De niños, cromos, policía, misa y la señora Rafaela
Quizá algunos no vean la relación, pero yo creo que esto tiene que ver también con eso de llevar los niños a misa. La noticia aparecía estos días en la prensa: un padre llama a la policía para que la maestra devuelva unos cromos a su hijo.
Los niños son los nuevos reyes de la creación, a todo tienen derecho y todo se les puede consentir. Algo tan simple como estar unos adultos charlando, llegar el mocoso interrumpir la conversación y no sólo no se lleva una reprimenda, sino que nos parece normal que lo haga, le escuchamos con atención y hasta decimos que niño tan mono.
Qué les voy a decir de lo que pasa en los colegios. Pobre del docente que ose reprender incluso de la forma más suave y educada a un pequeñajo. A nada que se descuide se encontrará un papá o una mamá que le van a llamar de todo por traumatizar a su niño, humillarle y no sé cuántas cosas más. Todo al revés. Ante una mala nota no se le piden explicaciones al niño por vago, sino al maestro.

Antes de nada decir que reconozco que en esto de los niños pequeños en misa hay curas y curas, pero también hay niños y niños, y sobre todo hay padres y padres.
Hace unas semanas me llegó la invitación para participar en uno de los programas de “Cuarto milenio”, que emite la “Cuatro” y que se dedica al ocultismo, los enigmas y las cosas raras. La razón es que querían hablar de unas supuestas brujas de mi pueblo, Miraflores de la Sierra, sobre las cuales un servidor había publicado alguna cosa. Evidentemente que dije que no. Soy poco dado a medios de comunicación y si encima es para hablar de ocultismo, sacar la inquisición, explotar el morbo y vivir de montar enigmas pues más a mi favor.