Los mejores propósitos para el Año Nuevo (Lc. 2, 40)
Los judíos consideran 2009 como el año 5770 porque al año gregoriano añade el calendario hebreo 3761 años (considerado por ellos la fecha A.C. de la creación del mundo). Además, porque su calendario es lunisolar, celebran el día de año nuevo el día de Rosh Hashaná (“cabeza de año”), que suele caer en septiembre. Los judíos en Israel llaman al 31 de diciembre “Silvestre” porque en tiempos remotos lo oían de los cristianos en la región. Sin saberlo, nombran al santo del día: San Silvestre (220-337), que (según leyenda) consiguió que el emperador Constantino hiciera y cumpliera buenos propósitos tanto por su bien como para el bien de los cristianos del Imperio Romano. Aprendamos del santo cómo hacer los mejores propósitos de Año Nuevo.

Hay un himno muy popular de Adviento en latín: “Veni, veni Emanuel” basada en las Antifonías de la O de la Liturgia de las Horas, que comienza (traducida al español): “Ven, ven Emmanuel, / Libera a Israel cautivo / que gime en el exilio / privado del Hijo de Dios. / ¡Alégrate, alégrate! / Emmanuel nacerá por ti, Israel.”
Si repasamos la vida de
El desierto, árido por definición, no está muerto ya que acoge una gran variedad de flora. Hasta el Atacama, el desierto más seco, florece en abundancia bajo condiciones propicias. Del desierto surgió S. Juan Bautista como se oyó en





