Esa gilipulluá de vivir el momento presente
Es que, ya ven, hablando con una de esas personas que se dirigen a ti impostando la voz a la vez que mantienen un tono cálido y sugerente a la vez que pareciera propio de quien va a abrir para ti el último sello oculto de la gran revelación y te concede seas iniciado en los misterios de la fe, la vida y la esencia de tu propio yo.
Imaginen. Todo a la vez: voz cálida y susurrante, sonrisa de complicidad a la vez que de superioridad y suficiencia y la frase definitiva: “Jorge… lo único que importa es vivir el momento presente".
Mi respuesta fue tan clara como escueta y contundente: “vete a la …".
El caso es que tras mi respuesta, comprendo que fea y poco educada, pero no me negarán que tumbativa, me puse a escribir. Un post largo, lo sé, pero es que a veces las cosas se te salen de madre. Mis disculpas por adelantado.