(Efe) El juez de San Francisco Vaughn Walker recientemente revocó la prohibición de los matrimonios homosexuales en California, al considerar que la legislación que los prohibía atentaba contra los derechos fundamentales recogidos en la Constitución de EEUU.
El panel acordó llevar a cabo una audiencia sobre el caso durante la semana del 6 de diciembre y ordenó a ambas partes presentar argumentos acerca de si la Proposición 8 tiene rango legal para apelar la decisión judicial de Walker.
El magistrado Walker consideró que la Proposición 8, aprobada en referéndum en noviembre de 2008 en California y que reformó la Carta Magna del estado para definir el matrimonio como un enlace entre un hombre y una mujer, no era compatible con los principios fundamentales constitucionales.
La decisión de Walker ha sido el último movimiento en una larga batalla legal entre defensores y detractores de las bodas entre personas del mismo sexo en California, que se remonta al año 2000, cuando un 61,3% de los electores aprobó en las urnas la Proposición 22. Esa iniciativa modificó el código civil del estado, restringiendo el matrimonio al enlace entre un hombre y una mujer.
Entre 2000 y 2008, el caso de las bodas entre homosexuales y la validez de la Proposición 22 llegó a los juzgados californianos, aunque las diferentes cortes de apelaciones optaron por mantener la prohibición a esas bodas. El 22 de mayo de 2008, la Corte Suprema de California terminó por revocar la Proposición 22, por considerar que iba en contra de los principios constitucionales de su territorio.
Los californianos, contra el matrimonio gay
Sin embargo, seis meses más tarde y después de que 18.000 parejas del mismo sexo pasaran por el juzgado, los electores anulaban la sentencia del Supremo en las urnas.
El 4 de noviembre de 2008 el 52,2% de los votantes aprobaba en referéndum la Proposición 8, una iniciativa promulgada por grupos conservadores con el fin de reformar la Constitución de California para consagrar el matrimonio como un derecho sólo aplicable a las uniones entre un hombre y una mujer.
Los matrimonios entre homosexuales son legales en EEUU en los estados de Massachusetts, Connecticut, Vermont, Iowa, New Hampshire y en el Distrito de Columbia.