Curas casados y pan de yuca
Es el primer globo sonda que han soltado de cara al sínodo sobre la Amazonia previsto para este próximo octubre. Elemental, querido Watson. La descristianización de Hispanoamérica (no me da la gana escribir América Latina) se produjo por el celibato y el pan de trigo.
Hasta ahora, desde el siglo XV, la fe en Hispanoamérica se ha mantenido con bastante dignidad atendida por sacerdotes célibes y celebrando la eucaristía con pan de trigo ázimo como siempre. Es en los últimos años cuando lo de siempre ha ido perdiendo enteros en favor de las novedades más novedosas que incluyen, por supuesto, misas con o sin ornamentos, parece que es cuando la cosa de la fe va cayendo evidentemente por culpa de los Estados Unidos.

Es la impresión que tenemos todos con alguna excepción del todo excepcional. Nos estamos quedando sin gente. Basta preguntar a los sacerdotes por sus parroquias y lo vemos todos. Menos gente en misas, disminuyen los bautizos, las bodas por la iglesia reducidas a mínimos. Es lo que hay. En España, que todavía nos defendemos, aunque sea como gato panza arriba. Mirar a Europa, por ejemplo a Holanda, da miedo. En los últimos años se vienen cerrando un templo católico por semana. No parece mucho mejor la situación de Alemania. Tampoco en Hispanoamérica están como para tirar cohetes.
Es que llevamos una temporadita…
Discutir, debatir, reflexionar en común, contrastar opiniones hoy es tarea prácticamente imposible. Ni por lo civil, ni por lo eclesiástico. Aquí no hay más que una corriente de pensamiento única a la que hay que apuntarse sí o sí. Si lo haces serás “de los nuestros”, si te callas te toleraremos, y si llevas la contraria serás un maldito fascista.