Teólogos nombrados obispos

Hoy he visto en vatican.va el nombramiento episcopal de Antonio Staglianò, nuevo obispo de Noto, en Siracusa. Pertenecía al clero de la archidiócesis de Crotone-Santa Severina y era, o es todavía, el director del Instituto Teológico de Calabria, en Catanzaro. Un hombre joven, de cuarenta y nueve años, y un teólogo conocido en Italia.

Recuerdo un curso que impartía, y al que yo asistí como alumno, en la Universidad Gregoriana. Estaba dedicado a San Anselmo de Aosta, un autor al que el Prof. Staglianò conocía muy bien, como se manifiesta en su denso estudio titulado “La mente umana alla prova di Dio. Filosofia e teologia nel dibattito contemporaneo sull’argomento di Anselmo d’Aosta” (1996).

Luego llegaron otros libros; bastantes libros. Que yo haya leído, un texto sobre “La Teologia ‘che serve’” (1996) y un importante manual sobre Dios, “Il mistero del Dio vivente. Per una teologia dell’Assoluto trinitario” (2002).

En Italia, y en otros países, no sorprende que los teólogos sean nombrados obispos. A pocos se les ocurriría la peregrina pregunta acerca de cuál es su “experiencia pastoral”. Porque no deja de resultar absurdo que la cualificación teológica de un nuevo obispo suscite dudas acerca de su capacidad pastoral. Como si ambas dimensiones fuesen opuestas. Como si dedicarse a la Teología, para un sacerdote, no fuese, en sí mismo, una tarea pastoral de primer orden. O como, en un supuesto aún más triste, se pudiese hacer verdadera pastoral al margen de la Teología.

Si una palabra necesita clarificación es la palabra “pastoral”. Dice mucho y, de tanto que dice, no dice nada o apenas nada. En sí misma la pastoral es algo así como la cura de almas. O, en términos más modernos, el conjunto de actividades en las que la Iglesia realiza su propia esencia, no sólo para su propia afirmación, sino también para la entrega a Dios y el servicio a la salvación de los hombres: la proclamación del Evangelio, la Liturgia, el servicio cristiano al mundo, la dirección de la Iglesia…

¿Alguien puede decirme por qué se tiende a enfrentar la Teología a la pastoral? ¿Por qué incapacita para la cura de almas el cultivo de la ciencia de la fe; es decir, como escribe Rahner, “el esclarecimiento y el desarrollo metódicos por la reflexión de la revelación aceptada y aprehendida en la fe”?

No basta con ser un buen teólogo para ser un buen obispo. Pero si un buen obispo es un buen teólogo, mejor. Yo no me atrevería a calificar de “poco pastorales” a San Agustín, a San Anselmo, a San Buenaventura… O, más cerca de nosotros, a Benedicto XVI.

No creo preciso que todos los obispos de un país sean destacados teólogos. Pero si hay muchos, o bastantes de ellos, que lo son, mejor. En nada se pierde en lo que respecta a la “pastoral” y mucho se gana, previsiblemente, en prestigio y en crédito, una cualidad “natural” que puede ser una buena base para la autoridad sobrenatural de la que participan, por su ministerio, los obispos. Porque ya decía Santo Tomás que “la gracia no destruye la naturaleza, sino que la perfecciona”.

Guillermo Juan Morado.

5 comentarios

  
Luis Fernando
Oportunísimo artículo. Una de las misiones más importantes que tiene un obispo es la de enseñar y velar por la sana doctrina. Por tanto, cuanto más teología sepa, mejor.
22/01/09 11:10 PM
  
Isaac García Expósito
Pero sí es cierto padre, que los grandes teólogos han querido rehuir del episcopado, como sabemos de San Agustín, o como nuestro Benedicto, al que Juan Pablo II no dejó irse - una profecía de lo que habría devenir -
23/01/09 12:42 AM
  
luis
Padre, creo que pecas más de tímido que de osado: si bien no todo teologo tiene capacidad de ser obispo, TODOS los obispos deberían ser teologos. La modalidad de "superiores briosos y sin letras", como decía Mariana, adaptada a la cooptacion de la jerarquía, es una de las plagas seculares de la Iglesia. De allí la singularidad de Benedicto, uno de los pocos Papas teologos de los últimos siglos (es nás frecuente el especialista en derecho canonico). Filosoficamente, esto corresponde con una idea voluntarista del poder, y una nocion praxeologica de la autoridad, por la que los "ejecutivos" mandan. Así nos va.
23/01/09 11:34 AM
  
Ana
Mejor:asi saben más
23/01/09 1:48 PM
  
pablo
Benedicto XVI es una bendicion para la iglesia. Habla como los angeles de Dios, quien diga lo contrario es que debe de estar en otra esfera. Quien iba a imaginar que el tan denostado cardenal Ratzinger iba a ser un papa que tan maravillosasmente habla de Dios. Su teologia sana y evangelica 100%. Sus continuos esfuerzos por unir a la iglesia de Cristo. Si, como dice luis este papa telogo esta haciendo mucho bien.
24/01/09 10:58 PM

Dejar un comentario



No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.