Noticias del 2 de Octubre de 2009
La Fundación Vida y Farmacéuticos por la Vida podrían convocar una huelga para defender el derecho a la objeción de conciencia
El director de la Fundación Vida, Manuel Cruz, y la Plataforma Farmacéuticos por la Vida denunciaron que el Gobierno de España «vulnera los derechos fundamentales de los farmacéuticos al obligarles a dispensar la píldora del día después sin poder acogerse a la objeción de conciencia». Ambas organizaciones coincidieron en lamentar «la indefensión de los colegiados,» e hicieron un llamamiento a que desde las farmacias contrarias a este producto «se tomen medidas contundentes en defensa de sus derechos constitucionales».
El Papa felicita a Manos Unidas por su 50º Aniversario
El Papa Benedicto XVI elogió en la audiencia general de este miércoles la labor humanitaria que la ONG española 'Manos Unidas' ha llevado a cabo a lo largo de sus 50 años de historia. «Deseo expresaros mi aprecio por la fructuosa labor que vuestra institución ha realizado en estos años en favor de los países en vías de desarrollo, y os invito a dar un nuevo impulso a vuestra vida de fe, esperanza y caridad, para que vuestro trabajo siga siendo signo eficaz de la presencia del Señor Jesús en medio de los que más sufren», fueron sus palabras.
Monseñor Osoro: «Lo que le falta al mundo no son productos, sino alma»
El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, dedica su carta de esta semana a las comunidades religiosas contemplativas, con motivo del 400 aniversario de la presencia de las clarisas capuchinas en la ciudad de Valencia, y afirma, ya desde el mismo el título de su carta, que «la vida contemplativa es oxígeno en estado puro». Según el prelado, «lo que le falta al mundo no son productos, sino alma» y, por ello, «lo que necesitamos no son cosas, ni armas, sino esperanza, que es precisamente lo que en la vida contemplativa se entrega».
Cardenal Rouco: «Ser sabio en esta hora de la historia es estar expuesto a ser mártir»
El arzobispo de Madrid, cardenal Antonio María Rouco Varela, presidió ayer la inauguración del curso 2009-2010 de la Facultad de Teología de San Dámaso y de entidades académicas de Filosofía y Derecho Canónico que componen este centro de altos estudios eclesiásticos de Madrid. En la misa previa al acto académico, el cardenal habló de la sabiduría del Señor y de la necesidad de conocer la Verdad. Destacando que en los tiempos actuales hay una lucha entre la sabiduría del mundo y la sabiduría de Dios y que, además, se quiere negar la sabiduría de Cristo, que es «la Verdad, la que puede llevar al hombre a la victoria», el cardenal Rouco señaló que uno de los aspectos más penetrantes –de esta Sabiduría- es que no sólo tiene que ver con la inteligencia sino también con el corazón».
Monseñor Weisgerber: «Nunca es aceptable es matar a las personas deprimidas, minusválidas, enfermas, ancianas o moribundas»
El presidente de la Conferencia Episcopal de Canadá (CECC), monseñor Vernon James Weisgerber, arzobispo de Winnipeg, ha enviado una carta en la que invita a los miembros del Parlamento y al pueblo canadiense a reflexionar sobre las posibles consecuencias de la ley C-384 cuyo objeto es legalizar la eutanasia y el suicidio asistido en el país. Subrayando el hecho de que las personas que quieren reabrir este debate están sin duda motivadas por su preocupación frente al sufrimiento de los otros, el presidente de la CECC pone en duda las motivaciones de estas mismas personas, según informa la página web de la Conferencia Episcopal.
Nuevos documentos prueban la firme oposición al nazismo por parte de la Iglesia Católica en Alemania
Nada de «Papa de Hitler». Nada de colaboradores voluntariosos del nazismo. Algunos documentos encontrados en Alemania por la Pave the Way Foundation (PTWF) prueban que ya desde septiembre de 1930, los obispos católicos habían excomulgado al Partido Nazi de Hitler. De los documentos hallados por Michael Hesemann. Colaborador de la PTWF, en septiembre de 1930, tres años antes de que Adolf Hitler subiera al poder, la archidiócesis de Maguncia condenó de forma pública al Partido Nazi. Según las normas publicadas por el Ordinario de Maguncia, estaba «prohibido a cualquier católico inscribirse en las filas del partido nacionalsocialista de Hitler».