(Agencias/InfoCatólica) El portavoz socialista en la Comisión, José Martínez Olmos –secretario general de Sanidad en el anterior Gobierno–, ha subrayado la importancia de que las mujeres dispongan de forma fácil de esa píldora y ha defendido su eficacia para reducir el número de abortos, ignorando el hecho de que uno de los efectos de la medicación es evitar la anidación en el útero de los embriones, lo cual provoca el aborto de los mismos.
El PP planteó una enmienda, que no fue aceptada por el PSOE, para esperar a conocer el informe que el Ministerio de Sanidad ha encargado a un grupo de expertos sobre este tema antes de decidir sobre cómo se debe dispensar esta píldora.
El diputado Rubén Moreno ha observado que algunos informes apuntan que esta píldora se está utilizando como “red salvadora” y que está propiciando una menor utilización de métodos anticonceptivos tradicionales como el preservativo.
A favor de la propuesta del PSOE se manifestaron también los representantes del PNV, UPyD e Izquierda Plural. El diputado de IU Gaspar Llamazares, licenciado en medicina, ha faltado a la verdad al insistir en que ésta no es una píldora abortiva sino un método anticonceptivo de urgencia y en que las parejas lo utilizan para paliar los fallos de otros métodos.