Ser párroco donde lo fueron los mártires
Me llegó hace unos días el libro “Martirologio matritense del siglo XX”, editado por la BAC y que recopila las semblanzas de los 427 sacerdotes y seminaristas asesinados por odio a la fe en Madrid en los días de nuestra guerra civil. Una magnífica edición que aporta interesantísimos índices que facilitan enormemente la lectura y el aprovechamiento del libro.
Uno de los mártires, D. Jesús Adoración Vázquez, me era bien conocido ya que era coadjutor en mi pueblo natal, Miraflores de la Sierra, y allí fue asesinado el 10 de agosto de 1936. Su causa de beatificación, que encabeza Cipriano Martínez Gil, formada por un total de 56 mártires, la mayor parte sacerdotes y algún laico, fue abierta en Madrid en el año 2017.
Mi sorpresa ha sido comprobar que otros tres de los mártires señalados en el libro, sirvieron algún tiempo como sacerdotes en Braojos: Gabriel Saz Álvarez, los años 1904-1905, Hilario Relaño de Miguel, en 1906, y Anastasio Martín Sánchez, los años 1921-1923.

Con motivo del fallecimiento de mi madre, va para cinco años, conté en este blog su devoción tan enorme al Corazón de Jesús. Precisamente en el día del Corazón de Jesús Él se la quiso llevar.
Las palabras no solo no son neutras, sino que marcan realmente lo que uno quiere y pretende. Leía hace unos días que por San Antón tienen un voluntario muy especial que es Cándido Méndez, secretario general que fue del sindicato UGT. No me parce ni bien ni mal sino todo lo contrario. No voy a entrar por ahí.





