Católicos en paises islámicos: ¿estar por estar?
Es una pregunta que me hago muchas veces. Si tiene sentido la presencia cristiana en países islámicos y en caso afirmativo, qué sentido.
Parto de las últimas palabras del maestro en el evangelio: “id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
y enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado”. Es decir, que con el evangelio en la mano, que hay que leerse enterito, y añadiendo el decreto conciliar “Ad gentes” que lo explica de forma convincente: “La misión, pues, de la Iglesia se realiza mediante la actividad por la cual, obediente al mandato de Cristo y movida por la caridad del Espíritu Santo, se hace plena y actualmente presente a todos los hombres y pueblos para conducirlos a la fe, la libertad y a la paz de Cristo por el ejemplo de la vida y de la predicación, por los sacramentos y demás medios de la gracia, de forma que se les descubra el camino libre y seguro para la plena participación del misterio de Cristo”, estamos entre no creyentes para que crean en Cristo, se bauticen y entren a formar parte de la Iglesia.

Pues voy a ser sincero. Tenía un servidor más miedo al asunto que labrador a pedrisco en plena cosecha. Cuando por primera vez lo solté en Infocatólica no las tenia todas conmigo ni muchísimo menos. Pero Dios lo quiso y los fieles se dejaron arrastrar por la gracia. Este próximo martes celebraremos el segundo aniversario.
Manolo se ofreció un día buenamente por si podía echar una manita en la catequesis de los niños. Pobre Manolo. No hay cura que se resista a un ofrecimiento así y menos si el oferente es cristiano de misa dominical y muy buena gente.