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12.06.08

Razones para preparar con tiempo algunos cambios en el Derecho Canónico (3)

Un ejemplo de que los experimentos sí existen

Kiko Argüello puede sentirse un hombre feliz a estas horas. ZENIT ha confirmado la noticia que había circulado en Religión en Libertad hace unos cuantos días: los Estatutos del Camino Neocatecumenal han recibido aprobación definitiva. El día viernes 13 de Junio el texto será presentado en rueda de prensa, después de ser entregado, con la firma del Papa Benedicto, por el cardenal Stanislaw Rylko, presidente del Consejo Pontificio para los Laicos.

Los detalles que ofrece ZENIT tienen su interés para el tema que venimos tratando. Cito textualmente:

Este proceso de iniciación cristiana inspirado en el catecumenado bautismal de adultos es jurídicamente distinto de las asociaciones de fieles, pues se ofrece a los obispos y se desarrolla en las parroquias en pequeñas comunidades integradas por personas de toda edad y condición.

Es una anotación que puede parecer vaga pero que tiene una connotación muy vigorosa, profundamente conectada a la historia a veces tortuosa del Camino. ¿Qué es lo “jurídicamente distinto” del Camino? En esencia, que en el fondo no se trata de constituir un grupo dentro de la Iglesia, sino de darle a la Iglesia miembros renovados en la conciencia del valor de su bautismo. De aquí la importancia de la parroquia: la idea no es que la comunidad neocatecumenal reemplace a la parroquia, sino que la parroquia reciba cristianos que saben lo que significa serlo: gente que se conoce a sí misma, a la luz de la Palabra y la Gracia. Se trata pues de “una modalidad de realización diocesana de la iniciación cristiana y de la educación permanente de la fe, según las indicaciones del Concilio Vaticano II y del Magisterio de la Iglesia” (Estatutos de 2002, art. 1 § 2).

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9.06.08

Razones para preparar con tiempo algunos cambios en el Derecho Canónico (2)

Algunas enseñanzas del otro Código

Mons. Paulos Faraj Rahho, Arzobispo Caldeo de Iraq, asesinado en 2008Aquellos que se preguntan si es posible tener más de un ‘corpus’ de leyes en la Iglesia Católica pueden obtener preciosa información de la historia que condujo a la elaboración del Código de Cánones de las Iglesias Orientales (Codex Canonum Ecclesiarum Orientalium [traducción al inglés aquí], en adelante CCEO), que por cierto no aparece en el sitio web de la Santa Sede (acepto correcciones si estoy equivocado). En síntesis: existe distinta legislación porque ha existido desde tiempo inmemorial distintos ritos.

Iuscanonicum nos introduce en este fascinante mundo:

Es sabido que en la Iglesia existen diversos ritos. Por ritos se pueden entender dos realidades: por un lado un rito es un conjunto de tradiciones litúrgicas, y por otro se habla de ritos en sentido jurídico.

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8.06.08

Razones para preparar con tiempo algunos cambios en el Derecho Canónico (1)

¿Es motivo de orgullo o de inquietud que un mismo sistema de leyes, el Codex Iuris Canonici (CIC) rija para cerca de mil millones de personas? ¿Es motivo de preocupación para alguien que dos cuerpos de leyes, el CIC y el Código para las Iglesias Orientales, subsistan dentro de la Iglesia como parientes que casi nunca se saludan? ¿Hay en la Iglesia Católica la posibilidad honesta y abierta de experimentar una legislación de un modo parcial o local antes de pensar en ampliarla al ámbito de lo universal? Mi impresión es que preguntas tan arduas como estas, y aún más difíciles, tendrán que ser abordadas en el presente siglo. El impacto de las respuestas tendrá tremendas repercusiones para nuestra concepción de lo que significa el Papa, la colegialidad y la Iglesia misma.

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5.06.08

Muchos casos de lesbianismo se pueden prevenir (4 de 4)

Buscando raíces, y caminos de verdadera paz

Cuando se habla de homosexualismo–lo hemos comprobado una vez más–las reacciones suelen ser viscerales. Hubo una época en que la sola mención de la palabra despertaba burlas y amargo desprecio; hoy, por lo menos en Europa, la tendencia es juzgar todo lo que digas con el siguiente rasero: si no afirmas que da exactamente lo mismo la preferencia sexual de la gente eres un retrógrado- machista- patriarcalista- hipócrita- reprimido- homófobo- intolerante.

La defensa de los derechos de los homosexuales tiene ribetes tan emocionales en algunas personas heterosexuales que uno termina preguntándose si todo ello sucede simplemente por amor a la democracia. El trato pastoral amistoso y franco con personas homosexuales me ha abierto los ojos a una realidad: muchos afectos y relaciones hombre-mujer tienen una estructura completamente paralela a la de las relaciones homosexuales. No es ilógico suponer que cuando tantos en nuestra sociedad defienden la plenitud de derechos para los gays están quizá inconscientemente defendiendo algo que también sienten suyo, a saber, su propia manera de relacionarse, buscar afecto y tener gratificación sexual.

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4.06.08

Muchos casos de lesbianismo se pueden prevenir (3 de 4)

La tentación de “dejar en paz”

Siglos enteros de clara discriminación y agresividad contra la población homosexual hacen que una proporción notable de gente de nuestro tiempo se sienta con complejo de culpa a la hora de hablar del asunto. Algunos comentarios recibidos en entregas anteriores sobre este mismo tema así lo reflejan. Van en la línea de : “Oye, ya los hemos maltratado bastante, ya déjalos en paz…”

Dejarlos en paz equivaldría, en la práctica, a garantizar para ellos y ellas una convivencia pacífica y una integración plena dentro del aparato jurídico del Estado, así como en el desarrollo de la vida laboral, familiar, afectiva, etc. En otros términos: este “dejar en paz” no es quedarse tranquilo sino luchar por la extensión de unos mismos derechos civiles, incluyendo por supuesto el reconocimiento del matrimonio gay, su adopción de niños, y todo aquello que, por ejemplo en España, ha sido bandera del Partido Socialista.

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