Ojiplático
Pues así me he quedado.
El santo padre puede venir a España o no venir, que eso es cosa suya y de sus asesores, que tendrán más entendederas y conocimientos que un servidor. No necesitan dar explicaciones ni yo ni los católicos de España tenemos por qué exigirlas. Son decisiones que toma quien puede tomarlas y aquí paz y después gloria.
Creo que ha sido una sorprendente, sorpresiva, asombrosa, epatante sorpresa la razón que ha dado el santo padre en el avión que lo trasladaba a Marruecos al preguntarle periodistas por la posibilidad de un viaje a España. Según todos los medios la respuesta ha sido que “vendrá cuando haya paz”. Me temo que los primeros ojipláticos han sido los mismos periodistas que han pedido les explicara las razones de tal afirmación, obteniendo por respuesta esta vez que “él habla de manera críptica".

Hoy, en esta Iglesia nuestra de mis pecados, estamos obsesionados con lo que dice la gente de fuera y con lo que quiere la gente de dentro. Esto es lo que se quiere presentar como fomentar la capacidad de escucha. Me parece bien, aunque me van a permitir un par de precisiones.
Entre las sugerencias que me han llegado para la parroquia virtual de San José de la Sierra, bien en comentarios, bien por otros medios, hay una que destaca sobre manera. Es que la parroquia de San Jose de la Sierra mantenga una adoración perpetua virtual entre todos sus feligreses.
Dicen que hay gente que vive gracias a la prudencia de los demás. Me dicen, además, que sea prudente, y que evite que mis escritos puedan hacer daño a la Iglesia. Me hacen ver, además, que debo ser listo y apuntarme siempre a caballo ganador, o al menos, si ese caballo ganador me pareciera ful, disimular un poco. Mi problema es que hay cosas ante las que no me da la gana callarme por imperativo de conciencia.
Es lo que tiene que te pregunten cosas. Muy especialmente si el que te tira de la lengua es un obispo al final de una comida con otros contertulios eclesiásticos. Porque, claro, el señor obispo, así a lo tonto, te dice, como el que no quiere la cosa, que cómo ves la Iglesia, que si hay algo que te preocupe.





