Comprender y vivir la arquitectura cristiana
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Conocidos y estudiados los gestos litúrgicos, comenzamos este año 2011 con un estudio sobre los edificios del culto, sus partes y accesorios. También en este apartado seguiremos principalmente la “Historia de la Liturgia” de Don Mario Righetti en su primera edición italiana de 1945 más extensa y completa que la edición española que la B.A.C. realizó años más tarde.
Debería resultar trascendental en estos impulsos iniciales de un nuevo movimiento litúrgico que redescubramos los cimientos, muy especialmente de la arquitectura cristiana y de los principios que a través de los siglos la animaron así como de todos los complementos que nacieron a partir del edificio cultual.


El "jovencito" sacerdote que aparece en la fotografía no es otro que el Rvdo. Lluís Bonet Armengol, actual párroco de la basílica de la Sagrada Familia de Barcelona. No hace falta ser Einstein para darse cuenta de que es un hombre que ronda los 80 años (nació en 1931), y que ya hace tiempo que debería estar jubilado sino es por una de las máximas de n.s.b.a. cardenal Martínez Sistach: "Que todo siga como está, hasta que yo me jubile". Es el inmovilismo que tanto daño está haciendo a nuestra castigada diócesis. No importa que todo degenere progresivamente, porque nuestro arzobispo no quiere tener problemas y los cambios traen problemas. Si se jubilaran muchos de estos ancianos párrocos éstos serían substituídos por jóvenes sacerdotes, que convertirían sus parroquias en "germinantes", pero eso no interesa al Sr. Cardenal porque crearía muchos recelos, envidias y pataleos a los sacerdotes que le auparon y que mantienen con él un pacto de silencio a cambio precisamente de mantener el "status quo".
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“¡Nos ha nacido un niño!” Ésta es una de las más bellas manifestaciones de alegría. La naturaleza entera ( natura es el participio futuro de nascor ; es por tanto la que está por nacer) goza con la expectativa del nacimiento. Todo nacimiento es motivo de gozo. Es que ésa era la única y auténtica laetitia que entendían nuestros antepasados: la vida prodigándose. De ahí el gozoso “Puer natus est nobis” que inunda de júbilo toda la Tierra.





