Alabadle con platillos volantes

Me van a permitir que me tome esta mañana de relajo y que me ría un poco. Me hace falta, porque ayer fue uno de esos días en que parace que todo sale al revés.

Cuatro parroquias, así que entre domingo y lunes ocho misas, que no está nada mal. Lo que pasa es que surgen cosas, qué le vamos a hacer.

El domingo se loquearon las campanas de La Serna. El programador automático decidió optar por la libertad y hacer sonar las campanas exactamente cuando le daba la gana. No estuvo mal el día: misas, inauguración de alumbrado en La Serna y movida campanera. 

Comienzo el día de la Inmaculada con misa en Gandullas a las 11. En Piñuécar, a las 12. Y cuando acabo la misa para marchar a Braojos, misa a las 13 h. y posterior bendición e inauguración del belén, el coche dice que no arranca. Fantástico. Una señora que me lleva para Braojos y a ver cómo nos apañamos. Misa solemne y lo del belén. Acabo y a ver qué se hace con el coche. Lo normal: aviso al seguro, grúa, y a ver quién me lleva a Piñuécar… El caso es que el coche arrancó… y hoy al taller porque el otro día me di un golpe sin importancia, pero al taller… 

Por cierto, merece la pena el belén de Braojos. Un excelente trabajo. Y la bendicion y la inauguración, todo un éxito. 

Algún día escribiré sobre gazapos de lectores y colaboradores en las parroquias. Hoy les dejo algunos y así nos reímos, que falta me hace.

Rosario cotidiano. Misterios luminosos. La señora que dirige, con toda solemnidad: “Segundo misterio. La auto revelación del Señor en las bodas de Canadá".

Lectura de este pasado domingo: “el novillo y el león PADECERÁN juntos". Está bien. Si andan tristes, mejor que lo padezcan juntos.

Santo rosario, Misterios gloriosos. Tercer misterio: “la venida del Espíritu Santo sobre el colegio cardenalicio". Responde una por lo bajo: puede que fuera la primera vez.

El credo de mi buen sacristán: “Creo en Jesucristo, su único Hijo, DE Nuestro Señor". Ya le he dicho que por menos la gente antes llegaba a las manos. 

Un lector proclama solemnemente el salmo 150: 

¡Alabadle con platillos sonoros!

¡Alabadle con platillos VOLANTES! 

Feliz día.