Las espeluznantes cifras del catolicismo en Hispanoamérica
Con motivo del viaje del papa Francisco a Chile y Perú hemos conocido datos que me han producido escalofríos. Datos que publican y comentan fuentes tan divergentes como José Manuel Vidal, en Religión Digital, y Francisco José Fernández de la Cigoña en Infovaticana.
Resumiendo, nos cuentan que el catolicismo baja en tobogán en toda Hispanoamérica, al punto que tenemos ya siete naciones en las que el número de católicos no llega al 50 %. La confianza en la Iglesia desciende, la valoración del papa ha caído algo y los números cantan. En poco más de veinte años el porcentaje de católicos en Hispanoamérica ha caído algo más de veinte puntos, pasando del 80 al 59 %. La directora del “Latinobarómetro”, Marta Lagos, viendo los datos, llega a afirmar que en pocos años el catolicismo dejará de ser religión mayoritaria en un buen número de países hispanos.

Acabamos de conocer hace unos días que España lleva veintiocho años como líder mundial en donaciones y trasplantes. No es casualidad. Y aumentando. Tras España, aunque a distancia, podemos destacar la buena media de la Unión Europea, seguida por Estados Unidos, Australia y Canadá.
Yo no sé si somos memos, snobs, bobos o simplemente gilipichis, aunque en el pueblo lo dicen de forma más rotunda. Pero es que de verdad hay que ser algo de eso o todo a la vez para sacarse de la manga unos pomposamente llamados mandamientos ecológicos dentro de una cosa denominada “Decálogo verde”, que es una campaña promovida por asociaciones católicas como Cáritas, CEDIS, CONFER, Justicia y Paz, Manos Unidas y REDES (Red de Entidades para el Desarrollo Solidario).
Acaba de llegarme, como cada día, el
Es la palabra de moda. Periferias. Al lado podemos colocar otras: iglesia en salida, iglesia samaritana, iglesia hospital de campaña. Y volvemos a lo de las periferias: salir a, trabajar en, opción por, vivir en. Periferias.





