(CNA/InfoCatólica) El gobernador de California, Gavin Newsom, prometió el 24 de octubre 140 millones de dólares para los centros de Planned Parenthood en el estado. Ese mismo día, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, comprometió 35 millones de dólares en financiación para las sedes de Planned Parenthood en Nueva York.
Ambos estados son conocidos por sus leyes de protección del aborto, que amparan a los abortistas que envían por correo píldoras abortivas a estados donde estas son ilegales. Varias mujeres han denunciado a abortistas de California y Nueva York después de haber sido envenenadas o coaccionadas por los padres de sus hijos para tomar la píldora abortiva.
Nueva York y California se suman así a otros estados que han adoptado medidas similares tras un año de retirada de fondos federales a Planned Parenthood. Colorado, Massachusetts y Washington han tomado pasos semejantes en los últimos meses para sustituir la financiación federal perdida.
Newsom declaró el jueves que California está «protegiendo el acceso a la atención sanitaria esencial» mediante la financiación de más de cien centros en todo el estado.
«Los esfuerzos de Trump por retirar la financiación a Planned Parenthood ponen en riesgo a todas nuestras comunidades, ya que las personas acuden a estos proveedores comunitarios en busca de atención médica básica», afirmó Newsom en un comunicado.
Hochul, en la misma línea, dijo que está destinando fondos a las 47 clínicas de Planned Parenthood de Nueva York, alegando que los políticos provida «no se detendrán ante nada para socavar la atención sanitaria de las mujeres».
«Ante la votación de los republicanos del Congreso para retirar la financiación a Planned Parenthood, he ordenado al estado que financie estos servicios vitales, protegiendo el acceso a la atención médica de la que dependen miles de neoyorquinos», declaró Hochul el viernes.
Cientos de clínicas alternativas existen en ambos estados
Una portavoz de Heartbeat International, una red que apoya a los centros de embarazos provida, dijo a CNA que existen muchas alternativas de bajo coste e incluso gratuitas a Planned Parenthood en todo el país, incluyendo cientos de clínicas y centros de ayuda al embarazo en Nueva York y California.
Andrea Trudden afirmó que «las mujeres en California y Nueva York ya tienen acceso a una amplia red de atención provida».
«California cuenta con más de 300 organizaciones de ayuda al embarazo y Nueva York con casi 200», añadió Trudden, citando el Directorio mundial de ayuda al embarazo de Heartbeat International.
«Estos centros ofrecen apoyo práctico, atención compasiva y recursos a las mujeres que afrontan embarazos no planificados, capacitándolas para elegir la vida para sus hijos y para ellas mismas», continuó.
Para las mujeres que necesitan atención médica no relacionada con el embarazo, Trudden señaló que ambos estados están «bien atendidos» por los Centros de Salud Calificados Federalmente, los cuales ofrecen «atención médica integral y de bajo coste para mujeres y familias».
Según un informe del instituto de políticas sanitarias KFF, en 2024 California contaba con más de 170 de estos centros y Nueva York con más de 60.
«Si los dirigentes realmente se preocuparan por la salud de las mujeres, invertirían en estas organizaciones comunitarias que atienden sus necesidades antes, durante y después del embarazo, y no en el mayor proveedor de abortos del país», añadió Trudden.
Kelsey Pritchard, portavoz de Susan B. Anthony Pro-Life America, declaró a CNA que en California Planned Parenthood «prefiere cerrar la atención primaria antes que renunciar a los beneficios del aborto».
En los condados de Orange y San Bernardino, Planned Parenthood seguirá ofreciendo abortos mientras cierra las instalaciones de atención primaria.
«En California, Nueva York y en todo el país, las clínicas de Planned Parenthood están superadas en número por opciones mucho mejores, y el movimiento provida está encantado de ayudar a las mujeres a encontrar la atención que necesitan», afirmó Pritchard, citando informes del Charlotte Lozier Institute sobre centros de atención comunitaria y centros de embarazo para mujeres.
Jennie Bradley Lichter, presidenta de March for Life, criticó a los políticos por dar prioridad a la financiación del aborto en lugar de a la atención para mujeres y niños.
«Los líderes políticos que priorizan la financiación de Planned Parenthood dejan claro dónde están sus prioridades: y no es con las mujeres y los niños», dijo Bradley Lichter a CNA.
«Es una pena que los dirigentes de estados como California y Nueva York no elijan destinar sus recursos a instituciones que realmente apoyan a las madres, como el gran número de centros de recursos para embarazadas que hay en cada uno de esos estados», añadió.
Las mujeres merecen algo mejor que la «tragedia» del aborto, afirmó Bradley Lichter.
«En March for Life queremos que las mujeres sepan que, cuando los líderes de sus estados las abandonan y las dejan en manos del gran negocio abortista, los estadounidenses provida estarán ahí para tenderles la mano y ayudarles a encontrar el amor y la atención que necesitan», concluyó.
Retirar la financiación a Planned Parenthood: un acto “que salva vidas”
Un portavoz de Live Action calificó la retirada de fondos federales a Planned Parenthood como «uno de los actos más salvadores de vidas que el Congreso ha llevado a cabo en décadas», destacando que el Gobierno federal dejó de financiar a una organización que «mata a más de 400.000 niños cada año».
«Esa victoria debe hacerse permanente cuando expire el corte de un año el próximo julio», declaró Noah Brandt a CNA. «Sin embargo, los estados proabortistas como California y Nueva York están tratando de deshacer ese progreso, utilizando el dinero de los contribuyentes para ampliar el aborto durante los nueve meses y enviar píldoras abortivas a todo el país».
«La financiación federal para Planned Parenthood no debe restablecerse nunca, y los estados que promueven el aborto deben rendir cuentas por facilitar la matanza y esterilización masiva de niños estadounidenses», afirmó Brandt.
Pritchard añadió que, aunque Planned Parenthood «no cesa de urdir planes para aumentar su control sobre el dinero de los contribuyentes», el movimiento provida ha logrado victorias en todo el país, especialmente la retirada de fondos federales a la organización.
«Que no quepa duda: están perdiendo estrepitosamente en el Congreso, en los tribunales y, cada vez más, en los corazones y las mentes de los estadounidenses», concluyó Pritchard.






