Consecrationis episcopalis. El Cardenal, Otto Preminger
Película: El Cardenal de Otto Preminger.
Rodada en Santa María sopra Minerva.
Antes: Orbis Catholicus
11.10.10
Película: El Cardenal de Otto Preminger.
Rodada en Santa María sopra Minerva.
Antes: Orbis Catholicus
10.10.10
Recientemente el amigo y compañero Juanjo nos ofrecía su resumen de noticias, entre las que se encontraba ésta, que el blog Catapulta amplía y apostilla.
9.10.10
8.10.10
Visto en Secretum meum mihi.
Entrevista de Gaudium Press, Oct-06-2010 con el Maestro de Ceremonias de las Celebraciones Litúrgicas del Papa.
Gaudium Press -¿Cómo es que la Iglesia católica entiende la liturgia después del Concilio Vaticano II? ¿Cuál es el sentido, el corazón de la liturgia? El Santo Padre durante su reciente viaje a Inglaterra, en la Catedral de Westminster habló sobre la dimensión del sacrificio.
Creo que hay dos aspectos de la celebración eucarística donde uno debe estar unido al otro. Porque, como se dice también en los documentos del magisterio, la Misa es la renovación del sacrificio del Señor y, al mismo tiempo, es también el momento, el lugar en el cual este sacrificio se comunica a nosotros a través de la señal de la convicción. Por eso creo que hay dos elementos, ambos fundamentales para la comprensión de la celebración eucarística. Creo también que la dimensión sacrificial es una dimensión de fundación. Porque si no existiera el sacrificio redentor, no existiría ni la posibilidad de comunicar este sacrificio y así entrar en comunión con la salvación, la cual nos fue dada por nuestro Señor Jesús. Pienso que esto es la visión que la Iglesia nos transmite a través de su enseñanza, y que nos lleva al corazón auténtico de la liturgia.
7.10.10
Al menos así lo denuncia el amigo cato, que ha recogido una nota de “fin de gestión” del Arzobispado de Mendoza.
Católico apostólico romano. Casado, con tres hijos. Adorador Nocturno. Ingeniero Técnico Industrial e Ingeniero Industrial. De Sevilla (¡Roma triunfante en ánimo y riqueza!), hermano de Jesús Despojado y la Macarena.
Gloria Patri, et Filio et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc et semper, et in saecula saeculorum. Amen.