamente aislado del resto de la Carta, cuyos errores no refuta suficientemente.

Decimosexto, en V, n. 12, la Carta no identifica correctamente a la Iglesia Católica y omite escrupulosamente la palabra "Católico" y por lo tanto da soporte al error de que hay una buena esperanza para la salvación fuera de la Iglesia Católica.

Decimoséptimo, en V. 12, la Carta reitera el panteísmo bergogliano cuando dice: "En ella tocamos la carne de Jesús, especialmente en nuestros hermanos y hermanas más pobres y más sufrientes". Confundir sarx con somata para promover la elevación del eros al nivel de caritas.

Decimoctava, en V. 14, la Carta cae en el error de afirmar que las relaciones humanas son necesarias para la salvación, ¡aunque muchos ermitaños santos hablaron y no hablaron con nadie durante décadas y el resto de sus vidas!

Decimonovena, en VI, 15, la Carta repite la absurda y absurda doctrina de la Salvación por Diálogo, y omite la referencia directa a predicar la necesidad evangélica de aceptar a Cristo o ser condenado, como Cristo mismo dijo, no dialogar: ¡Arrepiéntete y cree!

Finalmente, si un estudiante en un curso de teología en una Universidad Pontificia hubiera escrito este documento, VC les daría un 3 de 10 por su pobre intento de reiterar la Doctrina Católica sobre los errores clave de nuestros días.

Por favor comparta esta crítica porque tantos "eruditos" han sido engañados por este documento, muy hábilmente escrito para introducir la herejía en la mente de católicos desprevenidos y no alertas.
05/03/18 2:09 AM
  
Yvette
Ahora sí que estoy obsolutamente confundida. Don Pedro y graliro en oposición. Por favor aclaren la interpretación correcta.
26/03/18 7:29 PM
  
Yvette
Estoy totalmente confundida. Por favor alguien me aclare las diferentes interpretaciones de don Pedro y graliro
26/03/18 8:06 PM

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