(Vatican.news/InfoCatólica) Mons. Gallagher define lo que ocurre en Ucrania como «una guerra de desgaste» contra la que «corresponde a la comunidad internacional mantener viva la esperanza del diálogo y de la negociación».
En una entrevista con Gerard O'Connell, corresponsal en el Vaticano de la revista de los jesuitas America, el prelado recuerda su visita a Ucrania del pasado mes de mayo: «Aprendí sobre la resistencia de la gente, su determinación, su coraje – dice – pero también aprendí sobre el grado de sufrimiento que hay», subrayado por la «gran pérdida de vidas» y el miedo a que la guerra continúe.
La posición de la Santa Sede
Por esto, «sin ignorar la violencia y el conflicto», el arzobispo Gallagher subraya el papel de la Santa Sede para instar a la negociación y al «restablecimiento de la paz». Por parte de Rusia, – añade – «no ha habido ninguna invitación explícita a la Santa Sede para que medie». Sin embargo, los contactos entre ambos Estados se mantienen, «en cierta medida, a través del nuncio apostólico en Moscú». «La posición de la Santa Sede ha sido apreciada – subraya monseñor Gallagher – pero no ha ido más allá», al igual que no ha habido ninguna invitación explícita al Papa para visitar Moscú.
El arzobispo recordó asimismo «el apoyo de la Santa Sede a la soberanía e integridad de Ucrania», reiterando que «corresponde a los ucranianos negociar con los demás, y con los rusos en particular». De este «principio» se deriva que la Santa Sede no reconocería «ninguna declaración unilateral de independencia», por ejemplo, de las regiones de Donetsk y Luhansk.
El viaje del Papa
En cuanto al deseo de que el Papa pueda viajar a Kiev en agosto, monseñor Gallagher señala que el Pontífice «ha hecho grandes progresos en su movilidad», que se ha visto dificultada en los últimos tiempos debido a la gonartrosis. Sin embargo, ahora se está trabajando en el viaje a Canadá, previsto del 24 al 30 de julio, por lo que tal vez se considere «seriamente» la cuestión el mes que viene. En cualquier caso, el Papa Francisco «quiere y siente que debe ir a Ucrania», a pesar de que no hay ninguna invitación de Moscú. Ambas cosas no están conectadas«, concluye el representante del Vaticano. «Pero creo que la principal prioridad del Papa ahora mismo es ir a Ucrania y reunirse con las autoridades, el pueblo y la Iglesia católica local».