28.01.13

La señora Rafaela. Por alusiones

No fue fácil dar con ella. Los domingos por la tarde si el tiempo anda revuelto se echan su partidita de bingo o de julepe. Pasadas las nueve pudimos hablar por teléfono, en casa. Porque tiene móvil, pero sólo lo enciende si va de viaje. Total, como ella dice, en el pueblo se la encuentra fácil.

¿Cómo estáis? Como siempre… ¿y tú, qué tal la parroquia, y la capilla? Pues de eso quería hablarte. Porque yo creo que hay que arreglarla un poco, comprar una custodia, candelabros, manteles, pero hay gente que dice que no, que nos apañemos con lo que tenemos y que lo que hay que hacer es ayudar a los pobres. Algunos me han pedido tu opinión, así que de paso aprovecho para saludarte y que me digas qué te parece.

Qué me va a parecer…

Leer más... »

27.01.13

De capilla, custodia y la cama de la abuela

Andamos de preparativos para la inauguración de la capilla de adoración perpetua en la parroquia, que tendrá lugar el domingo 17 de febrero a las 13 h., presidida por el cardenal-arzobispo de Madrid, Don Antonio María Rouco Varela.

Ayer hablaba con un grupo de personas sobre esto y una de ellas me abordó el tema de que necesitaríamos una custodia, ya que la que tenemos está muy deteriorada y le falta alguna pieza. Les dije que sí, y que además tenemos que comprar unos buenos candelabros. Precisamente el viernes he estado con el delegado diocesano de liturgia de Madrid estudiando la capilla de la adoración, su adorno, y la celebración de la misa y procesión con el Santísimo hasta la capilla.

La gente entiende que haya que montar la capilla con dignidad. Sin lujos excesivos, pero con sufciente decencia. Lo comprenden todos menos Ana, que hay que ver cómo se puso. Los argumentos, viejísimos. Que no importa que la custodia esté medio rota, que para qué candelabros si con una vela es suficiente y que no entiende que incluso nos pongamos a preparar unos manteles si seguramente habrá alguno perdido por algún cajón que pueda servir. Y que lo que hay que hacer es estar con los pobres.

Leer más... »

26.01.13

Manifiesto del norte de Madrid

Nosotros, cristianos de la zona norte de Madrid, hemos querido echar un vistazo a nuestra iglesia. Tras una serena reflexión queremos exponer nuestras reflexiones:

1. A pesar del camino recorrido como Iglesia en estos últimos años, nos causa tristeza seguir descubriendo comunidades ancladas en unos pasados años setenta, sin capacidad para responder a los retos del mundo en la hora presente. Las ideas y métodos de los setenta hoy incapaces de responder a las inquietudes e interrogantes del hombre de hoy.

Leer más... »

25.01.13

Funerales. Algunas sugerencias.

Sugerencias que hago pensando especialmente en sacerdotes y equipos de pastoral, y como una forma de explicar lo que creo que debe ser la atención a una familia que viene a pedir un funeral por alguien próximo. Lo hago pensando en grandes parroquias de ciudad. La pastoral de exequias en pueblos es algo muy diferente.

Acoger sin prisas cuando vienen. Te encuentras con una familia rota. No puedes limitarte a fijar fecha y hora. Esa familia necesita sentarse, desahogarse, explicar qué les ha pasado. Es bueno dejar que cuenten cosas de la persona fallecida, sus circunstancias, edad, estado civil, hijos, aficiones, características. Ya sabemos que la homilía en las exequias nunca debe ser un panegírico del fallecido, pero esos detalles nos servirán para acercarnos mejor a los familiares y demás fieles de forma que noten que no es un funeral más, sino algo suyo, algo, perdón por la palabra, “personalizado”.

Leer más... »

24.01.13

¿De quién es la iglesia? Rafaela responde.

Qué buen paseo por la tarde. Aunque es invierno, el solecillo asoma y una cosa así no es de despreciar. Los hombres andan echando la partida. Las mujeres, haciendo pequeños grupos, toman la vieja carretera. Siempre cosas de qué hablar. El ayuntamiento, la tele, la política, cotilleos del pueblo.

Rafaela con sus dos o tres amigas de siempre. Las mismas que se ven en la parroquia, pasean juntas, hablan y echan el rato. De frente otras tres o cuatro mujeres. El pueblo es chico, quizá por eso los desencuentros son grandes. Cosas que pasaron, viejas historias que nunca terminan.

Dos más sentadas en un banco. Fue ver a Rafaela y a las otras y no pudieron aguantarse: “mira, las jefas de la iglesia, que mucho decir que la iglesia es de todos pero luego son ellas las que lo mangonean. Menudas liantas”.

La amigas de Rafaela son de esa gente que prefiere no hacer caso y aquí no ha pasado nada. Rafaela no.

“¿Así que la iglesia es de todos, verdad? Pues todavía no os he visto ir a fregar ni un solo día. Acabamos de arreglar la calefacción, retejar y poner bancos nuevos que falta hacía. En total casi cuarenta mil euros. Somos trescientos en el pueblo, tocamos a algo más de ciento treinta euros por cabeza. Cuatro sois en casa, quinientos veinte. ¿Cuándo voy a por el dinero? Porque la iglesia es de todos pero para lo que nos conviene.”

Hala, vamos a seguir de paseo que estas ya tienen para charlas un rato. El sol, en lo alto, creo que se reía…