La Iglesia del oasis podrido
José Antich, el director de La Vanguardia y jefe del nefasto Oriol Domingo, el 21 de septiembre de 2003 publicaba la siguiente editorial titulado:´“La sustitución de Carles”:
“El envío a Roma por parte del nuncio de la Santa Sede en España, Manuel Monteiro de Castro, de la terna de la que debe surgir el sustituto del cardenal Ricard Maria Carles al frente de la diócesis de Barcelona viene a confirmar que la evaluación por parte del Vaticano empieza a entrar en la recta final… En nuestras páginas de Sociedad trazamos una sucinta biografía de los tres nombres que figuran en la propuesta del nuncio Monteiro: los dos que él considera más capacitados, el sacerdote del Opus Jaume Pujol y el obispo de Cartagena, Manuel Ureña, y, en tercer lugar, el prelado que ofrece el perfil preferido por los sectores nacionalistas, el arzobispo de Tarragona, Martínez Sistach. Hay pocas dudas de que la Iglesia en Catalunya atraviesa enormes dificultades y, a diferencia de otras diócesis españolas, el retroceso pastoral ha sido palpable. La decisión final respecto a la sustitución de Carles no se antoja fácil, dada la identidad propia de Catalunya. Pero se haría un flaco favor a los creyentes si la solución final fuera exclusivamente política.”