"Mentiroso y padre de la mentira". Parte Iª
Jesucristo, en su Evangelio, “retrata” de este modo al Demonio: Mentiroso y padre de la mentira. Y lo clava, claro. Va directamente al ADN de este ‘personajillo’, siniestro por demás.
Pero con estas palabras, Jesús no solo lo quiere retratar. Es una adertencia y un CRITERIO para todos nosotros: para que sepamos con quién nos las hemos de ver, y de qué modo podemos y debemos vencerle: con la Verdad. Que es Cristo mismo: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Y también lo clava, “retratándose” a Sí mismo.
Es uno de esos grandes Criterios con los que nos ilustra el entendimiento, a la vez que nos arma contra este Enemigo: nuestro único y verdadero Enemigo, porque puede meternos de cabeza en el Infierno. Es lo que tiene ser católico, y creer “en” Dios, y creer “a” Dios, y creer “por” Dios.