El itinerario hacia Cristo
Triduo. Día 2. Parroquia de san Miguel de Bouzas (Vigo)
Contemplamos a Jesús, el Santísimo Cristo de los Afligidos. Queremos caminar hacia él, que es manso y humilde de corazón, para encontrar descanso para nuestras almas. Su yugo es llevadero y su carga, ligera.
El Señor interpreta la ley dada por Dios a la luz de la misericordia. Él es “el señor del sábado”. El día sagrado de los judíos, jornada de celebración y de descanso, recordaba la creación de Dios y remitía al tiempo final y, a la vez, protegía contra la explotación a las personas y a los animales.
No cualquier acción quebranta la obligación de respetar el sábado. Lo que Dios desea es “misericordia y no sacrificio”. La misericordia es el “servicio mayor a Dios”. Las acciones realizadas por misericordia y bondad no contradicen la ley de Dios, sino que nos acercan a él, nos aproximan a Jesús.

La Iglesia es una familia, complicada, sin duda, como todas las familias. Pero en la Iglesia, como en las familias, existe el afecto hacia el padre. El padre no siempre es perfecto, no siempre es el que, pensamos, debería ser. Pero es el padre.












