Feminidad versus Feminismo (y 2)
En el artículo anterior hice referencia a las conferencias sobre la defensa de la feminidad como alternativa constructiva opuesta al feminismo, que tuvieron lugar en Roma el 31 de enero. Dejé de lado la pronunciada por Tania Fernández, delegada de Derecho a Vivir en Cataluña, (en la fotografía), y que ahora paso a reseñar, destacando las ideas más potentes que expuso:
El origen del hombre es mucho más cavernícola de lo que se ha empeñado en vendernos la mítica y beatífica antropología en boga. Venimos de la caverna y aún no nos hemos desprendido de ella: la llevamos incorporada en la mente, si bien en formas cada vez más sofisticadas. Aunque parezca mentira, el principio del fin de la caverna fue la domesticación del hombre por el hombre (es decir que según esta visión, todavía existió algo peor): y como corresponde al régimen ganadero, la suerte tanto del hombre como la de la mujer fue lo más parecido a la que se da en cualquier ganadería. Estamos, claro está, en una antropología que no comparte con la actualmente en boga el buenismo y el optimismo sobre la condición humana que caracteriza al marxismo y a la New Age .




El pasado miércoles asistí a la presentación del libro del arzobispo de Tarragona, Recuerdos y esperanzas, que tuvo lugar en la barcelonesa librería Claret. La primera sorpresa que tuve se halló en el vacío de la sala, en la que nos ubicamos cuarenta personas mal contadas, de las cuales 20 eran seminaristas del interdiocesano, voluntariamente aportados por su rector Norbert Miracle, que hacía de telonero. Entre los otros 20 solo merece contar la presencia VIP del rector Turull (cuyos rasgos, cada día mas orondos, le están proporcionando una complexión obispal) y nuestro amigo Llisterri, siempre fiel y agradecido a los reclamos de la Claret. Turull, como acostumbra, marchó a medio acto y es que las innumerables tareas que le encomienda nuestro cardenal le impiden centrarse en una única misión. Pero él pone voluntad y se hace ver en todas partes. Ningún representante más del clero barcelonés; ningún miembro del Opus Dei, al que pertenece el arzobispo y ni tan siquiera una mínima presencia de algún medio de comunicación, máxime cuando -con motivo de este libro- tuvieron lugar las polémicas declaraciones de Pujol Balcells a TV3, que, entre otras desproporcionadas reacciones, motivaron una denuncia de la asociación de gays y lesbianas. Pero el acto tuvo mucha miga. Los que no fueron, se lo perdieron.
¡Qué lejos queda aquel 2004! Nuestro n.s.b.a. Arzobispo, recién llegado, se jactaba de viajar cuando volaba, no en Business en razón de su alta dignidad, sino en turista! Era por acentuar su alejamiento de la first class en la que al parecer viajaba Carles. 




