Los curas podemos morir de pie como los árboles
Leo en los últimos días que algunos curas que están o han estado dentro de los medios de comunicación social imitan y copian los defectos que conlleva estar en un estudio de televisión dirigiendo un programa o como invitados.
La verdad es que la fama producida por los espectadores, el gusanillo alimentado por los oyentes, y el eco de las voces de los lectores sube la autoestima personal, y los curas que estamos en medio de un medio de comunicación social nos puede dar esa enfermedad llamada: celebritis carcinosa progresiva, la cual, según mi confesor, consiste en morir de éxito quedando de pie como los árboles viejos y carcomidos, apoyándose en otros compañeros del bosque inanimado.
Es cierto. Si un sacerdote desea hacer pastoral en un medio de comunicación, está haciendo una obra buena, pero cuidado con los halagos mundanos, cuidado con quedarse en la vaciedad de los medios informativos.