¿Cómo se preparó S. José para la Navidad? (Lc. 1, 27)
El Papa Benedicto XVI nos invitó durante el rezo del Ángelus de este pasado domingo a “aprender de [María y José] el secreto del recogimiento para gustar la alegría de la Navidad” (Ángelus, 21.12.08). Fijémonos en “un hombre llamado José, de la estirpe de David” (Lc 1, 27), como le describe el Evangelio del 4o. domingo de Adviento. Él, según S. Bernardino de Siena, “Fue elegido por el Padre Eterno como fiel cuidador y guardián de sus más preciados tesoros, a saber, de su Hijo y de su esposa; cargo que él cumplió con absoluta fidelidad.” (Sermón 7). No se conserva ninguna palabra suya, pero él demuestra con sus obras y su silencio interior que “Si alguien no falta con palabras es un hombre perfecto, porque es capaz de dominar toda su persona.” (Santiago 3, 2)

Según el libro de récords Guiness, “Blanca Navidad” por Irving Berlin e interpretada por Bing Crosby en 1942 es la canción “navideña” que más tiempo ha encabezado las listas de éxitos (72 semanas) y “Noche de paz” la más cantada en todo el mundo. Ésta fue compuesta por P. Joseph Mohr y su amigo Franz Gruber (que murieron en el anonimato) dos días antes de la Navidad del 1818, cuando se murió inesperadamente el organista. La primera vez se cantó con guitarra.
Dos lectores, Ramón y Ranger, han mencionado el papel didáctico del pesebre en sus comentarios. Ranger comentó lo mucho que le enseñó su madre a través de las figuritas. Desde luego que preparar el belén es una forma muy buena de prepararse para la Navidad, de colocarnos en el acontecimiento que vamos a celebrar muy pronto. A S. Juan Bautista le preguntaron en





