(ACI Prensa) La tarde del jueves 27 de diciembre dos sujetos irrumpieron en la iglesia de María Inmaculada en Viena (Austria) y golpearon salvajemente a cinco hermanos de La Salle que administran el templo .
Según el departamento de la policía de Viena, a las 1:30 p.m. dos hombres entraron en la iglesia. Uno de los dos amenazó a uno de los religiosos de 68 años con un arma de fuego y le pidió que se tumbara en el suelo.
«Después de eso, el religioso fue golpeado varias veces con distintos objetos, lo que resultó en graves lesiones en la cabeza», indica la nota de la policía.
Luego llegó otro hermano de La Salle, congregación que administra el lugar, y le sucedió algo similar. Lo mismo pasó con otros tres más. La policía indicó que los religiosos golpeados fueron luego «atados con cuerdas, ropa y cables», y solo pudieron liberarse unas horas más tarde. Los heridos fueron trasladados a un hospital.
Según informa Deutsche Welle (DW), uno de los delincuentes exigió dinero y objetos de valor a los religiosos. El motivo del ataque aún no está del todo claro, pero se descartó que se tratara de un acto terrorista debido a la forma de actuar de los agresores. Un sexto religioso fue encerrado en una oficina y no fue golpeado. La búsqueda de los perpetradores está en marcha.
El Arzobispo de Viena, Cardenal Christoph Schonborn, dijo estar «profundamente afectado» por lo ocurrido. «Las iglesias son lugares de paz y devoción. Somos conscientes de esto aún más en este tiempo de Navidad. Lo más triste es la noticia del brutal robo», dijo el Purpurado a la agencia Kathpress.
Luego de la operación de la policía, el Cardenal se dirigió a visitar a los religiosos en el centro escolar De La Salle en Strebersdorf. «Gracias a Dios, muy rara vez sucede esto en Austria. Rezo por la pronta recuperación de las víctimas y el arrepentimiento de los perpetradores», señaló.
En la mañana del mismo día hubo una amenaza de bomba contra la Catedral de San Esteban, lo que generó una pesquisa de la policía de Viena hasta que se aseguró el lugar.