Pecado preguntar
Contaban de un pobre rabino, de justas luces y escasos conocimientos, que, tras sus explicaciones de los libros sagrados, ante cualquier pregunta incómoda, simplemente respondía: “pecado preguntar".
Ayer conocimos la respuesta del santo padre a las dubia que sobre “Traditionis custodes” se le presentaron el pasado 4 de diciembre. Dos semanas escasas.
Las comparaciones son tan odiosas como inevitables, porque todos hemos recordado que el 19 de septiembre de 2016 los cardenales Brandmuller, Burke, Caffarra y Meisner presentaron al santo padre unas dubia sobre Amoris Laetitia sin que a fecha de hoy hayan recibido respuesta. Más aún, el 25 de abril de 2017 solicitaron una audiencia al santo padre sin más fecha que el silencio.