Redes sociales. Uno llega a donde llega
- Usted es un grosero y un maleducado, porque le he mandado ya dos mensajes y no me ha respondido.
No se hacen idea de lo que puede llegar a ser esto, porque el personal se empeña en contactar con un servidor por todos los medios que se le ocurren, con las cuestiones más insólitas y peticiones de lo más original. Uno llega a donde llega. Me explico.
Comenzamos por las peticiones de dirección espiritual. Creo que no es conveniente que la señora X de Montevideo o el joven Y de Cochabamba se dirijan con un servidor. Estoy seguro de que en sus diócesis respectivas encontrarán sacerdotes que puedan orientarles de una manera adecuada. Más complicado recibir mensajes de personas que, o bien se están planteando una vocación de especial consagración, o se sienten rechazadas en un seminario o convento. Tampoco sé muy bien la altura espiritual de las Társilas de Villariba del Monte o si los Padres Gundisalvos de Villabajo del Llano están más o menos contaminados de modernismo.