Aplausos en el sínodo de los jóvenes que no sé qué aplauden
Muy poca la información que nos llega del actual sínodo de los obispos dedicado a los jóvenes. Es curioso que en esta época en que los medios son inmediatos y todo el mundo va por ahí con su teléfono inteligente en la mano, tan pocas cosas se sepan. Ya en ocasión del sínodo de la familia me preguntaba si, en aras de una mayor transparencia, no sería factible y muy conveniente que se transmitieran en directo no digo los trabajos de los grupos, pero sí al menos las reuniones plenarias.
Leo hoy en la prensa digital que en las últimas horas dos propuestas, una de un joven y otra de monseñor Rino Fisichella, levantaron aplausos prácticamente unánimes de toda la asamblea sinodal. Algo es algo. Parece que hay propuestas en este sínodo dedicado a “Los Jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional” que suscitan entusiasmos del todo indescriptibles. Interesante conocerlas porque nos pueden dar pistas claves para comprender por dónde podrían apuntar las conclusiones.

Lo de enterrar a Franco en la cripta de la Almudena, si no fuera porque es una cosa muy seria (sacarlo del Valle, y luego a ver qué pasa con todo aquello, incluyendo la propuesta de IU y Podemos de derribar la cruz y desacralizar la basílica), daría de sí para una novela-mejor una serie- del mejor Vizcaíno Casas (q.e.p.d.), unas cuantas películas de Berlanga (q.e.p.d.) y una exhibición de Alfredo Landa (q.e.p.d.) y lo mejor del cine español.
Hace un rato. Rafaela, porque el nombre me vale y es igual quien haya llamado a este cura. Pues eso, una Rafaela. Anciana, hijos, nietos… fe a prueba de bombas y escándalos y un amor a la Iglesia que no le cabe en el pecho.