(Análisis Digital / InfoCatólica) Entre los fines de la Universidad recién erigida se pueden destacar los siguientes: profundizar en el conocimiento de la Revelación cristiana y en todos los estudios relacionados con ella; ofrecer una formación académica de grado superior en las distintas ciencias eclesiásticas, con especial atención a los sacerdotes y candidatos al sacerdocio; hacer presente la fe católica en la cultura de nuestro tiempo, en diálogo con las distintas instancias de nuestra sociedad, sobre todo a través de la labor investigadora de los profesores y de los ciclos de máster y doctorado.
La Universidad consta de las siguientes Facultades: Teología, Filosofía, Literatura Cristiana y Clásica San Justino y Derecho Canónico, así como el Instituto Superior de Ciencias Religiosas San Dámaso.
Javier Prades, Delegado del Gran Canciller
Con este motivo, Análisis Digital ha hablado con el Delegado del Gran Canciller, Javier Prades, que ha expresado su “agradecimiento” en nombre de todos los que integran los Centros Académicos ‘San Dámaso’ la erección de la Universidad porque significa “un reconocimiento muy importante del valor educativo de nuestras instituciones por parte del Santo Padre y de la Congregación para la Educación Católica”.
Según destacó, para los profesores y alumnos que se están formando actualmente en la recién erigida Universidad, la noticia sirve de “estímulo muy grande para una mayor dedicación de los profesores, y para una mayor, si cabe, seriedad en su trabajo diario”.
Estima y reconocimiento de profesores y alumnos
Para Prades, es de destacar la diligencia con la que la Congregación para la Educación Católica ha tramitado la solicitud de los Centros Académicos ‘San Dámaso’ de convertirse en Universidad, así como que la noticia haya sido anunciada poco antes de la venida del Papa a Madrid. Se trata, a su juicio, “de la culminación de un proceso que comenzó hace ya muchos años y en el que han contribuido muchas personas y siguen contribuyendo con su trabajo y esfuerzo”, afirmó, “un signo de estima por el trabajo de los profesores y alumnos y un reconocimiento para el Gran Canciller, Cardenal-Arzobispo de Madrid, Antonio Mª Rouco Varela”, manifestó. “Es, añadió, algo que debemos destacar y valorar”.
“Para nosotros, prosiguió, la venida del Papa es una ocasión preciosa y los profesores jóvenes de ‘San Dámaso’ quieren participar en el encuentro con el Papa”, en referencia al acto previsto para el viernes, 19 de agosto, en la Basílica de San Lorenzo de El Escorial, donde el Santo Padre se reunirá con profesores universitarios jóvenes, a quienes dirigirá un discurso.
Nuevas posibilidades académicas y eclesiales
La Diócesis de Madrid cuenta a partir de ahora por primera vez con una Universidad dedicada en exclusiva a las ciencias eclesiásticas, a las disciplinas directamente relacionadas con la evangelización de la Iglesia. Además, para Madrid es “un salto cualitativo que enriquece la formación de seminaristas, religiosos, religiosas y laicos de Madrid”, aunque también, a través de la Universidad, se experimenta “una gran riqueza y una renovación de la vocación misionera de la Iglesia”. Y es que vienen muchos alumnos de otros lugares de España, de América Latina, de Asia y de África a estudiar en las aulas de San Dámaso.
A partir de este momento, la Universidad Eclesiástica ‘San Dámaso’ pasa a incorporarse a la lista de universidades europeas que se integran en el Espacio Europeo de Educación Superior previsto por el plan Bolonia. “Se abren muchas posibilidades que enriquecerán nuestro camino académico”, explicó, como, por ejemplo, en lo relativo a titulaciones, convenios con otras realidades académicas, acuerdos de colaboración, intercambios de profesores…
Comentó, también, que desde el punto de vista de los programas educativos, seguirán vigentes los planes de estudio de cada Facultad, aunque sí se modificarán los estatutos y se aplicarán los nuevos aprobados por la Santa Sede, lo que implica un cambio en los órganos de Gobierno y en el estatuto del profesorado.