Más trabajo para el Cardenal Kasper
El Cardenal alemán Walter Kasper, destacado teólogo, es el Presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos. El Consejo Pontificio se remonta, en sus orígenes, al año 1960. En la actualidad, mantiene un diálogo teológico internacional con las Iglesias ortodoxas, con la Iglesia Copta ortodoxa, con las Iglesias malankares, con la Comunión Anglicana, con la Federación Luterana Mundial, con la Alianza Reformada Mundial, con el Consejo Metodista Mundial, con la Alianza Bautista Mundial, con la Iglesia Cristiana, y con los responsables de las Iglesias Pentecostales.
Creo que, a un abanico tan amplio, habrá que añadir la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, fundada por el arzobispo cismático y excomulgado Monseñor Lefebvre. La Fraternidad tiene como superior al excomulgado Monseñor Fellay.
El Papa Benedicto XVI, en un último esfuerzo de paciente acercamiento, ha ofrecido a la Fraternidad reintegrarse plenamente a la comunión de la Iglesia Católica, de la que nunca ha debido salir.
Según el vaticanista Andrea Tornielli, la Santa Sede exigía a la Fraternidad cumplir cinco condiciones para esa reintegración: el compromiso a una respuesta proporcionada a la generosidad del Papa, el compromiso también para evitar cualquier intervención pública que no respete a la persona del Santo Padre y que pueda ser negativa para la caridad eclesial, el compromiso para evitar la premisa de un magisterio superior al del Santo Padre y de no proponer a la Fraternidad (San Pío X) en contraposición a la Iglesia; el compromiso por demostrar la voluntad de actuar honestamente en la plena caridad eclesial y en el respeto a la autoridad del Vicario de Cristo.