Contención del gasto, austeridad y un poco de vergüenza
Ignasi Garcia Clavel |
Josep Maria Carbonell |
El relevo político que, después de la holgada victoria de CiU, va a favorecer la alternancia política en la más alta institución catalana, va a encontrarse con graves problemas de liquidez. Financieramente insolvente o muy limitado, sin embargo el gobierno de Mas no puede llevar adelante otro tira y afloja con el Gobierno de España, en cuanto a financiación se refiere, que lesionaría gravemente la ya poca credibilidad y buena reputación que a Cataluña le queda después de estos siete años de Tripartito en el resto de España.
Y son muchas las políticas económicas y sociales que urgen en Cataluña si no queremos que el país se resquebraje. Al parecer el tripartito ha dejado la caja vacía. Era previsible. El continúo derroche y dispendio al que se acostumbró el Tripartito nos ha abocado al borde del colapso. Miren si no las enjundiosas subvenciones que el departamento de Vicepresidencia de Carod Rovira otorgó para el presente ejercicio. ¡Es para echar a correr!