(El Norte de Castilla) Según el prelado, “todas las universidades del mundo contribuirán al verdadero progreso y desarrollo de las diferentes naciones del mundo”. El representante vaticano ha puesto como ejemplo la evolución de las universidades católicas en Asia, usando como patrón la ciudad de Manila, donde se encuentra la más antigua del mundo, y de la que ha destacado que a pesar de la minoría católica existente, el centro cuenta con 50.000 estudiantes, muestra de su “buena salud”.
Bonanza que también ha deseado a la Universidad Católica de Ávila, organizadora del evento, una universidad “joven y nueva”, aunque “aún pequeña”, a la que ha vaticinado un crecimiento “de la misma forma”.
Formar a toda la persona
En cuanto a datos, el cardenal Grocholewski ha informado de que en la actualidad estas instituciones alcanzan la cifra de 1.500, dispersas por todos los rincones del mundo, y responsables de “no solo transmitir el saber o una capacidad intelectual, sino también formar a toda la persona”.
Por su parte, el secretario de la Conferencia Episcopal, monseñor Juan Antonio Martínez Camino, quien también ha estado presente en el acto inaugural del Congreso, ha centrado su discurso en la importancia de “hallar la verdad para así dar sentido a las universidades católicas”.
El prelado ha subrayado que la universidad busca la verdad “libremente, más allá del utilitarismo de la fe, del relativismo y del politeísmo disfrazado bajo tapa de tolerancia, más allá del subjetivismo y del querer o sentir”. Por ello, destacó que “cuando se busca la verdad, se busca a Dios”, afirmación que supone “la finalidad de cualquier centro”. Recordó que las universidades católicas se posicionan en “el origen de la cultura por cronología y deontología”.