9.07.17

Empeñados en conseguir una iglesia sin Dios

Y cada vez más. Pues si los “jefes” nos explican que Dios, que Cristo no nos hacen falta, que la doctrina de la Iglesia es del todo irrelevante, ya podemos dedicarnos a otra cosa y lo que tiene que hacer nuestra gente es olvidarse de cosas caducas como el pecado, la conversión, la oración o la gracia para apuntarnos a cualquier ONG laica y reducir el mensaje de salvación a puro altruismo y el cielo a un paraiso en la tierra ¿de qué me sonará a mí esto?

Leer más... »

6.07.17

La vida parroquial es una cosa muy simple

Quizá es que en la medida que uno va cumpliendo sus años las cosas se terminan haciendo cada vez más simples. O que uno se va haciendo cómodo, que también pudiera ser. Pasaron, a mí se me pasaron, los años en que todo el objetivo de la parroquia era hacer cosas, muchas cosas, mil actividades, cien grupos, movimiento, todo el día estresados, todo el día a carreras. Ya saben lo que es eso: de la catequesis a los scouts, de los jóvenes al grupo de manualidades, de la vida ascendente al grupo de liturgia, de la revista al reparto de alimentos, del teatro al ensayo, del ensayo a la misa.

Parroquias con mil actividades, doscientos grupos y creativas. Sobre todo, creativas y participativas. Comisiones, consejos. De junta en junta, de reunión en reunión.

Hoy cada vez me importan menos los grupos y tengo hecho un voto privado -perdón por la broma- de acudir a las menos reuniones posibles. Mis treinta y tantos años de cura me han conducido a dedicarme a cuatro cosas que entiendo básicas y a poner en ellas el acento. El resto se nos dará por añadidura.

Leer más... »

4.07.17

Entre la doctrina de la Iglesia y la ley civil

Está siendo noticia estos días la persecución contra D. Claudio Ballester por una homilía de hace algunas fechas. Para nada voy a meterme en el contenido de la misma, pero sí necesito reflexionar sobre algo que tenemos ya sobre la mesa. Se trata de qué hacer cuando se produce un conflicto abierto entre la doctrina de la Iglesia y la ley civil.

Dos frentes tenemos abiertos y lo que se nos viene encima. Uno, evidente, el del aborto, que será legal de acuerdo con nuestro ordenamiento jurídico, pero que es del todo inmoral con la doctrina de la Iglesia en la mano.

El otro frente es el de la ideología de género y las leyes que la amparan, entre las cuales está le conocida como “ley Cifuentes” de la comunidad de Madrid que entre otras cosas, castiga con severísimas penas cualquier expresión que se entienda de discriminación, incitación al odio o menosprecio a personas con identidades y prácticas sexuales propias.

Leer más... »

2.07.17

Más de Medinaceli: usted es intolerante, fariseo, antifrancisco e infocatólico

Me cuenta un pajarito que, desde la tarde del jueves, y especialmente la mañana del viernes, ha habido “movida” en la basílica de Jesús de Medinaceli.

Me cuentan, me dicen, que el jueves por la tarde comenzaron las llamadas, tanto a la librería como a la parroquia, al punto que hubo momentos en que la cosa se ponía especialmente molesta. Pero lo del viernes fue de antología. Algunos dicen que la causa fue el post de un servidor aquí mismo, en Infocatólica, amplificado al ser recogido en su blog por Fernández de la Cigoña. 

Leer más... »

30.06.17

La librería capuchina de Jesús de Medinaceli con banderitas arco iris

Ayer me llegaba la foto que ustedes pueden contemplar. Difusora bíblica franciscana. Tienda ubicada en los locales de la Basílica de Jesús de Medinaceli. Dos banderas del orgullo gay bien visibles. Creí que era una broma, un montaje. Gente de mi total confianza hizo una llamada a la parroquia y a la librería. No. No es ningún montaje. Las banderas están colocadas “porque para Jesús todos somos iguales y él no discrimina a nadie”. Palabras textuales de la persona que atendió el teléfono.

Esa respuesta es una simpleza y, además, mentir con toda desvergüenza. Simpleza porque eso de que ante Dios todos somos iguales es más viejo que la tos. Simpleza porque eso de que a nadie se discrimina, y en concreto por sus inclinaciones homosexuales, lo dice el catecismo de la iglesia católica, que se supone se venderá en la librería, que aquí parece que acabamos de inventar la pólvora. No hace falta poner banderitas. Basta con leer el catecismo, que, por cierto, no da calambre.

Leer más... »