La Academia Juan Pablo II para la Vida Humana y la Familia celebrará en Roma un Congreso sobre «Muerte cerebral»

Y su relación con el trasplante de órganos

La Academia Juan Pablo II para la Vida Humana y la Familia celebrará en Roma un Congreso sobre «Muerte cerebral»

La Academia Juan Pablo II para la Vida Humana y la Familia (JAHLF) por sus siglas en inglés) celebrará en Roma, en el mes de mayo, una conferencia de dos días sobre el grave problema moral de la «muerte cerebral» y la donación de órganos.

(InfoCatólica) La conferencia se llevará a cabo en Roma, en el Hotel Massimo d’Azaglio, del 20 al 21 de mayo,días después el Foro de la Vida de Roma (16-17 de mayo) y la Marcha Anunal por la Vida  (18 de mayo).

El tema de la conferencia es «La muerte cerebral. Una construcción médico legal»

JAHLF organiza esta conferencia con el fin de informar a la población general (no solo a los médicos) sobre la verdad que está detrás de la «muerte cerebral».

La «muerte cerebral» está relacionada con el trasplante de órganos. El trasplante requiere que los órganos sean frescos y viables. Pero tales órganos solo pueden obtenerse de forma óptima -aunque no la única- de una persona viva, por muy en coma que pueda estar. La necesidad de órganos llevó a la invención del término «Muerte cerebral».

«Muerte cerebral» no es una muerte natural verdadera, sino una construcción legal, preciamente con el objetivo principal de extraer órganos de pacientes en coma profundo pero aún vivos.

La conferencia está abierta a todos aquellos que deseen defender la dignidad de la persona humana y la sacralidad de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural.

Ponentes

Entre los ponentes figurarán el profesor Josef Seifert, doctor en Filosofía, los neurólogos Thomas Zabiega y Cicero Coimbra, el neonatólogo Paul Byrne, Hna. Doyen Nguyen (*), OP, hematóloga y doctora en teología moral y Fray Edmund Waldstein, O.Cist., moralista.

También intervendrán por video conferencia el doctor Alan Shewmon, profesor de neurología pediátrica y Mons. Athanasius Schneider, obispo auxiliar de Astana (Kazajistán)

Para inscribirse, haga clik aquí.

(*) Por error escribimos que la Dra. Nguyen era una fraile dominico, cuando es selgar dominica. Rogamos nos disculpen.

15 comentarios

Alejandro
Por lo que se informa veo que esta Academia tiene una posición crítica respecto de la muerte cerebral. Sin embargo, la Iglesia no la ha condenado y, en la práctica se acepta.
4/03/19 4:19 PM
twrri
Muchas gracias ignoraba esa realidad.las palabras vanas pueden llevar a medicps y familiares a sacricar a sus seres amadps como si fuesen material quorurgico.
Sacralidad y digndad es lo que nos exige respwto y veracidad.
4/03/19 5:01 PM
Vladimir
Mientras la persona respire, ESTA VIVA y, por tanto, siempre cabe la posibilidad de que se recupere.
Así pues, es inmoral extraerle órganos, porque eso implica matarla.
4/03/19 5:15 PM
Néstor
Era hora de que revisaran esto, fue bastante dudoso el modo en que ese criterio se impuso en la Iglesia bajo Juan Pablo II. Spaemann, por ejemplo, no estuvo de acuerdo.

Saludos cordiales.
4/03/19 5:25 PM
Chico
La verdad nos hace libres
4/03/19 6:42 PM
Alberto
Sin una definición de la muerte que permita el transplante, los transplantes pueden acabarse y pasar los órganos transplantables al comercio ilegal, que ya existe.

Un problema complicado. Si se abre el melón y la gente rechaza donar órganos, los receptores estan condenados a una muerte, que hasta ahora podían evitar.

Como hay gente dispuesta a pagar por órganos, el comercio ilegal de organos y los asesinatos para este comercio se generalizarán, pasando a convertirse en una industria como el tráfico de armas, de drogas, de especies protegidas, etc.

El definir la muerte es un problema moral, politico, social, económico.

Mi trabajo final de máster en NYU en 1978 era sobre este tema, con el caso de Karen Quinlan, que fue el inicio en Estados Unidos, auqnue sólo toqué los aspectos jurídicos de los acros médicos relacionados con la muerte y sus consecuencias.
4/03/19 7:50 PM
Raúl de Argentina
Alberto: Si lo que intenta decir no es un BURDÍSIMO CONSECUENCIALISMO, aclárelo porque lo parece mucho. Es más, podríamos matarlo a Ud. mismo en este momento a fin de salvar la vida de VARIOS receptores. Sólo se necesita "adaptar" un poco la definición de muerte para avalarlo.
4/03/19 8:11 PM
Alberto
Raul de Argentina, solo quería explicar un poco lo que recuerdo de ese trabajo jurídico, sin más. No soy médico ni moralista, y fui abogado mercantilista (esto jubilado hace años) y nunca he tocado ningún tema relacionado con la muerte. Me confieso un completo ignorante sobre el tema y me atengo en todo a lo que dicte la Santa Iglesia.

Los problemas bioética me son completamente desconocidos. Si que recuerdo haber leido algún dictamen sobre temas bioéticos del Instituto Borja de Bioética, de los Jesuitas, en Barcelona, que me repelia a mi sensibilidad católica.

Los problemas bioéticos van a ser los grandes problemas morales, no ya del futuro sino de ahora. Tengo obesidad en grado II y los problemas asociados a ella. Estoy mirando tratamientos de cirujia y lo que me recomiendan más es una manga gástrica que supone una mutilacion del estomago y a mi no me parece moralmente aceptable una mutilación en mi caso. Pidiendo informqcion a un hospital catolico me envian un folleto y todo lo que recomiendan son mutilaciones, y no aconsejan por ineficaces a largo plazo la cirujia sin mutilación o el balón intragastrico. No se si me la cojo con papel de fumar, es mi ignorancia bioética o mi sentido moral lo que me impide una mutilación del estómago.
4/03/19 9:32 PM
jihu
Alberto empiece por dejar el trigo y la leche y Eche un vistazo a la salud de su microbiota. Internet no es tan poco fiable como dicen.
En cuanto a esto de los transplantes es algo que clama al cielo.
La verdad es espada de doble filo. Hay mucha mentira detrás de nuestra medicina. A estas alturas tiene nivel de secta, y de las gordas. Solo hay que tirar de la manta y no tener miedo a mirar.
La medicina no desaparecerà, la buena medicina siempre estuvo ahí. Solo falta rescatarla de donde la tienen arrinconada.
4/03/19 10:04 PM
Chico
Esto recuerdo y me llama la atención: Mataban un cerdo. Lo socarraban para quitarle pelos. Lo descuatizaban. Y recuerdo que había trozos de carne que se movían. Después me he preguntado: ? Estaba realmente muerto el cerdo ?. Y si lo pasamos al cuerpo humano..... Me vienen preguntas. A ver si tienen fundamento
4/03/19 10:32 PM
Pablo
La muerte cerebral se produce cuando el órgano que oxigena al cerebro se detiene durante el tiempo suficiente como para que desaparezca cualquier tipo de actividad troncoencefálica. Para que el corazón siga latiendo es necesario que se oxigenen los pulmones y esto se puede realizar de manera asistida o artificial cuando falla la función pulmonar.

Por eso se toma la muerte cerebral como punto de no retorno ya sea antes o después de la ventilación pulmonar porque no puede reanimarse el latido del corazón de una persona sin actividad cerebral básica (vegetativa). Insuflar aire en los pulmones no significa que el corazón siga latiendo. Sin embargo, una persona cuyo corazón sí siga latiendo, aún en estado vegetativo, no puede darse por muerta. Cuando se produce una parada cardíaca pero se recupera el pulso a tiempo, aún manteniéndose artificialmente, como para sustentar las funciones orgánicas básicas, ritmo marcado por el cerebro, no puede decirse que esa persona haya fallecido.

Es decir, la muerte acaece con la parada cardio-respiratoria y posterior pérdida de la funciones vegetativas del cerebro. Cuando esto ocurre existe todavía un lapso de tiempo entre el deceso y el deterioro orgánico, por anoxia, lo que hace todavía viable el trasplante.
5/03/19 1:09 AM
G
Participé en una extracción de órganos cuando era estudiante de Medicina, en 1990. Sentí como se mataba al donante. Me produjo aquello una enorme aversión. Desde entonces, decidí que no habría donantes del órganos en mi familia. Nadie podría convencerme de que aquello era bueno.
Debemos aprender a morir.
5/03/19 5:38 AM
Vivi
No dono ni acepto órganos.
Los órganos son de su dueño , quien los necesita para vivir hasta el instante que Dios diga, esté en el estado que sea.
Basta con eso de la vida a cualquier precio, así sea a costa de matar a otro.
5/03/19 11:23 AM
Mª del PIlar
Por fin una institución hace algo para que se oiga la verdad sobre todo esto.
¡Que el Señor los ilumine y los guíe para que haya claridad sobre todo este tema tan importante!
5/03/19 10:31 PM
Néstor
Agreguemos que ha habido casos de muerte cerebral diagnosticada en hospitales en los cuales la persona luego revivió y volvió a la vida normal (los médicos insistían en que habían seguido el protocolo para el diagnóstico, es el caso del joven de Texas que se estrelló en una carretera), e incluso casos de mujeres con muerte cerebral diagnosticada que estaban embarazadas y continuaron con su embarazo hasta el mismo nacimiento de la criatura.

Saludos cordiales.
6/03/19 1:17 PM

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