(InfoCatólica) Cualquier mujer francesa que quiera matar a su hijo no nacido hasta justo antes de que nazca podrá hacerlo alegando «angustia psicosocial» y encontrando un médico que lo confirme. Ello implica que se podrán asesinar legalmente fetos perfectamente viables fuera del seno materno.
Hasta ahora la ley solo permitía el aborto en una etapa tardía del embarazo cuando el feto no podía vivir tras nacer o en caso de grave peligro para la vida de la madre, aunque en este último caso lo que se hacía era adelantar el parto y no matar al niño. Ahora, con la nueva enmienda, se habilita el 'coladero' de «angustia psicosocial»
Esa es una de las derivadas más perversas de la nueva legalidad «bioética» después de que 60 diputados de la Asamblea Nacional francesa dieran el visto nuevo al proyecto de ley. Solo 37 se opusieron. La discusión sobre la nueva ley apenas ocupó un día en la vida de los diputados.
Francia también da vía libre a la inseminación artificial de mujeres lesbianas y solteras. Y desde ya es posible legalmente la creación de embriones transgénicos, es decir, la modificación genética de embriones humanos por motivos terapéuticos (los conocido como bebés medicamento) e nicluso la creación de embriones quiméricos humano-animales mediante la inserción de células madre humanas en embriones animales.
Los obispos franceses condenaron la ley antes de su aprobación. Y una vez aprobada, Mons. Bernard Ginoux, obispo de Montauban, ha asegurado que «Esta es la vía por la que las civilizaciones mueren y se aniquila el genio de los pueblos»
#Vote de l'AN.C'est ainsi que meurent les civilisations et que le génie des peuples s'anéantit. Ceux qui viennent après nous sont en grand danger. https://t.co/qYy8YFpjXv
— Bernard Ginoux (@mgrginoux) August 1, 2020
Queda pendiente la aprobación del Senado
La cámara alta, el Senado, leerá el proyecto de ley por segunda vez, probablemente a finales de año. Se espera que el Senado modifique el texto, lo que llevará a la formación de un comité conjunto del Senado y la Asamblea Nacional que redacte un nuevo texto de compromiso que impida que estas aberraciones salgan a la luz.