También proclamo el juramento antimodernista
“Yo, Maricruz Tasies Riba, abrazo y recibo firmemente todas y cada una de las verdades que la Iglesia por su magisterio, que no puede errar, ha definido, afirmado y declarado, principalmente los textos de doctrina que van directamente dirigidos contra los errores de estos tiempos.

Me lo dijo un apreciado sacerdote cuando le conté de la fractura de pelvis de papá. Me dijo que el Señor nunca da una cruz sin dar la fortaleza para llevarla. Cuánta razón tiene! 
Con el paso del tiempo me he convertido en la piedrita en el zapato de fieles y sacerdotes. No ha sido un acto premeditado sino más bien impulsivo (como mucho de lo que hago); sobre lo cual, obviamente, la honradez me obliga a asumir siempre las consecuencias. 
Uno es tan cándido que le dice al Señor cosas como: “Hágase tu voluntad”, “Pongo mi vida en tus manos”, “Moldéame como al barro lo moldea el alfarero”, etc., y, cuando lo dice, lo hace –básicamente- por dos razones:
         




