Pablo de Benavides: “Estamos ante un fin de ciclo, un fin de época. Hay que restaurar la sociedad cristiana”

Pablo de Benavides, ingeniero industrial y consultor de estrategia. Casado y padre de 4 niños pequeños. Catequista durante más de 15 años. Tras su libro Las señales del fin, en esta ocasión nos habla de su último trabajo, titulado Restauración.
¿Por qué un libro titulado Restauración?
El mundo va mal. Se nota en el ambiente una falta de esperanza generalizada respecto al futuro. Pero esto no siempre fue así, incluso en momentos del pasado objetivamente peores. Estamos ante un fin de ciclo, un fin de época. Algunos quieren imponer su Nuevo Orden Mundial, pero ese camino es todavía peor. En Señales del fin hice un repaso de lo que ha sido profetizado para estos tiempos que nos va a tocar vivir dentro de poco. En Restauración analizo cuáles van a ser los detonantes para la necesaria vuelta a una política católica (una guerra, la peor crisis financiera de la historia), cómo varios siglos de revolución nos han traído hasta aquí y qué debemos cambiar en la organización de nuestra sociedad-política.
¿Qué es lo que hay que restaurar?
Hay que restaurar la sociedad cristiana, construida entorno al Evangelio. La realeza social de Cristo es la única salida a nuestros problemas: la guerra, la crisis económica, la soledad, la destrucción de la familia, de los ecosistemas…
Ojo, restaurar no significa volver a un pasado idealizado, sino recuperar un camino perdido hace siglos. Hay que restaurar el derecho natural, la familia, la propiedad, la educación, el ejercicio del poder para ponerlo al servicio del bien común, la liturgia y la Iglesia. De este listado, salvo lo último, todo es terreno de una política católica.
¿Y la democracia?
No está en el listado anterior porque tal como se entiende hoy la democracia, como fundamento de gobierno para darse cualquier tipo de ley sin subordinación a un único soberano, Cristo Rey, es mejor que termine por desaparecer. El ensayo analiza en cambio como la actual democracia es de lejos menos representativa que las viejas cortes de Castilla y de Aragón. Esa es la democracia que habría que restaurar, la vieja representación política limitada e imperativa. Dicho de otro modo, es mejor volver a un rey que reine y abandonar una concepción totalitaria y absolutista de la política, en la que las Cortes legislan sobre todo lo que se les ocurre.
¿Por qué pronóstica que Rusia invadirá Europa?
Esto ha sido revelado en numerosas apariciones privadas de la Virgen como ya adelanté en Señales del fin. Aparece también en la Biblia, una guerra que involucra a Rusia (Gog), a Europa, y que se relaciona con otra guerra que relaciona a Israel con Irán (Persia). La situación geopolítica nos dice que esas revelaciones, públicas y privadas, están próximas a desencadenarse.
¿Qué consecuencias tendría?
En el plano puramente humano, una gran catástrofe en Europa y una crisis económica como no la recuerdan los siglos. En el plano espiritual es la antesala a la intervención de Dios que terminará en el triunfo sobrenatural de la Iglesia, lo que en Fátima fue llamado el triunfo del Inmaculado Corazón de María, pero travesando la Gran Tribulación que anunció Jesús a sus discípulos cuando le preguntaron cuál sería la señal de Su venida.
¿En qué posición quedaría España?
España debería salvarse de lo peor de la destrucción. Difícilmente el ejército ruso podría llegar a nuestras tierras como en cambio sí lo hará a tierras francesas e italianas. Si tenemos la suerte de tener un gobierno sensato, se mantendrá al margen del conflicto, que es lo que históricamente ha hecho, bien hecho, España en las dos guerras mundiales. El otanismo loco de algunos de Vox y del PP es lo peor que nos podría suceder en este escenario.
¿Qué papel podrían tener China y el mundo musulmán?
Aunque de esto no trato en mi libro, China se comerá Taiwán y la guerra de Israel contra Irán dará también un salto cualitativo con el uso de armamento nuclear por parte del único contendiente que ahora lo posee, Israel, en una escalada para construir lo que algunos sionistas llaman el Gran Israel. Esto llevará previsiblemente a una escalada de terrorismo yihadista por todo Occidente, por su apoyo directo o indirecto a Israel. Por ello, el conflicto que se está larvando, será más bien una guerra multipolar en varios frentes y con contendientes distintos.
¿Cómo a partir de aquí se puede restaurar todo?
Será un gran desastre, porque la guerra será nuclear en varios puntos del planeta, aunque no llegará a producirse un holocausto nuclear, porque el Señor detendrá esta guerra con el Aviso anunciado en Garabandal (Mt 24, 30). Con el Aviso, todos los hombres verán su alma como la ve Dios y eso llevará a la conversión a muchos. Aunque esta conversión no tendrá recorrido en la mayoría del mundo, por eso viene el Milagro unos meses después, será el punto de inflexión donde un resto fiel se pondrá del lado del Señor, para volver al buen camino frente a los que querrán simplemente reconstruir y volver rápidamente a lo que tenemos ahora. Pero ojo, porque esa agenda no pretenderá volver a los 90’, tiene un nombre, el Gran Reinicio (Great Reset). El control social será su núcleo.
Igual que Dios se reservó a 7.000 hombres que no doblaron su rodilla ante Baal (1 Re 19, 18; Rm 11, 4-5), habrá en esta ocasión otro resto fiel que combata del lado del Señor. Como el gran milagro, última tabla de salvación para una humanidad incrédula, se producirá en Garabandal, es esperable que ese movimiento de restauración tenga aquí en España un papel importante, para culminar en el cumplimiento de la promesa dada al P. Hoyos en Valladolid, s. XVIII: “Reinaré en España”.
¿Por qué a veces es necesario tocar fondo antes de resurgir?
Es una constante que se verifica a nivel histórico y a nivel personal. Los hombres somos tercos y nos mantenemos obcecados en el error hasta que no nos queda más que perder. Es la historia de muchas conversiones, o me suicidio o vuelvo a Dios. Es lo que han visto muchos revolucionarios a lo largo de la historia: o el triunfo descarnado de la revolución, o la vuelta a Dios. El fondo sugiere algo así como el desierto, el lugar propicio para reflexionar sin distracciones. Será para nuestras sociedades modernas la oportunidad para reflexionar acerca de a dónde nos ha llevado construir un mundo de espaldas al Creador.
Siempre existe la tentación de salvar lo que no es del todo malo, pero es necesario romper del todo y sin miramientos con la apostasía e idolatría, es la enseñanza que nos transmite el AT en los libros históricos, de Josué a Reyes. Como en la historia de Israel, tocar fondo será ocasión para volver al buen camino.
¿En qué medida es factible que se cumplan sus predicciones?
Humanamente es imposible. Las naciones otrora católicas han apostatado. La mayoría de los católicos no conservan la fe de los cristianos que les precedieron durante siglos y esto incluye especialmente a clérigos y consagrados, por desgracia. Estamos en el centenario de la Quas Primas y hoy esta enseñanza es ignorada o contestada por la mayoría de la Iglesia.
Dios vendrá a salvarnos de nuevo con el Aviso que detendrá una guerra nuclear. Esto sucederá sin duda en nuestros tiempos. La restauración que vendrá después será posible si y sólo si un resto fiel, suficientemente numeroso, sigue al Señor. Yo mantengo la esperanza de que habrá un número suficiente y que España verá el inicio de la restauración, ya que su papel histórico entre las naciones ha sido siempre este, el de ser un baluarte en la defensa y expansión de la Iglesia, dudo que esta vez sea diferente.
¿Qué relación tiene todo esto con la Teología de la Historia y las profecías al respecto?
Lo hemos ido viendo. El estudio de la geopolítica y geoeconomía, los sistemas militares y la carrera armamentística actual no deja lugar a dudas de que el conflicto multipolar estallará y que será dramático. Las profecías, antiguas y modernas, bíblicas y marianas, nos señalan la gran tribulación a la que nos encaminamos. Una tribulación que será, en palabras de Benedicto XVI, la oportunidad de una gran purificación para la Iglesia, que dará a luz a unos nuevos tiempos donde se han de verificar profecías luminosas (paz, justicia, unidad de la Iglesia bajo un único pastor…).
La teología de la historia nos ayuda a ver una gran batalla histórica multisecular contra Dios, la revolución. Las profecías nos dicen cómo acabará esta historia, humanamente mal. Pero también nos dice que el final es luminoso, que el Inmaculado Corazón de María triunfará. El triunfo de la Iglesia será sobrenatural, no humano. Pero la historia de la salvación siempre se construye con nuestros síes. Por eso no debemos perder la esperanza y debemos trabajar por la restauración, cuando el momento oportuno llegue.
Por Javier Navascués
38 comentarios
Precisamente lo que se ha abolido en la actual democracia es la representación que es el núcleo de la doctrina social de la Iglesia.
Limitada significa que no se puede legislar sobre cualquier cosa, por ejemplo contra los 10 mandamientos. Imperativa significa que el representante deba defender en el Parlamento la posición que defendió al ser elegido, de lo contrario se engaña al votante y se anula la representatividad de facto
Por otro lado las cortes castellanas no representaban a nadie. En la época de los Austria solamente se convocaban ocasionalmente y con la única finalidad de aprobar el presupuesto para la Corona.
Realmente fueron los Austria españoles y no los Borbones franceses los que inauguraron la monarquía absolutista.
2)Rusia no puede ni tomar Jarkov que está a solamente 30 kilómetros de la frontera con Ucrania, menos van a llegar a París.
Lo de Gog y Magos es como las cuartetas de Nostradamus que cada uno las interpreta a su gusto.
La OTAN es una garantía de seguridad para España, pues si no fuera por ella los conflictos con Marruecos serían mucho peores.
Imagina dos países: uno gobernado por un monarca piadoso y justo, y otro por una democracia igualmente asentada en la ley natural y la ley divina. De entrada, todo perfecto. Pero sabemos —porque lo dice San Pablo y lo recuerda San Agustín— que el pecado original no se borra con un decreto, y tarde o temprano aparece la corrupción.
Aquí está el quid: en una democracia sana, cuando los gobernantes se desvían, el pueblo tiene mecanismos pacíficos y relativamente rápidos para corregir el rumbo: elecciones, instituciones, controles. En cambio, si es un rey joven, con poder militar y la tentación de creerse ungido de por vida… ¿cómo lo sacas de ahí? Con suerte, con un magnicidio; con más probabilidad, con un baño de sangre y una guerra civil. En definitiva: mucho más sufrimiento humano.
Por eso, querido PdB, no es que la Iglesia sea “fan” de la democracia por ideología moderna, sino porque minimiza el derramamiento de sangre cuando la debilidad humana —que siempre aparece— corrompe el poder.
Y el remate, si me permites un toque teatral:
La democracia no es perfecta, claro que no, pero entre cambiar a un gobernante con una papeleta y cambiarlo con una espada… pues qué quiere que le diga: ¡bendita papeleta!
1) La Iglesia en su magisterio bimilenario no se decanta por una forma de gobierno en particular. Un rey que reine es una preferencia personal, pero en ningún caso algo condenado por la Iglesia o preferido como mal menor frente a otra fórmula de gobierno. De hecho, hay canonizados reyes que reinaron, unos cuantos. Y a Franco se le condecoró con la Suprema Orden de Cristo. La Iglesia funciona de hecho así: el Papa es un rey que reina. España en su esplendor funcionaba así, la democracia liberal sólo se impuso a sangre con el dinero y las armas de nuestros enemigos seculares, Francia e Inglaterra.
2) Cualquier manifestación de un compendio de DSI, en ningún caso se puede interpretar al margen del Magisterio anterior. Si lo hace, no es más válido por ser más reciente, más bien al contrario, si entrara en colisión con lo que siempre y en todas partes la Iglesia enseñó. Así pues, en el supuesto caso de que la interpretación que hacéis de la democracia sea la defendida por la Iglesia en las últimas décadas, me atengo al largo Magisterio ordinario y extraordinario previo que sostiene lo contrario y condena premisas que hoy van anexas al concepto democracia, como parece que entendéis quienes habéis escrito. En Libertas de León XIII y en Pascendis de Pío X están condenadas algunas de las premisas en las que se sostiene la actual democracia liberal.
3) Un rey no es perfecto, evidentemente, como tampoco lo es la democracia. Pero es más fácil la virtud de uno que de la mayoría, esto es sabido desde Aristóteles. Adicionalmente, habría que añadir que en esta patria se defendió siempre y se enseñó sin problema alguno durante siglos que el tiranicidio es legítimo en algunos casos.
4) La democracia actual, como he mencionado antes y desarrollo en el libro, os animo a leerlo, no es representativa ni respeta la limitación impuesta por lal ley de Dios ni por el principio de subsidiaridad. En tanto en cuanto no lo hace, no es la democracia de la que habla el compendio. De hecho, respecto a la mención de la OTAN, España votó en referendum su entrada bajo una serie de condiciones violadas por los sucesivos gobiernos de la Nación. Otra demostración de que la democracia que defendéis algunos no es tal, es una partitocracia donde no existe, lo repito por si ha quedado alguna duda, representatividad, que es la premisa de la DSI posterior a los principios nucleares de solidaridad y subsidiaridad.
5) Sobre lo de Rusia no voy a discutir, ud. crea lo que le parezca. Yo expongo no mi opinión, sino lo que ha sido revelado. Lo de película apocalíptica será lo siguiente, el final del Juicio de las Naciones, que explico detalladamente en un libro anterior, Señales del fin. Y sí, es apocalíptico, porque ese es el núcleo de lo que estamos por ver, anunciado ya por el profeta Daniel, corroborado por Cristo en el Evangelio y completado finalmente por el apóstol Juan.
6) No es compatible con el catolicismo negar la soberanía absoluta de Cristo rey. Si de facto no es posible establecer un gobierno que la respete, se tolera el gobierno legítimo siguiendo la enseñanza de San Pablo. Pero es deber de los católicos, si ese no fuera el caso, trabajar por el reinado social de Cristo y eso incluye una forma de gobierno que la respete.
Imagino que no se refieren a ese sistema corrupto, en el que, además del aspecto formal antes señalado, los ciudadanos, debidamente reconducidos y/o manipulados por poderosos medios de comunicación, se arrogan el derecho a saltarse cuantas veces quieran y cada vez con mayor gravedad, las leyes divinas y naturales. Es decir, la democracia en sentido MATERIAL.
La Iglesia, alma del mundo, está enferma; y por eso todo el mundo se muere.
Y sólo Dios sabe cómo y cuándo la Iglesia será restaurada.
En tanto, seamos antiliberales y antimodernistas (o sea, seamos enteramente católicos), a fin de que esa restauración se dé al menos en lo que de cada uno de nosotros depende.
-La revelación estrictamente hablando es lo que hay en la Escritura que junto con la Tradición es la fuente del magisterio y la doctrina.
Sobre revelaciones privadas hay que ser cautos y desde luego no me voy a tomar en serio revelaciones sobre geopolitíca.
-Respecto al cristianismo de Rusia creo que lo tienen bastante idealizado.
Vale que los cristianos rusos son bastante conservadores en el tema LGTB, pero le recuerdo que son ortodoxos y permiten cosas como un divorcio y un segundo matrimonio, así como que caen siempre en el ultranacionalismo y el cesaropapismo.
La verdad es que son muy hostiles al catolicismo y no es casualidad que todos los Papas en sus viajes apostólicos prácticamente han visitado todos los países del mundo excepto Rusia, donde nunca han sido invitados.
Además la sociedad rusa también tiene sus defectos: oligarquías, corrupción, alcoholismo y aborto legal.
En ese sentido los padres fundadores de los EEUU sabían que los hombres no somos ángeles y es necesario un sistema de separación de poderes y que renga controles y contrapesos.
La historia de España con sus reyes dedicándose a la caza y a sus amantes mientras gobierna un valido no es muy edificante.
No hace falta tener revelaciones para afirmar esto, y el momento será cuando ellos logren tener la proporción de fuerzas que les garantice la victoria.
Tengamos en cuenta que sólo en razón de la tasa de natalidad comparada, por el 2050, en Francia la mayoría de la población será de origen árabe; aunque para ellos no es necesario esperar tener mayoría de población sino mayoría de combatientes.
El ruso.
Dicho esto,sí quería señalar quedes obvio que señalar la democracia como el mejor sistema político es algo relativamente novedoso en la Iglesia, ya que la doctrina tradicional era que cualquier sistema político era admisible, siempre que garantizase la libertad de la Iglesia y la ley natural.
Y es obvio que para la Iglesia es mejor que poder lo detente un rey cristiano, que siga la ley natural y divina, que una democracia corrompida como por ejemplo la nuestra.
Una puntualizacion, Ceuta y Melilla y Canarias son territorios españoles que no están bajo la protección del tratado de la OTAN.
El rey de los últimos Austrias y los Borbones han despertado siempre gran apoyo en tierras castellanas, ya que son "sus" reyes, ganadores de todas las guerras civiles. Amparar este sistema con el catolicismo es una estrategia más de apoyo.
Ahora bien, si tuvieras la osadía de ponerlo negro sobre blanco, con nombre, apellidos y DNI, enviando tu acusación al Dicasterio competente y reiterándote con contumacia, no dudes de que acabarías degustando la medicina del “atar y desatar” que Cristo otorgó a su Iglesia: la excomunión oficial. Sí, con todas sus letras.
Y ojo: aunque no lo mandes por carta certificada, a los ojos de Dios ya has cruzado la raya: cismático y escandalizador. Vamos, que la ironía de todo esto es que mientras te las das de defensor de la ortodoxia, te retratas como lo contrario: un francotirador contra la unidad de la Iglesia.
Pero el P. Sauras nunca habla de la díada "Iglesia Cuerpo Místico"-"Iglesia organización", sino explícitamente, como se verá, de "Iglesia interna"-"Iglesia externa", o sea, "Cuerpo Místico interno"-"Cuerpo Místico externo".
Cita más extensa del P. Sauras:
"un tratado De Ecclesia puede concebirse de dos maneras distintas, según se considere ésta como un cuerpo regido por Cristo y sus miembros, o como un cuerpo vivificado por la gracia. Pero estaría lejos de pensar rectamente quien creyera que estas dos concepciones son independientes. (...) Por donde se ve que la Iglesia interna y la Iglesia externa no son dos entidades separadas e inconexas; están muy juntas y muy unidas (...) [sigue]
Por donde se ve que la Iglesia interna y la Iglesia externa no son dos entidades separadas e inconexas; están muy juntas y muy unidas (...)
Sin embargo, por unidas que estén las dos Iglesias, siempre habrá que concluir que son diversas, pues son distintas las formalidades de la Iglesia como elemento interno o exclusivamente teológico y de la misma como elemento externo o jurídico-teológico. Algunos teólogos protestantes acusan a la Iglesia del pecado de extrinsecista o juridista (....) Pero la acusación es del todo infundada y calumniosa. Cierto que en determinada coyuntura histórica los teólogos católicos tuvieron especialísimo cuidado en poner de relieve el elemento extrínseco del cuerpo místico (...) Las controversias con los protestantes tenían que centrarse necesariamente en el elemento externo del cuerpo místico"... Se equivoca usted, además, cuando afirma que "es evidente que puede existir la una sin la otra".
"1901 Si bien la autoridad responde a un orden fijado por Dios, “la determinación del régimen y la designación de los gobernantes han de dejarse a la libre voluntad de los ciudadanos” (GS 74, 3).
La diversidad de los regímenes políticos es moralmente admisible con tal que promuevan el bien legítimo de la comunidad que los adopta. Los regímenes cuya naturaleza es contraria a la ley natural, al orden público y a los derechos fundamentales de las personas, no pueden realizar el bien común de las naciones en las que se han impuesto."
1904 “Es preferible que un poder esté equilibrado por otros poderes y otras esferas de competencia que lo mantengan en su justo límite. Es éste el principio del «Estado de derecho» en el cual es soberana la ley y no la voluntad arbitraria de los hombres” (CA 44)
"1915 Los ciudadanos deben cuanto sea posible tomar parte activa en la vida pública. Las modalidades de esta participación pueden variar de un país a otro o de una cultura a otra. “Es de alabar la conducta de las naciones en las que la mayor parte posible de los ciudadanos participa con verdadera libertad en la vida pública” (GS 31)."
Ni siquiera dicen que la democracia sea el mejor régimen, sólo que es "preferible" y de "alabar", pero mantiene la doctrina católica clásica de la posibilidad de diversas formas de organizar la sociedad.
Además, no parece que se pueda sostener que solamente en las democracias modernas se da ese equilibrio de poderes de que habla el Catecismo.
Y encima hay que ver si esa preferencia por la democracia es doctrina de siempre de la Iglesia, que no parece, o más bien respuesta prudencial a la situación del mundo actual.
Lo único fijo y absoluto en este tema es la necesidad de que la autoridad sirva al bien común.
Y si "Los regímenes cuya naturaleza es contraria a la ley natural, al orden público y a los derechos fundamentales de las personas, no pueden realizar el bien común de las naciones en las que se han impuesto.", entonces habría que ver qué sociedad "democrática" actual cumple con ese requisito, cuando ya se pone de moda hasta meter el "aborto legal" en la Constitución.
Eso no quita, por supuesto, que se participe en la sociedad democrático, si es la sociedad en la que uno vive. Pero de ahí a canonizar la democracia hay un trecho muy largo.
En cuanto a los reyes, en sus tiempos no estaba "legalizado" ni el aborto, ni el gaymonio, ni la eutanasia, etc.
Saludos cordiales.
Aristóteles ya se dió cuenta de ello cuando observo que la democracia se deformaba en demagogia.
No se trata de enmendar la plana a un papa Santo pero no se puede negar que esa preferencia por la democracia es una novedad doctrinal (novedad indiscutible, pues solo se ha dado a partir del Concilio Vaticano II, la doctrina tomista tradicional se decantaba por la monarquía cristiana). Y da la sensación de que olvida que la democracia, por su propia naturaleza, desmantela los fueros divinos que regían viejos los Estados católicos (que no eran eran en rigor democráticos, pero que garantizaban leyes católicas). Por eso a mí juicio, desde la perspectiva cristiana y examinada el punto de vista formal, la democracia es el mejor sistema político, es también indiscutiblemente el peor que desde el punto de vista material es más impío.
San Juan Pablo II lo dijo claro en Centesimus Annus: un sistema político vale en la medida en que respete la dignidad de la persona y permita la participación responsable de los ciudadanos. Una monarquía absoluta, aunque empiece con un ángel en el trono, puede terminar con un demonio al que no puedes quitar sin sangre ni guerra.
Pero claro, según tu lógica, mejor jugárnosla al azar: entregamos el poder total a un solo hombre y rezamos para que nunca se corrompa. Eso sí que es prudencia política… igualito que disparar contra un matorral sin saber si es un jabalí o tu propio hermano.
La democracia no es perfecta (y cuando se olvida de la ley moral se vuelve un circo peligroso). Pero al menos permite corregir el rumbo sin fusiles ni guillotinas. Tú, en cambio, prefieres hipotecar el futuro de todos a la virtud eterna de un monarca… ¿será que confías más en la impecabilidad de los hombres que en la inteligencia y prudencia de los pueblos?
Y, sinceramente, algunos deberían dejar de leer novelas de caballería y de ver reposiciones de El Señor de los Anillos. Porque no, Luis, no va a llegar Aragorn a salvarte del Congreso.
En Japón durante sus 200 años de aislamiento o en Francia durante la Revolución Francesa no hubo Iglesia "externa" (organización) pero sí "interna" (Cuerpo Místico de Cristo).
democracia es una novedad doctrinal
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¡qué sorpresa verte tan preocupado por la “modernidad doctrinal”! Según tú, el discernimiento sobre las democracias en el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia es una novedad escandalosa. ¡Ay, cómo tiembla el mundo con tus revelaciones!
Quizá se te olvida que hasta hace poco las democracias eran imperfectísimas: sufragio censitario, discriminación de mujeres y clases bajas, leyes inicuas… ¿y ahora te escandaliza que la Iglesia reconozca que un sistema que permite la participación responsable de los ciudadanos es valioso? Luis, lo que tú llamas “modernidad doctrinal” es simplemente sentido común aplicado a la realidad política, no ningún invento de última hora.
Y si hablamos de novedades, ni hablemos de biomedicina y embriología: el discernimiento de la Iglesia sobre el embrión, la reproducción asistida o la genética tampoco es “un cambio de la doctrina”, sino adaptar la moral eterna a descubrimientos científicos que antes no existían.
¿Problema con las novedades doctrinales, Luis? ¡Lo que habría que preguntarse es si el problema lo tienes tú con la realidad, no la Iglesia! Que preocuparte por lo que es prudencia y coherencia moral mientras criticas avances científicos y sociales es… cuanto menos, inquietante.
Luis… y habría que preguntarle algo más: ¿ese afán de demonizar la palabra “moderno” va con segundas? Porque si por “modernidad doctrinal” estás insinuando que San Juan Pablo II y los redactores del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia son modernistas, amigo, ya empieza a oler mal.
Quizá no te diste cuenta, pero llamar “moderno” a algo que reconoce la participación ciudadana, la dignidad de la persona y la prudencia política no es herejía: es adaptarse con inteligencia y coherencia moral a la realidad histórica y social. Igual que la Iglesia se adapta prudencialmente a los avances de la biomedicina y la embriología sin traicionar un ápice de su doctrina.
Dicasterio, yo no demonizo la palabra moderno que es una palabra neutra. Hay cosas modernas buenas y cosas malas. Pero el sistema político generalizado tras la revolución francesa (y condenado sistemáticamente por la Iglesia hasta hace poco), es decir, la idea de la soberania nacional, que no se somete sino que de facto se sobrepone a la soberania de Dios y su ley divina y natural sobre los Estados, es impía. Gregorio XVI, Pio IX, León XIII, San Pío X, Pío XI y Pío XIII han defendido esto de manera clara. Y estoy seguro de que Juan Pablo II había pensado lo mismo.
Yo comparto con san Juan Pablo II el principio de que el mejor sistema político es un sistema de elecciones regulares en los que el pueblo elija al gobernante, pero siendo imprescindible asimismo que exista una Constitución que preserve principios innegociables imposibles de alterar por mayorías. Y eso es una utopía.
Gracias por las citas y la explicación sobre la doctrina de la Iglesia respecto los sistemas políticos.
Dicasterio:
Que la liturgia nueva hay que reformarla no lo digo yo, lo dijo Benedicto XVI.
La misa nueva es un desastre antitradicional, se hizo violando las directrices dadas por el CVII, dirigida por uno que muy posiblemente era mason, que desde luego hizo los cambios que quería la masonería desde el XIX y lo hizo con engaño al Santo Padre Pablo VI segun han afirmado miembros de la comision de Bunigni, inventando un canon (el segundo) en una cafetería del Trastevere...
Temerario lo es para quienes no quieren aceptar todas estas cosas que han sido confesadas por los protagonistas. No digo que la misa actual sea inválida, de hecho es a la que asisto.
Ademaa de los problemas teoricos del N.O., tenemos los practicos: nadie sigue el IGMR, que manda darse la vuelta en determinados momentos. En España, contra la tradición, se cambió mayoritariamente el rezo del Credo Niceno por el apostólico (en UK o en Italia se mantiene) y hay un deje obsesivo por evitar el Canon romano, que es el núcleo de la misa católica, una riqueza bimilenaria de la Iglesia de la que nos vemos privados la inmensa mayoría de fieles. Los fieles somos víctimas de un clericalismo antitradicional que habla de participación y sinodalidad pero en el fondo, nos niega a los fieles el derecho fundamental de vivir la misa de los Santos de todos los tiempos. Lo hacemos por fidelidad a la Iglesia, a pesar de sus errores, porque es nuestra madre.
La reforma de la reforma y la liberación total del V.O. lo vamos a ver cuando la Iglesia sea restaurada. Quienes lo vean, claro está.
Propongo que denunciemos al autor a la Santa Inquisición. ¡Ay, no!, que ya no existe. Pues metamos su libro en el Índex. ¡Ay, que tampoco! Pues le amenacemos con las penas del infierno. ¡Ay, que dice Francisco I que "(las almas malas) No son castigadas (...) las que no se arrepienten y por lo tanto no pueden ser perdonadas, desaparecen. No existe un infierno, existe la desaparición de las almas pecadoras." (https://vaticanoticias.blogspot.com/2018/04/bergoglio-y-su-herejia-del-infierno.html). "Desaparecen" como "polvo al viento", como decía la satánica canción "All we are is dust in the wind". Algunas almas no son eternas, desaparecen.
Y decirle "hereje" tampoco es mucho agravio, porque hasta Lutero tiene estatua en el Vaticano (https://infovaticana.com/blogs/cristo-era-sabio/papa-coloca-una-estatua-lutero-vaticano-dice-no-licito-convencer-fe/) y sello conmemorativo (https://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=30814).
Y en cuanto a la posibilidad de cambiar realmente en las democracias actuales ¿se refiere, por ejemplo, a la posibilidad de elegir entre el PSOE y el PP? ¿O a la posibilidad de elegir entre los que están a favor de la ideología de género y los que están en contra de ella? Me temo que esa posibilidad de elegir mira solamente a lo primero.
En los hechos, claro. Es posible que haya partidos minoritarios que no suscriban a los dictámenes de la coordinación internacional, pero por lo general no son opción real de poder.
Saludos cordiales.
Saludos cordiales.
Rusia es una autocracia ( dictadura disfrazada de democracia donde el mismo hombre gana las elecciones desde hace 25 años y controla de facto los tres poderes) y el aborto es legal y lo paga la seguridad social.
El problema no es la democracia sino la falta de un pueblo verdaderamente cristiano.
Por síntesis, solo he destacado las cosas malas de la reforma litúrgica, que con más finura y mucha más extensión se puede encontrar en los textos de BXVI.
Dios ha querido, al menos por no evitarlo pudiendo hacerlo, la reforma litúrgica. Y creo que puede incluso tener un sentido positivo en los planes de Dios.
Pero son hechos y no opiniones las cuestiones que menciono. Vivo con gratitud la misa pero lamento profundamente, más cuanto más conozco y amo la misa, no poder asistir a misas donde se respeten algunos de las costumbres tradicionales como.el Credo y el Canon Romano. Lo de darse la vuelta al altar ya ni lo menciono...comulgar de rodillas casi prohibido de facto en muchas iglesias...
Espero el día en el que la Iglesia ponga fin a estos 60 años de innovación que curiosamente, son los de la gran apostasía...¿será casualidad?
Esto es como las reformas de las órdenes monásticas, cuando uno se aleja del origen tiene que reformarse...
Creer que Garabandal es de Dios, con niñas que ven la Virgen tras robar manzanas, y bajan de espaldas por un camino empedrado de noche sin caerse,...
lo bueno de Garabandal es que no es necesario creer en estas apariciones, porque si son ciertas, muy pronto lo vamos a comprobar, en tal caso le recomiendo que cambie su punto de vista, porque hablar mal de alguna aparición de María Santísima no creo que sea del agrado de Nuestro Redentor...
Sobre la democracia, conviene leer Notre Chargue Apostolique...
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