InfoCatólica / Mar adentro / Archivos para: Septiembre 2018, 28

28.09.18

Una olvidada prédica de San Alberto Hurtado sobre las misiones de infieles

Publicamos esta olvidada homilía “fundamentalista” e “intolerante” del infatigable sacerdote chileno San Alberto Hurtado (1901-1952) acerca de las Misiones Ad Gentes, es decir, las Misiones en países jamás acristianados.

Que la difusión de esta preciosa pieza, sacuda a la Iglesia chilena, y aún a la Iglesia Universal, y la inflame en un radical celo apostólico ad gentes.

Prosit!

P. Federico, S.E.

misionero himaláyico


Deber misional de los fieles

"Tenemos una responsabilidad: Misionar el mundo (...) Tenemos la responsabilidad del mundo entero. (...)Tenemos la responsabilidad del crecimiento de la Iglesia" (San Alberto Hurtado)“Tenemos una responsabilidad: Misionar el mundo (…) Tenemos la responsabilidad del mundo entero. (…)Tenemos la responsabilidad del crecimiento de la Iglesia” (San Alberto Hurtado)

Todas las niñas juegan con muñecas. He buscado un estudio psicológico sobre la muñeca. Nunca se le debe quitar violentamente la muñeca, pero llega un día en que para la niña deja de ser interesante. Nosotros tenemos apegos… He estudiado a mis sobrinas; desaparece en un día el apego. Y una vez dejada la muñeca, nunca vuelve a tomarla. Casi siempre desaparece el apego a la muñeca cuando es reemplazado por una responsabilidad real. Le di un libro, empezó a leer, ¡un nuevo mundo se le abrió!, y dejó las muñecas. Murió la mamá: usted va a hacer de mamá. Las muñecas ya no le interesan más… las distribuye. Ya está preparada para su papel.

Nosotros a veces nos quedamos un poco niños… ¿cómo sacar nuestros apegos? ¿Violentamente? No, arrojando sobre nuestros corazones una gran responsabilidad: una guerra, un terremoto… y se acaban los apegos.

Y tenemos una responsabilidad: Misionar el mundo desde la colina de la ascensión. Tenemos la responsabilidad del mundo entero. Nuestro Señor no va a hacer nada sino por nosotros, no va hablar sino por nosotros. Tenemos la responsabilidad del crecimiento de la Iglesia. Geográficamente es demasiado pequeña… es como un chico que tiene todos sus órganos, pero tiene que crecer… el problema de las misiones. La Iglesia debe crecer como el niño, por todo su cuerpo: pies, manos y cabeza; oye por los oídos, ve por los ojos… pero debe crecer por todo el cuerpo. La Iglesia todavía no ha alcanzado su tamaño normal. Luego todos, todos sus miembros deben contribuir al crecimiento: para que crezca por todos sus órganos. Si el crecimiento es por unos miembros y no por otros es anormal, una enfermedad y la muerte.

Leer más... »