6.05.21

Entrevista a Albert Cortina sobre su nuevo libro ¡Despertad! Transhumanismo y Nuevo Orden Mundial

Albert Cortina es abogado y urbanista. Ensayista y experto en transhumanismo, posthumanismo y ética de las tecnologías exponenciales. Director del Estudio DTUM. Master en Estudios Regionales, Urbanos y Metropolitanos. Consultor en planificación urbana y territorial. Promotor de una ética aplicada al urbanismo, la ordenación del territorio y la intervención y gestión del paisaje. Impulsa un humanismo avanzado para una sociedad donde las biotecnologías exponenciales estén al servicio de las personas, de las redes de vida y del bien común. Docente, investigador y autor de diversas publicaciones relacionadas con estas materias. Coautor y coordinador de la trilogía de libros ¿Humanos o posthumanos? Singularidad tecnológica y mejoramiento humano (2015), Humanidad infinita. Desafíos éticos de las tecnologías emergentes (2016) y Singulares. Ética de las tecnologías emergentes en personas con diversidad funcional (2016). Autor del libro Humanismo avanzado para una sociedad biotecnológica (2017).

En esta ocasión profundiza en su último libro ¡Despertad! Transhumanismo y Nuevo Orden Mundial, un trabajo imprescindible para conocer dos de los temas que cada vez están más de actualidad y que nos conciernen a toda la humanidad.

¿Por qué un nuevo libro sobre transhumanismo, esta vez relacionado con el Nuevo Orden Mundial?

Porque el transhumanismo/posthumanismo es la ideología emergente de la globalización y de la actual sociedad biotecnológica. En el presente siglo XXI esta nueva utopía/distopía pretende liberar al individuo de su naturaleza y condición humana mediante la hibridación con la inteligencia artificial y a través de la modificación genética.

En el libro ¿Humanos o posthumanos? publicado en el año 2015, el científico Miquel-Àngel Serra y yo abrimos un debate entre distintas disciplinas y puntos de vista sobre la singularidad tecnológica y el mejoramiento humano. En el año 2016 con los libros Humanidad infinita y Singulares, planteamos los desafíos éticos de las tecnologías exponenciales emergentes y los cambios disruptivos que estamos viviendo en el presente y que se incrementaran en el futuro. Finalmente, en el año 2018 propuse una alternativa a la ideología transhumanista/posthumanista con el libro Humanismo avanzado fundamentado en el desarrollo integral de la persona, en nuestra misión de custodios de la naturaleza y de las redes de vida que forman parte de la creación, y en una concepción trascendente del ser humano compuesto por cuerpo y alma, que tiene plena libertad y una dignidad singular ya que está creado a imagen y semejanza de Dios.

Ahora, con el libro ¡Despertad! pretendo que el lector tome conciencia de los graves acontecimientos que se están produciendo y acelerando con el llamado “Gran Reinicio” del mundo. Este reset del sistema conlleva una agenda para la construcción de un Nuevo Orden Mundial centrado en la globalización homogeneizadora, se caracteriza por tener un importante déficit democrático y su implantación puede causar una grave brecha de desigualdad en la humanidad. Esta “nueva normalidad” que se nos propone/impone va a suponer la aceptación progresiva de las tecnologías exponenciales invasivas de mejoramiento humano y la ideología del transhumanismo/posthumanismo.

Sin embargo, lo fundamental de este nuevo libro es que propone una serie de claves desde la convergencia de saberes (ciencia-tecnología, filosofía-ética y teología- espiritualidad) que permiten interpretar los signos de los tiempos - incluso desde el conocimiento profético- ofreciendo un mensaje de paz para nuestros corazones, en estos momentos de gran confusión y tribulación, renovando la confianza y esperanza en el ser humano y en el futuro de la humanidad. Y es que la esperanza es un mensaje universal.

Vayamos por partes, según usted, ¿quién tiene que despertar y cuál es el sueño?

Tenemos que despertar todos los ciudadanos. El sueño que hemos vivido - al menos en Occidente- se ha sustentado en una fe ciega depositada en el progreso ilimitado derivado de los avances científico-tecnológicos, en la entronización exclusiva de la razón, así como en una ilusión o espejismo de bienestar basado principalmente en una cosmovisión materialista del ser humano, de la naturaleza y del universo.

Buena parte de la sociedad, en estas últimas décadas, ha vivido centrada en el consumo y en sus problemas cotidianos - que son múltiples y acuciantes - sin ser demasiado consciente de lo que se estaba fraguando de forma discreta y poco democrática. Y es que en estos últimos años se ha ido construyendo la arquitectura de un incipiente Nuevo Orden Mundial, basado en una gobernanza global, y dirigido por unas élites financieras y tecnocráticas codiciosas de un poder total sobre la población mundial. Y al parecer, este proceso se ha acelerado con la crisis sanitaria de la pandemia por la Covid-19.

En efecto, según mi opinión, las élites globalistas han acelerado sus propuestas de “salvación” para la humanidad basadas en la ideología transhumanista/posthumanista, las tecnologías exponenciales invasivas y la sustitución de la democracia basada en la soberanía de los ciudadanos y de los países por una cibercracia global que supera en influencia a la tecnocracia de los organismos supranacionales y a las burocracias corporativas tradicionales. De este modo, Silicon Valley, a nivel icónico, es ahora mismo el centro del poder mundial de esa cibercracia, junto con el poder financiero de Wall Street que lo sostiene: principalmente los megabancos y las gestoras de fondos de inversión. El ciberespacio no solo son las redes sociales, sino la industria del software y programación, de los algoritmos, la ciencia de datos, la inteligencia artificial, los servicios de hosting y el sector del entretenimiento, ocio y psicología de masas.

No obstante, a esa cibercracia occidental hay que sumar actualmente la cibercracia oriental. Asia, y concretamente China, está librando una “guerra mundial híbrida” por la hegemonía del mundo, del ciberespacio, del espacio ultraterrestre y por el control de la mente humana, es decir, por la conquista de nuestro cerebro.

Leer más... »

5.05.21

Mª del Prado Fernández, comboniana: “Muchos quieren experiencia misional, pero pocos quedarse”

Una joven castellana, un día se armó de valor y se presentó en la delegación de misiones… ¡no fue nada fácil para mí dar ese paso! Y realmente no sabía bien lo que iba buscando… ser misionera, pero ¿qué era eso? No lo sabía. El sacerdote le acogió, y le preguntó “¿pero tú que buscas?”… y su respuesta fue “Yo quiero ser misionera para toda la vida” y subrayó que ella quería trabajar en África. En ese momento le parecía el continente más abandonado.

Según la Hna Mª del Prado Fernández, misionera comboniana, ha merecido y merece la pena seguir al Señor… es lo más grande que le ha podido pasar en la vida. Él no se deja ganar en generosidad y lo poquito que nosotros podemos ofrecer Él lo multiplica y lo hace más grande, más bonito…Si volviera a nacer volvería a elegir esta opción de vida, con Él… y si pudiera tener más vidas, las dedicaría todas a la misión, siempre con el Señor Jesús.

Háblenos un poco de usted y de cómo nace su vocación religiosa.

Me llamo María del Prado, Fernández Martín, soy de Ciudad Real y vengo de una familia sencilla. Mi vida era la de cualquier joven del momento: amistades, estudios, diversión…y grupo parroquial de jóvenes.

No sabría decir con exactitud cuando surgió en mí el deseo de la vocación religiosa, pero empecé a plantearme qué quería hacer con mi vida en el momento en el que estudiaba enfermería. Yo veía mi vida dedicada a los demás, pero ¿cómo?… No sé de dónde ni cómo surgió en mí la idea de ser misionera, pero sé que estaba ahí, en lo profundo de mi corazón y no me dejaba tranquila. Había en mí muchas dudas y una certeza: yo quería ser misionera para toda la vida. Y misionera, en mi cabeza, era anunciar a Jesús y “ayudar” a combatir la pobreza. Y así, con esa inseguridad y temor empecé a preguntar a un sacerdote que me orientó hacia la delegación de misiones de mi ciudad.

¿Por qué en la familia comboniana?

Un día me armé de valor y me presenté en la delegación de misiones… ¡no fue nada fácil para mí dar ese paso! Y realmente no sabía bien lo que iba buscando… ser misionera, pero ¿qué era eso? No lo sabía. El sacerdote me acogió, y me preguntó “¿pero tú que buscas?”… y mi respuesta fue “Yo quiero ser misionera para toda la vida” y subrayé que yo quería trabajar en África. En ese momento me parecía el continente más abandonado.

Fue él quien me puso en contacto con las misioneras combonianas y así las conocí. Ellas fueron las que me dieron otras direcciones de congregaciones misioneras para que pudiera elegir, pero a mí me había cautivado la sencillez con las que se presentaron a mí en ese primer encuentro en mi ciudad. Estuve en contacto con ellas durante un tiempo en el que me desplacé a Madrid en dos ocasiones para conocerlas y al final decidí irme con ellas.

Estando ya en la formación, en el noviciado, cayó en mi mano una revista de “Mundo Negro”, la revista de los misioneros combonianos y en su contraportada había una fotografía de una religiosa con un vestido blanco y unos botones rojos que estaba con un niño pequeño en Sudán… Ahí recordé como siendo muy pequeña (7-8 años) yo había visto esa fotografía, no sé dónde, y me había dicho a mí misma… “yo quiero ser misionera como ella”… Nunca lo había comentado con nadie y ¡ahora esa misma fotografía caía en mis manos!… me pareció un toque genial del Señor en mi vida, era como si me dijera…yo te escuché aquel día, y hoy estas aquí! Él me había conducido, sin que yo lo supiera, hasta esa opción misionera y misionera comboniana.

¿Qué es lo más le atrajo de su fundador?

Lo primero que me atrajo de Daniel Comboni fue que él dedicó toda su vida y sus esfuerzos al continente africano, y en concreto en Sudán, cuando aún se vivían allí situaciones tales como el comercio de esclavos y cuando la mentalidad de ese momento decía que el africano no tenía alma. La idea de Comboni de “Salvar África con África”, que fue también su método misionero, me parecieron muy actuales y muy potentes… en el fondo es Evangelio, creer en las personas, apoyarlas…

Leer más... »

4.05.21

Votando patrioterismo liberal nunca se instaurará el Reinado Social de Cristo en España

Hoy 4 de mayo un servidor impartirá una conferencia en el club Empel de Barcelona, a las 19:30 de la tarde, bajo el título El liberalismo: cáncer político y social. Ejemplos prácticos. Como católico militante estoy convencido de que el liberalismo es el mayor enemigo del catolicismo, como me explicó hace algunos años el profesor Javier Barraycoa. Y desde entonces no he cesado de combatirlo en los diferentes medios que he estado. La encíclica Libertas de León XIII o el Liberalismo es pecado de Sardá y Salvany son algunos de mis textos de referencia en mi cruzada antiliberal.

Hoy que previsiblemente ganará Isabel Díaz Ayuso en Madrid he querido dar esta conferencia para que nadie se lleve a engaño. Isabel encarna la línea más progresista del PP, que está en las antípodas de los grandes ideales de la España tradicionalmente católica. Si el Frente Popular, con su ideología marxista y anticlerical representa un gran peligro para España y hay que combatirlo con contundencia, no debemos hacerlo nunca desde el liberalismo, ciertamente un cáncer que ha contribuido a la descristianización de España. Por lo tanto, enmienda a la totalidad al liberalismo, no solo al de PP sino al de todos los partidos que defiendan los principios liberales.

Hasta que no comprendamos que con el patrioterismo liberal no podrá haber jamás Reinado Social de Cristo, no hay nada que hacer. Un árbol malo, no puede dar frutos buenos y el árbol liberal está podrido en su misma raíz.

Recordemos que el liberalismo, como explicaba en una reciente entrevista el profesor Daniel Marín, es la ideología o esa manera de pensamiento que en resumidas cuentas actualiza el pecado original; por un motivo muy sencillo, porque pone como primacía absoluta de todo a la libertad. El liberalismo no exalta la libertad sino la licencia, como decía el Papa León XIII, o dicho de una manera más actual, el libertinaje.

El liberalismo da o tiene potencialidad de dar derechos a todos los males cualesquiera que sean, en virtud de aquella primacía absoluta de la voluntad. De tal manera actualiza el pecado original del cual viene el mundo caído, que lo que provoca a la postre es la apertura de todo tipo de iniquidades, y esto evidentemente tiene consecuencias graves.

Por Javier Navascués

3.05.21

Daniel Marín Arribas: “El liberalismo es tiranía”

Hablamos brevemente sobre liberalismo con Daniel Marín Arribas, uno de los más relevantes expertos y estudiosos del tema en la actualidad.

Daniel Marín es docente universitario y economista profesional en ejercicio. Asimismo colabora en diferentes medios de comunicación y es miembro de AEDOS (Asociación para el Estudio de la Doctrina Social de la Iglesia Católica). En sus titulaciones avanzadas se encuentra el ser Máster en escuela austríaca de Economía y Máster en Doctrina Social de la Iglesia, además de máster en Psicología y Técnico Superior en control de Gestión por el Colegio de economistas de Madrid.

Académicamente destaca por ser un estudioso experto en la Escuela de Salamanca y el Magisterio de la Iglesia, y conocer en profundidad el pensamiento liberal, de donde nace y crece su labor divulgativa y apostolados católicos. Destacamos su último libro Juan de Mariana y la Defensa de la Cristiandad Hispana.

Para aquellos que no lo conozcan, ¿Cómo se podría explicar brevemente el liberalismo?

El liberalismo es la ideología o esa manera de pensamiento que en resumidas cuentas actualiza el pecado original; por un motivo muy sencillo, porque pone como primacía absoluta de todo a la libertad. Además, no solo la libertad en sí misma en su sentido más original, la libertad rectamente entendida en su sentido pleno, sino la libertad entendida de una manera equivocada, a la manera nominalista.

Leer más... »

28.04.21

Luis Segura afirma que la sed de conocimiento es en el fondo ansia de verdad, belleza y bien

Luis Segura es escritor, profesor de secundaria y bachillerato, historiador y crítico literario. Licenciado en Humanidades, máster en Humanidades Digitales y graduado en Ciencias Religiosas. Apasionado lector y bibliófilo, su amor por los libros le llevó a crear, en 2010, La cueva de los libros, espacio de crítica literaria leído en los cinco continentes. Su último libro, El más raro y milagroso crucifijo, es un estudio histórico-artístico sobre una magnífica y desconocida talla del renacimiento español, custodiada en un tranquilo pueblo de la provincia de Albacete.

Católico convencido y profesor de religión, analiza los textos clásicos con una profunda cosmovisión católica.

¿Por qué un libro titulado La cueva de los libros, nombre homónimo de su blog?

En primer lugar, como homenaje a un espacio al que he dedicado una atención desmedida en los últimos diez años. Respecto al título, alude al poder de inmersión de los libros y al hecho de que son, en efecto, un refugio frente al ambiente envilecido imperante, por su capacidad de evasión e incluso de iluminación, entendido esto último como el esclarecimiento de verdades que pueden llegar a ser fundamentales para no confundir lo esencial con lo accesorio, y lo eterno con lo transitorio.

¿Puede hablarnos del contenido y de la razón de ser de su blog?

La materia prima del blog, y del libro mismo, son reseñas literarias, aunque también he publicado en dicho espacio otros textos, como crónicas de viajes, artículos y relatos. Todo ello me permite tener una estrecha relación con asuntos que me apasionan y que me enriquecen intelectual y humanamente. Ésa es la razón de ser del blog, no hay otra: dedicar mi tiempo libre al estudio, a la investigación y al cultivo de las bellezas y verdades encerradas en los libros.

Leer más... »