Pa chulo yo
Se despereza la mañana. Los primeros rayos de sol te hablan de vida que siempre vence y de la luz y el calor que te han sido dados. Agradece desde la profundidad de tu ser tantos dones que se te ofrecen para que abras tu corazón a la munificencia del Altísimo.
Abre el salterio de tu corazón. La más preciada de las liturgias es la que salta a borbotones desde lo profundo de tu interioridad. Deja vía libre. Llena el pecho de aire, tus ojos de asombro, tus oídos de los silencios y gritos de la naturaleza. La acción de gracias retoza hacia lo alto y se expande por el universo entero vociferando en silencio la gloria del eterno.

Alguna vez me llegan una especie de tests para comprobar si uno conoce perfectamente la doctrina de la Iglesia o si anda patinando por el extrarradio. Algunas de las preguntas son de una sutileza tal que uno se las ve y se las desea para salir airoso. En más de una ocasión ha resultado que tengo una supuesta fe católica que hace agua en algún aspecto.
Lo de la religión universal, la moral universal, el gobierno universal y la fraternidad universal, que en el fondo lo que quiere decir es el borreguismo universal mandando los listos, es tan viejo como el mundo y sobre todo una vieja aspiración de algunos grupos a los que antes se combatía y ahora apoyamos, veneramos y animamos.
Algo de experiencia va teniendo uno. Más de ocho años en infocatólica, doce utilizando el correo electronico como via de comunicación con feligreses y seguidores y bastante en Facebook y Twitter. Desde esta realidad me gustaría puntualizar algunas cosas sobre lo que esto es y no es, y sobre lo que servidor puede y no puede. Ya se sabe que las obviedades no siempre son tan obvias.
Mejor, nos estamos quedando ya sin curas. Los datos del día del seminario de este año son escalofriantes en España. Tanto que, por primera vez que yo recuerde, no se ofrecen desglosados por diócesis. Ya imaginamos por qué. 1066 seminaristas mayores en España. Podemos hacer cuentas. 1066 para 70 diócesis. O bien 1066 seminaristas en una población, la española, de algo más de 47 millones de habitantes. Un seminarista por cada 44.000 habitantes. Si tenemos en cuenta que se producirán abandonos, vamos a contar en un futuro próximo con un sacerdote ordenado para cada cincuenta o sesenta mil habitantes. Me da pereza entrar en la media de edad del clero.