Una misa de ¡válgame Dios! Espero una palabra de monseñor Catalá

Recogía el otro día las declaraciones de Esteban Tabares quejándose de que en una ocasión el obispo se presentó en la clausura de una de esas reuniones de base que vaya usted a saber qué es nada menos que “para descalificar nuestro guión de celebración de la Eucaristía y presidirla él mismo con su propio ritual”.
No nos dijo cómo era su guión. Pero hoy Religión Digital describe minuciosamente la misa de clausura de este mismo colectivo de ayer mismo. Pues ya ven que por fin nos hemos enterado del famoso guión.

¿Servidor? Nada de nada. Hasta ahí podíamos llegar. Lo único que tengo con los neocatecumenales –vulgo kikos- son las acusaciones que se me hacen por algunos comentaristas en este blog de no aceptarlos ni quererlos.
Resulta que, según nos cuenta D. Esteban Tabares en una
El rato que más veo, o mejor escucho, la televisión, es el que paso en la cocina. Un viejísimo aparato que no recuerdo ni de dónde salió pero que me sirve para estar al día mientras cacharreo y limpio.
Cantamañanas: “Persona informal, fantasiosa, irresponsable, que no merece crédito”