InfoCatólica / Tal vez el mundo es Corinto / Categorías: Liturgia, Homilias de viva voz

23.10.19

Las figuras femeninas amazónicas

Fray Nelson Medina: ¿Tiene Usted una postura clara sobre las figuras amazónicas esas, que incluso llevaron a una iglesia en Roma? – C.F.

* * *

Empiezo por decir que soy colombiano. Mi país tiene amplia zona en la Amazonía y tiene también otras zonas selváticas, que he conocido por experiencia directa. Debo decir que la imagen que fue llevada a Roma no es representativa de la Amazonía colombiana, y creo que de ninguna parte de la Amazonía. Alguien pensará que mi corto servicio misionero en la selva me lleva a hablar así. A quien plantee tal objeción le pido que muestre fuentes documentales serias que prueben el interés de los pueblos amazónicos por esa imagen particular, la de esa mujer gestante semidesnuda. Y que de paso nos aclare qué uso real tiene esa imagen, si es que allá se usa.

En efecto, si cualquiera de nosotros busca en imágenes de Internet los términos “pachamama,” “madre tierra,” “mother earth,” “amazonian fertility” o expresiones parecidas, lo único que sale es la alusión a este episodio de los jardines del Vaticano, o al “robo” posterior de las imágenes; o sea, todo conduce a la misma figura que hemos visto en las noticias. Aún más: si usted toma una foto de esas esculturas o representaciones y luego usa esa foto como búsqueda de imágenes en Google no obtiene una sola coincidencia. Eso sugiere algo extraño: la tal figura NO representa nada “ancestral” de la cultura de la Amazonía; no parece ser ni siquiera la obra de los indígenas amazónicos sino de algún artista (llamémosle así), indígena o no, que, apoyado por otros, ha conseguido que su talla en madera llegue hasta el centro católico más importante y visible del mundo entero. Esa persona o ese grupo de personas quieren que pensemos que ellos son representantes o voceros de los indígenas, de modo que cualquier ataque a esa imagen o a esa supuesta espiritualidad “amazónica” es un ataque a los indígenas.

Todo lo cual suscita interrogantes muy legítimos: ¿Quién es el verdadero autor de esa imagen? ¿Donó su trabajo o le fue pagado? ¿De quién fue la idea de tallar esa imagen y darle el uso que estamos conociendo, con la complicidad o negligencia de numerosas autoridades dentro y fuera del Vaticano? ¿Por qué querían que eso se realizara, teniendo en cuenta que sabían que el Papa estaría presente? ¿Por qué el Papa, al ver lo que sucedía, prefirió no decir ni su discurso ni discurso alguno, sino solo un padrenuestro, según informó en su momento Aciprensa? ¿Qué otros actos ajenos a nuestra fe están entonces premeditadamente preparados y con qué finalidades?

Leer más... »

26.12.18

Dos homilías de Navidad

Homilía de la Misa de Medianoche de Navidad

Jesucristo recién nacido nos enseña a vivir. en particular nos enseña que hacer con las cargas y decepciones que vamos encontrando por el camino. Su sola presencia en medio de nosotros transforma esa decepción en profundo asombro y gratitud y nos dispone para servir a los hermanos como él lo hizo.


Homilía del Día de Navidad

Jesucristo: tan cercano pero siempre Santo entre los santos y Señor de Majestad y Gloria.

6.02.18

¿Por qué es tan importante que las lecturas de la Misa sean siempre de la Biblia?

Un amigo que estuvo en Holanda me contó que en una iglesia, supuestamente católica de allá, habían reemplazado una de las lecturas de la Misa por un texto no sé si era de Buda o de Confucio. A mí eso me pareció extraño pero él me dijo que estábamos muy atrasados en nuestros países. Yo la verdad no supe qué contestarle pero sigo pensando que no es correcto lo que hicieron allá. Así que la pregunta es: ¿Por qué es tan importante que las lecturas de la Misa sean siempre de la Biblia? Gracias por su ministerio. – Maria C.H.

* * *

La razón principal por la que las lecturas de la Misa vienen de la Biblia y sólo de la Biblia es por la unidad que tiene la celebración eucarística. Sabemos que tiene dos partes: Liturgia de la Palabra y Liturgia de la Eucaristía. Pero esas dos partes no están sencillamente yuxtapuestas sino que tienen una unidad intrínseca que debe preservarse, valorarse y enseñarse oportunamente.

En efecto, el Cristo que se nos da como alimento es el mismo que nos habla a través de su Palabra. Dice hermosamente la Carta a los Hebreos en su comienzo: “Dios, que muchas veces y de varias maneras habló a nuestros antepasados en otras épocas por medio de los profetas, en estos días finales nos ha hablado por medio de su Hijo. A este lo designó heredero de todo, y por medio de él hizo el universo. El Hijo es el resplandor de la gloria de Dios, la fiel imagen de lo que él es, y el que sostiene todas las cosas con su palabra poderosa.”

Esto nos indica que no leemos textos de la Escritura por llenar tiempo o para inspirarnos y decir cosas bonitas sino para reconocer a Cristo y para sentir hambre de Cristo–hambre que será oportunamente saciada en el banquete del sacramento eucarístico.

25.12.17

Atreverse a decir: FELIZ NAVIDAD

El mundo laicista quiere convertir tus convicciones religiosas en ofensas que deben prohibirse. Según ese esquema el crucifijo debe quitarse porque molesta u ofende a los que sienten repugnancia por la idea de que Dios haya revelado su ser y su salvación a través del sacrificio de la Cruz.

El pesebre–siempre según el laicismo–debe quitarse porque les fastidia a los que consideran que ese “mito” no tiene que ver con ellos. Las procesiones, el texto de los mandamientos, los nombres de las calles… todo lo que enuncie lo que tú crees debe desaparecer de modo que nadie se sienta ofendido.

Lo que no explica ese esquema es por qué mi convicción es una ofensa. Si mi convicción brota de lo que identifico como mi propio ser, entonces reprimir la expresión de mi convicción no es otra cosa que la negación de lo que yo soy.

Supongamos que alguien considera que no hay prenda de vestir más absurda y ridícula que la falda. Y entonces considera ofensivo que alguien, sea hombre o mujer, use una falda. ¿Deberían prohibirse las faldas? Si alguien se siente fastidiado o humillado por que otro use una gorras o cachucha, ¿habría que prohibirlas? Si alguien considera que las sandalias son ofensivas, ¿hay que hacer una ley que las proscriba?

Dicho de otra manera: ¿por qué la ofensa subjetiva de unas personas debe convertirse en norma objetiva que coarta la expresión de las convicciones y el ser de otras?

En efecto, si nadie protestara nunca por los pesebres o los crucifijos no habría leyes que los restringen. Entonces cabe la pregunta dicha: ¿por qué la opinión de unos debe convertirse en norma coercitiva contra otros?

Sólo hay una explicación: porque a quienes detentan el poder les estorba lo que representan esas convicciones, y por ello aprovechan el supuesto o real fastidio de unas minorías para imponer lo que de todos modos quieren hacer.

Es decir: totalitarismo. Quedamos informados.

17.07.16

Anuncio de gracia

No se pueden hacer las obras de Dios si Dios no ha obrado primero en nosotros: tal es el mensaje central de esta homilía para Domingo XVI de Tiempo Ordinario, en el ciclo C. Predicación ofrecida en el Monasterio de Dominicas de Palencia, España.

Las lecturas a que se hace referencia son: Lucas 10, 38-42 y Génesis 18, 1-10a.