Principios generales y derivados de la Doctrina Social de la Iglesia

Los principios generales de la Doctrina Social de la Iglesia son de primer grado y de segundo grado. Tanto uno como otro son universales, permanentes y constantes. Estos principios son reales y no meramente lógicos; algunos pertenecen a la revelación, otros son de alcance natural.

Principios de primer grado:

En síntesis son: Dios, Jesucristo, el hombre y la naturaleza.

1º.- El principio teológico.

Dios existe; Dios ha creado el universo y el hombre. Es primordial, originario y primero de la DSI. Afirma la trascendencia de Dios y su acción creadora y providente. El hombre, y por ende su dimensión social, tiene su origen en Dios. Dios es causa primera, fundamento último y finalidad de toda forma social.

Es un principio de razón y de fe.

2º.- El principio cristológico.

Jesucristo es Dios hecho hombre. Jesucristo ha redimido al hombre. Es un principio de fe. La DSI presupone, afirma y proclama la divinidad de Cristo.

La encíclica Quas primas dice que (8)

bajo la autoridad de Cristo se halla toda la humanidad (…) Cristo tiene autoridad sobre todas y cada una de las realidades sociales del hombre

3º.- El principio antropológico.

Con este principio se quiere significar la primacía del hombre – subordinada a Dios y a Cristo – sobre todo lo material, incluso formas y ámbitos de la convivencia humana. En definitiva afirma la dignidad de la persona, ya que el hombre es «imago Dei».

Este principio surge de la razón y de la fe.

4º.- El principio del derecho natural.

En conexión con los tres anteriores afirma la existencia de la naturaleza, que su origne es divino y que, además, posee un orden.
Pío XII afirmaba que la Iglesia se había preocupado siempre de suscitar, mantener y hacer eficaces el conocimiento y la conciencia del derecho natural. La encíclica Gaudium et Spes reitera esta enseñanza (GS 16; 23; 74).

Por otro lado, Pablo VI propuso tres preguntas a las que dio sus correspondientes respuestas:

1.- ¿Existe realmente un derecho natural? Sí, la no escrita, la ley natural.

2.- ¿Es suficiente la ley natural para guiar la vida social del hombre? No, necesita expresión positiva.

3.- ¿Es el derecho positivo justo en sí mismo? Sí, si se ajusta al derecho natural; en caso contrario, no.

En síntesis, el principio sobre el orden de la naturaleza afirma el destino universal de todos los bienes materiales creados para todos los hombres.

Principios de segundo grado:

Proceden de los anteriores y son, a saber:

1º.- La solidaridad, expresión de la radical fraternidad humana.

2º.- El bien común.

3º.- La subsidiariedad. Afecta de forma directa y permanente a la autoridad social.

4º.- La participación, propia de los gobernados.

5º.- La vida social, concebida armónicamente.

6º.- La justicia social.

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