(Aci/InfoCatólica) Con este acuerdo y con la Nuclear Posture Review, indicó, "se avanza hacia la meta de un mundo sin armas nucleares, se reconoce el peligro del terrorismo nuclear y se reduce el uso de este tipo de armas".
"Estas instrucciones moralmente son correctas, pero se necesita más progreso para llegar a nuestras responsabilidades morales para librar al mundo de esta desproporcionada e indiscriminada amenaza a la vida humana", explicó.
Citando al Papa Benedicto XVI, Mons. O’Brien señaló que "en una guerra nuclear, no habría vencedores, solo víctimas".
"Pese a que siempre debemos mirar el horizonte hacia un mundo sin armas nucleares, es igualmente importante concentrarnos en los siguientes pasos porque el camino es largo y peligroso y debemos avanzar paso a paso si queremos tener éxito", dijo luego.
El Arzobispo de Baltimore hizo estas declaraciones como parte del panel titulado: "La ética de la política de armas nucleares de la administración Obama".