La alegría de pertenecer a la comunión de la Iglesia
Como lo prometido es deduda, presento ahora en el blog la crónica de la toma de posesión de D. Luis Quinteiro como Obispo de Tui-Vigo, que tuvo lugar en la tarde de ayer en la catedral de Tui. Firma la crónica la enviada especial de La Puerta de Damasco, Yolanda:
Caminar por Tui a la hora de sobremesa, en una tarde cálida aunque nublada es –salvo por lo dolorido de unos pobres pies que han pisado todos los empedrados de la zona con el más inadecuado y desacostumbrado calzado- una delicia. Me acordaba aas: placas conmemorativas, estatuas y nombres de calles recuerdan a los antecesores ilustres de don Luis Quinteiro Fiuza. Y, según don Guillermo nos explica los detalles, los tres recordamos con una sonrisa cariñosa a nuestro nakmigo antiguo alumno salesiano. Otro encanto del paseo: todo el mundo saluda a nuestro párroco virtual con muestras de amistad y reverencia. Y es que, ya lo comenté ayer, don Guillermo tiene exactamente el carácter que todos conocemos en el blog; no da ninguna sorpresa: a los cinco minutos parecía que estuviéramos con alguien a quien conocemos personalmente hace mucho. No es de extrañar, pues, ver con cuánta alegría lo saludan sus muchos conocidos a su paso por las calles tudenses.