El papa, sucesor de Pedro
Los colores del Vaticano son el amarillo y el blanco, y el escudo dos llaves entrelazadas, una dorada y otra plateada, coronadas por una tiara papal. El color de las llaves hace referencia a un pasaje evangélico. En la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: “Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?”. Simón Pedro dio la respuesta acertada: “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo”. Esa confesión de fe, que está a la base de la función primacial que Cristo le confía, no se debe a las cualidades de Pedro como ser humano, sino a la gracia y a la revelación de Dios: “Tú eres Pedro – le dice Jesús -, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará”. Y es justo en ese momento cuando Jesús le otorga el poder de las llaves: “Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra, quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos”. La plata, de ahí el color blanco, simboliza la llave que ata y desata en la tierra. El oro corresponde a la llave que ata y desata en los cielos, de ahí el color amarillo.

El Grupo Editorial Fonte da a conocer en su página web la publicación de
Camille Focant, Le Ressuscitè. Figure d’une presence autre, Les Éditions du Cerf (Lire la Bible 205), Paris 2024, 221 p., ISBN 978-2-204-16065-0, 22 €.
Uno de los grandes eventos del Año Santo de 2025 es el “Jubileo de los Adolescentes”, que se celebra del 25 al 27 de abril. La Misa de canonización del beato Carlo Acutis, prevista para el domingo 27, ha sido cancelada debido al fallecimiento del Santo Padre. Los adolescentes que vengan a Roma podrán participar en el funeral del Papa Francisco el sábado 26. El nuevo pontífice, elegido por el próximo cónclave, aprobará previsiblemente una fecha alternativa para la canonización.
Lo comunicaba en la mañana de hoy, 21 de abril de 2025, el cardenal Kevin Joseph Farrell, Camarlengo del Vaticano: “Queridos hermanos y hermanas, con profundo dolor debo anunciar el fallecimiento de nuestro Santo Padre Francisco. A las 7,35 de esta mañana el obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa del Padre”. Ayer, domingo, el Papa impartía con gran dificultad la “Bendición Urbi et Orbi” desde el balcón central de la basílica de san Pedro. Su rostro, a decir verdad, era, más que el de un enfermo, el de un moribundo. ¡Descanse en paz!












